Mars Matrix (Dreamcast)

Los matamarcianos es uno de los g¨¦neros m¨¢s sagrados de entre los que pueblan los videojuegos. Algunas de las grandes joyas en nuestra historia particular son shooters de una talla incuestionable. Konami, Taito, Toaplan, Jaleco o m¨¢s recientemente Psikyo y Raizing son compa?¨ªas con algo m¨¢s que una simple experiencia en esto de hacernos masacrar marcianos...

Mars Matrix es el pr¨®ximo t¨ªtulo en llegar a nuestras consolas de la mano experta de Capcom y Takumi, siguiendo un poco la estela conseguida por Gigawing. La historia no se aleja demasiado de la t¨ªpica para este tipo de juegos aunque en este caso nos encontremos en el bando "contrario". Somos marcianos y nuestro deber como tales ser¨¢ el de defender nuestro planeta con tras el ataque ?alien¨ªgena?... bueno, si somos marcianos el resto son ahora los alien¨ªgenas indeseables.... Si bien la historia no deja de ser t¨®pica y no nos resuelva mucho, la jugabilidad o forma de control de nuestra nave si que difiere algo en lo que estamos acostumbrados. En primer lugar ser¨¢n ¨²nicamente los disparos enemigos quienes podr¨¢n hacer mella en nuestros veh¨ªculos espaciales, las naves adversarias no ser¨¢n ning¨²n peligro y podremos volar tranquilamente entre aut¨¦nticos enjambres de las mismas, eso si, teniendo especial cuidado de no confundir los disparos con ellas, algo que es relativamente sencillo. Mars Matrix es uno de esos shooters que gusta de llenar literalmente la pantalla de disparos, misiles, rayos l¨¢ser, etc. con el "incordiante" objetivo de nuestra nave. No exageramos en lo m¨¢s m¨ªnimo al decir que en pantalla pueden aparecer simult¨¢neamente m¨¢s de 100 disparos y 50 peque?as naves todas orientadas hacia nosotros.

Sin embargo no todo iban a ser dificultades, y a la ya comentada imposibilidad de "chocar" contra nuestros enemigos tambi¨¦n debemos hacer menci¨®n de un par de habilidades que nos vendr¨¢n francamente bien para llegar a buen puerto a trav¨¦s de este infierno. Si te fijas en las pantallas podr¨¢s observar que en l parte inferior izquierda hay una peque?a barra de energ¨ªa. Bien, su uso no es m¨¢s que el de vaciarse a medida que "atraemos" los disparos enemigos y luego los usamos contra las naves presionando el bot¨®n "A". Mientras m¨¢s pulsemos este bot¨®n m¨¢s disparos atraeremos (sin matarnos claro) y m¨¢s se vaciar¨¢ la barra. Si no dej¨¢is que ¨¦sta se vac¨ªe del todo podr¨¦is devolver esos disparos contra sus l¨ªcitos due?os pero si atra¨¦is todos los disparos que pod¨¢is dejando la barra en las ¨²ltimas podr¨¦is ver satisfechos como una estupenda bomba elimina a todo bicho viviente de la pantalla. Lo malo es que la barra tardar¨¢ un tiempo preciosos en recuperarse as¨ª que la opci¨®n de la bomba viene bien para determinadas ocasiones, como para proporcionar el golpe definitivo a los enemigos finales o librarte de una situaci¨®n totalmente desesperada. La mejor estrategia a seguir ser¨¢ la de usar poco a poco tu habilidad de atracci¨®n de disparos enemigos y no malgastar la barra in¨²tilmente con bombas que solo te sacar¨¢n de un peque?o apuro compar¨¢ndolo con lo que te puede venir despu¨¦s.

 Esta forma de plantear el juego al principio puede desconcertar un poco pero la tendencia de los ¨²ltimos shooters que se separan en su mec¨¢nica de los matamarcianos m¨¢s tradicionales, es la de ofrecernos formas diferentes de sobrevivir ante las malvadas hordas de nuestros enemigos y por lo tanto es algo de agradecer.

Otro aspecto no tan original pero tambi¨¦n diferenciador, es la importancia de los puntos. Lo normal es que el "score" que conseguimos sea algo secundario, quiz¨¢s algo que nos fijamos tras pasarnos el juego y por el que tratemos de batirnos una y otra vez hasta alcanzar el hi-score lo mires por donde lo mires. En Mars Matrix los puntos son pasta, y la pasta son m¨¢s oportunidades de sobrevivir y de abrir nuevas opciones. No en vano este es otro sobre los pilares sobre los que se sustenta la jugabilidad del GD de Capcom. La consecuci¨®n de puntuaciones partida tras partida ser¨¢ determinante para obtener un n¨²mero mayor de cr¨¦ditos, m¨¢s vidas o abrir opciones escondidas como una galer¨ªa de fotos, modos de juegos diferentes o nuevas naves m¨¢s poderosas y r¨¢pidas adem¨¢s de armamento mejorado. Todo esto ayuda a olvidarnos de su pasado recreativo y convertirlo en un juego m¨¢s consolero, de mayor duraci¨®n y adictividad si cabe. No queda mucho para que aparezca en nuestro pa¨ªs, de mientras, los seguidores de este prodigioso g¨¦nero esperaremos con ansias la llegada de uno de sus pocos representantes en las consolas de "nueva" generaci¨®n.