MediEvil, el regreso del palad¨ªn de PlayStation

Pocos estudios tiene Sony con un curr¨ªculum lleno de obras tan buenas y reivindicables como SCE Cambridge Studio. Autor de joyas como Primal o Ghosthunter en PS2, SCE siempre tuvo su mayor creaci¨®n en el que fue su primer juego en 3D: MediEvil, un exclusivo de la primera PlayStation que hace 21 a?os nos present¨® a Sir Daniel Fortesque, h¨¦roe de pacotilla y realmente feo de cara -el libro de arte revela su cara normal- que a la postre ha pasado como uno de los iconos de Sony.

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Y es que, con apenas 3 juegos en total en dos d¨¦cadas y una aparici¨®n en ese intento ¡®Sonyer¡¯ de subirse al carro del ¨¦xito de Super Smash Bros que fue el olvidado (y divertido, ojo) PlayStation All-Star Battle Royale, Sir Daniel sigue siendo recordado, aunque ya hayan pasado 14 a?os desde aquel MediEvil Resurrection de PSP. Por ello, cuando en plena fiebre de remasters y remakes Sony anunci¨® que uno de sus personajes de la primera Gen PlayStation se someter¨ªa a un cambio para salir remozado y lucir guapote en PS4, el hype y las ganas de tenerlo de nuevo con nosotros estaban disparadas, m¨¢xime con la fecha tan ideal elegida por Sony: a 1 semana de Halloween.

El H¨¦roe de Gallowmere contra el Brujo Zarok, Toma 3

Para quienes no lo hayan jugado, la serie MediEvil es una mezcla de hack ¡¯n slash en 3? Persona con dosis de exploraci¨®n, puzzles y plataformas. Una mezcla habitual en la 5? Generaci¨®n en la que los puzzles act¨²an como una suerte de ¡®barrera¡¯ para frenar el avance cuasi lineal de MediEvil. Como buen hack ¡¯n slash, es pegar y avanzar, pero su gameplay se hace m¨¢s complejo dot¨¢ndolo de m¨¢s elementos. De esta forma, su definici¨®n b¨¢sica es una suerte de Ghost & Goblins en 3D dise?ado por Tim Burton y musicado por Danny Elfman.

B¨¢sicamente, este nuevo MediEvil es una versi¨®n entre remasterizada y remakeada del primer juego de la serie, lo que vendr¨ªa a ser oficialmente la 3? vez que vivimos la misma historia -el MediEvil de PSP era un remake con mejores controles y nuevos escenarios y elementos. El estudio Other Ocean Emeryville, con experiencia en t¨ªtulos Double Fine como Stacking, Costume Quest 2 y tambi¨¦n autores de Thimbleweed Park o el Minecraft de New 3DS, ha preferido desechar los cambios en el MediEvil de PSP para quedarse con la fuente original. ?El resultado? Pues un juego que quienes hayan jugado al original reconocer¨¢n enseguida, porque lo sigue a pies juntillas tanto en la trama como en los escenarios.

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La intro con la historia de Gallowmere, la CGI del brujo Zarok -que en la ¨¦poca de PSX nos parec¨ªa la ostia y hecha por Pixar casi-la cripta de Dan, el cementerio¡­ Todo est¨¢ ah¨ª, pero con cambios. Aunque menos de los que nos habr¨ªan gustado, porque si de una forma podemos definir al MediEvil de PS4 es como un remaster en lo jugable y un remake en lo gr¨¢fico.

La Galer¨ªa de los H¨¦roes

El mapa del Overworld sigue ah¨ª, y el viaje de Dan en pos de llegar a la guarida de Zarok se mantiene. A ello le sumamos que hay algunos instantes en que la campa?a nos permite elegir entre varios caminos. Y tambi¨¦n tenemos la Galer¨ªa de los H¨¦roes, un lugar al que para acceder debemos obtener un c¨¢liz oculto en cada nivel que adem¨¢s se debe rellenar de almas.

Encontrarlos todos desataba el final verdadero en el MediEvil de PSone, ?pasa lo mismo en el de PS4? Tendr¨¢s que jugarlo para saberlo, aunque sin duda le a?ade un agradecido elemento de ¡®backtracking¡¯ al desarrollo cuasi lineal para que explores y vuelvas sobre tus pasos antes de seguir a otro de los 22 niveles que tiene, en los que la variedad de escenarios y enemigos es una de sus bazas. MediEvil es un juego con una campa?a de unas 7-8 horas, aunque pueden ser m¨¢s dado sus Jefes Finales de dificultad desigual y tambi¨¦n un elemento que demuestra su condici¨®n de juego de la Vieja Escuela: los checkpoints.

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Un remaster en lo jugable - La c¨¢mara Infernal

Una cosa que tiene este MediEvil es que sirve para estudiar la diferencia entre remaster y remake, qued¨¢ndose a medio camino en general pero con elementos que lo acercan a una u otra definici¨®n. Lo peor, lo que lastraba de verdad el original eran sus controles y su c¨¢mara, y eso pasaba porque SCE no ten¨ªa experiencia en juegos 3D. La c¨¢mara se ha retocado, se ha suavizado y eso se nota mucho, pero no tanto como querr¨ªamos.

En la mayor parte del juego es libre, y se recoloca manualmente usando el stick derecho, pero su velocidad es lent¨ªsima, no se puede personalizar y por tanto da la sensaci¨®n de frustraci¨®n cuando necesitamos cambiarla con rapidez y tenemos que esperar a que haga el lento paneo. Si necesitamos un giro de 180? en la vista podemos pulsar los dos botones superiores del pad. Y con uno de ellos pulsado cambiamos a una util¨ªsima vista sobre el hombro de Fortesque, ideal para ver los detalles del escenario -pero cuidado al usarla en el combate, porque es un caos.

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?Qu¨¦ sucede entonces? Que el dise?o de algunos escenarios, o de zonas dentro de esos escenarios provoca que la c¨¢mara se atasque (es Old School incluso en eso), y nos deje vendidos ante los enemigos o los obst¨¢culos quita-vidas como los pu?eteros pinchos de cristal. Tambi¨¦n tiene otro elemento ¡®retro¡¯ como es el salto a una c¨¢mara prefijada en determinados escenarios -ya lo notar¨¦is en el Asylum Grounds-, que lo convierte en un Resident Evil y de nuevo fastidia en cuanto a los enemigos, adem¨¢s de otorgarle brusquedad a veces al avance con el cambio inesperado de perspectiva, una pena dado el enorme dise?o de algunos niveles.

El Arsenal de Sir Dan

Vamos ahora al sistema de combate. Hablamos de un hack ¡¯n slash, con la diversi¨®n que ello supone, pero muy limitado. Tenemos dos ataques cuerpo a cuerpo y dos a distancia, con un tercero que consiste en cargar uno de los ataques para hacer m¨¢s da?o. Podemos defendernos con el escudo y avanzar de lado en paralelo, aunque la mayor¨ªa de las veces estar¨¦is machacando el bot¨®n del ataque sencillo y cargando el del ataque fuerte contra unos enemigos que parecen globos flotantes del poco peso que tienen.

Por suerte, tenemos un buen arsenal de armas en el que se mezclan espadas largas, m¨¢gicas, porras -que puedes usar para encontrar secretos-, ballestas, cuchillos para lanzar y hasta patas de pollo con su propia skill -geniales, porque cada enemigo al que golpeamos nos suma salud. Sin duda, golpear a distancia con la ballesta es lo mejor para no perder la salud ni las armas. La gracia est¨¢ en que algunas tienen proyectiles limitados, otras un % hasta que dejen de ser ¨²tiles. Algunos enemigos hasta pueden rob¨¢rnoslas, y s¨®lo podemos equipar 2 a la vez que ir alternando en tiempo real -sin duda de las mejores novedades que le han metido al juego.

Esto le da vidilla al sistema de combate, que por otra parte acusa su tiempo y ligereza, volvi¨¦ndolo simple y a veces impreciso, siendo absurda la comparaci¨®n que la propia Sony ha hecho con Dark Souls -los que no hay¨¢is jugado a MediEvil y pens¨¦is que es un Dark Souls Burtoniano, ni de lejos.

Esto es Halloween¡­

Entonces, ?a qu¨¦ viene esa nota? Al encanto que supura todo el juego, a la experiencia que es MediEvil, que en el apartado gr¨¢fico s¨ª que es un remake y no un mero salto de resoluci¨®n. Todo luce m¨¢s colorido, con un buen sistema de iluminaci¨®n, un conjunto g¨®tico-medieval de calabazas, espectros tocando ¨®rganos de Iglesia, zombis de chichinabo, espectaculares Bosses como el de la Cristalera -el gui?o a Pixar, por cierto. Un sentido cartoonesco que el Tim Burton de los 90 firmar¨ªa sin duda.

Nada mejor que ponerse una comparativa de MediEvil en PSX y en PS4 para ver la diferencia a este nivel. Una pena que el framerate petardee a veces, aunque en general mantiene los 50-60 frames-, y que muchas de las texturas aprueben m¨¢s por colorido que por calidad. Aunque en s¨ª el conjunto entra por los ojos.

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Y sonoramente, esto es de 10 absoluto. La BSO, que ya en el original era una joya del d¨²o Bob ¡¯n Barn, ha sido regrabada con una orquesta para que suene m¨¢s potente, manteniendo los manierismos Elfman que inspiraron la original: estallidos orquestales, coros en Fort¨ªssimo, ¨®rganos, tubas¡­ A ello le sumamos un redoblaje en castellano de lujo como los que acostumbra Sony, que mejora al original y con la sorpresa de conservar varias de las voces que ya escuchamos en 1998 -excepto en algunos casos como el narrador de la intro.