Mario Tennis: Ultra Smash, An¨¢lisis

Que Mario es el fontanero con m¨¢s trabajos del mundo eso no lo niega nadie. Que durante a?os ha demostrado que puede compaginarlo todo sin problemas, tampoco. Adem¨¢s de la saga de juegos plataformas, el icono de Nintendo ha triunfado en muchos frentes que van desde la lucha (Smash Bros), pasando por la velocidad (Mario Kart) y adentr¨¢ndose en otros deportes donde su aportaci¨®n tambi¨¦n ha tenido las se?as de calidad marca de la casa. Seguramente es Mario Tennis uno de los t¨ªtulo que mejor sab¨ªa trasladar la esencia de por ejemplo Mario Kart al deporte de Rafa Nadal y Roger Federer. En Wii nos quedamos sin entrega, ya ten¨ªamos el juego de tenis de Wii Sports a cambio, pero Wii U s¨ª recibe una nueva entrega sobremesa con varios cambios dr¨¢sticos y algunas propuestas, vaya por delante, que no acaban de encajar como esper¨¢bamos.

Aunque la franquicia ha tenido varias entregas port¨¢tiles, es importante centrarse en lo que hab¨ªa dado hasta el momento en sobremesa. Se estren¨® en Nintendo 64 con un t¨ªtulo divertido que ten¨ªa tambi¨¦n un toque simulaci¨®n en los golpes que pod¨ªamos realizar sorprendente. La nueva saga cautivaba a los aficionados de Nintendo 64, que vieron como se cambiaba de tercio r¨¢pidamente en Gamecube. En la consola c¨²bica de la compa?¨ªa japonesa la experiencia dio un giro: se convirti¨® en el Mario Kart de los juegos de tenis. Una propuesta alocada donde ten¨ªamos todo tipo de power ups para lanzar en el campo de juego y donde cada personaje ten¨ªa una serie de golpes especiales que cambiaba dependiendo de cada uno. Arcade puro y duro, locura multijugador y diversi¨®n desde la primera partida.

Pero Mario Tennis Ultra Smash vuelve a remover los cimientos de la saga y se aleja y mucho de lo que vimos en Gamecube. A diferencia de seguir una evoluci¨®n m¨¢s o menos clara como sagas tipo Mario Kart o Smash Bros, en esta ocasi¨®n se ha decidido cambiar muchas de las propuestas tanto jugables como a nivel de modos. Y mientras algunas tienen sentido, otras no acaban de comprenderse y hacen que el juego pierda fuelle respecto anteriores entregas. Ultra Smash sigue siendo una opci¨®n clave para disfrutar del cada vez m¨¢s completo multijugador local de Wii U, de eso no hay ninguna duda. Pero tambi¨¦n es cierto que la experiencia acaba cojeando en ciertas partes y contra pron¨®stico. La falta de copas tem¨¢ticas y torneos para el single player es el mejor de los ejemplos en este sentido.

Lifta, bombea, machaca

El control de nuestro elenco de personajes es sencillo y es el mismo para todos. Como dec¨ªamos, no contamos con golpes especiales de ataque y defensa como pasaba en la anterior entrega sobremesa. Tenemos los golpes neutrales, un bot¨®n para hacer liftados, otro para lanzar golpes cortados que dejan menos bote en la pista y la posibilidad de combinar botones para hacer acciones especiales: un globo para sorprender por arriba al rival, una dejada para que no llegue a nuestro bal¨®n, poder cargar los disparos para lanzarlos con mucha m¨¢s fuerza y el disparo en salto, que se hace pulsando dos veces el bot¨®n y que es ideal, por ejemplo, para hacer mates o para lanzar paralelas letales.

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Nuestra posici¨®n, si llegamos muy forzados o no, har¨¢ que un mismo golpe sea m¨¢s preciso o no y tenga mayor ¨¦xito. Como es habitual en estos juegos, si devolvemos el bal¨®n de cualquier manera estamos ofreciendo carnaza a nuestro contrincante para que nos lance un golpe ganador de todo tipo. Tambi¨¦n tenemos dos acciones m¨¢s: poder cancelar la carga que hacemos si no nos convence el tipo de golpe o estamos cargando en una posici¨®n no demasiado buena; y por otro lado, tirarnos en plancha para llegar a balones demasiado lejanos. El abanico de golpes es interesante y nos permite realizar aut¨¦nticas virguer¨ªas con un poco de ojo. Cuando conseguimos superar con un globo a un rival que nos est¨¢ machacando en la red soltaremos gritos de alegr¨ªa, de la misma manera que las dejadas para los que juegan al fondo son todo una gozada.

Los golpes afortunados

La principal novedad en la mec¨¢nica de juego son los golpes afortunados. Mientras vamos jugando aparecen una serie de iconos en el campo de juego justo en las zonas donde se dirige el golpeo de nuestro contrincante. Tienen distintos colores y permiten realizar de manera mucho m¨¢s precisa y potente los golpes mencionados anteriormente. Tiros liftados que hacen un efecto extremo que aleja el bal¨®n del rival cuando bota, un globo que no solo es preciso y va a la l¨ªnea de fondo, sino que bota con tanta virulencia que puede pasar por encima del rival o los Ultra Mates, que simplemente son imparables. El golpe liftado en este estado hace retroceder al rival cuando lo devuelve, algo que nos permite hacer dejadas mortales acto seguido.

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Aunque al principio cuesta entender los colores y la selecci¨®n de botones que tenemos que hacer, no tardaremos en acostumbrarnos y jugar con todos estos golpes con suma facilidad. Adem¨¢s, si estamos en la zona concreta, con tan solo pulsar X (el bot¨®n de disparo neutro) realizaremos la acci¨®n especial aunque no hayamos apretado el bot¨®n o la combinaci¨®n de botones. Saber jugar nuestras cartas en estos golpes afortunados, por su efectividad, es clave para poder ganar los partidos. En todo esto es importante tener en cuenta la superf¨ªcie en la que jugamos. Empezamos con las tres cl¨¢sicas de hierba, pista dura y tierra batida pero podremos desbloquear varias m¨¢s que aportan cambios mucho m¨¢s dr¨¢sticos en la velocidad de la pelota o en el bote de la misma. Las secretas son las m¨¢s divertidas porque la f¨ªsica de la pelota reacciona de manera m¨¢s extrema en ellas.

La ¨²ltima gran adici¨®n a nivel jugable lo encontramos en las setas gigantes. Estos megachampi?ones nos hacen gigantes durante un tiempo limitado en el campo y nos permiten lanzar golpes mucho m¨¢s fuertes que hacen retroceder al rival, hacer que la pelota bote mucho m¨¢s alto provocando problemas si nuestro contrincante no est¨¢ transformado y ganar en hitbox, lo que permite devolver golpes sin llegar forzados a la pelota con bastante facilidad. Eso s¨ª, la animaci¨®n de transformaci¨®n, aunque no es demasiado larga, puede hacerse algo pesada ya que se genera en medio de los golpes y se detiene la acci¨®n, dando lugar a algunas confusiones en ciertos momentos sobre la trayectoria y posici¨®n de la pelota.

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En general, el t¨ªtulo es m¨¢s equilibrado en posibilidades y obliga a aprender como devolver todo tipo de golpes. Un golpe liftado es ideal para responder a un golpe cortado del rival, ya que nuestra devoluci¨®n ser¨¢ todav¨ªa m¨¢s potente, mientras que intentar una dejada tras un mate es contraproducente y seguramente daremos una segunda opci¨®n al rival para que nos machaque. El problema es que se ha perdido la locura de los ¨ªtems varios y los ataques especiales de los jugadores. Que solo tengamos el megachampi?¨®n como ¨ªtem sabe a poco en un juego de estas caracter¨ªsticas. A ello se suma que el sistema de golpes afortunados no siempre parece el m¨¢s adecuado -hay globos que es un suicidio intentar hacerlos aunque nos lo indique el juego- y se generan muchas situaciones, tal vez demasiadas, de Mates y Ultra Mates que liquidan el partido. La sensaci¨®n es la de falta de inspiraci¨®n, de haber perdido ritmo, opciones y situaciones que se iban dando tanto por las habilidades propias como por el dise?o de ciertas pistas. Mantiene una esencia para disfrutar con alguien, sin llegar a la diversi¨®n extrema que hemos conocido en la saga ni mucho menos, pero se hace aburrido jugarlo solo.

Muy escaso en modalidades

Mario Tennis segu¨ªa la estela de Mario Kart ofreciendo torneos y competiciones tem¨¢ticas en las que ten¨ªamos que superar rivales para conseguir ganar la copa de turno. Pero en esta ocasi¨®n se han limitado las opciones de juego de manera importante. Tenemos el Megapartido y los partidos convencionales, unas opciones tipo exhibici¨®n que permite jugar modificando las reglas que consideremos: con champi?ones, con golpes afortunados, sin nada de eso como si fuera un partido real, etc. y tenemos como principal modo el Duelos en series. Se trata simplemente de coger un personaje e ir jugando partidos contra rondas de rivales controlados por la CPU mientras intentamos alargar nuestra racha. Desbloqueamos personajes ganando ciertos partidos con cada uno de ellos y ganamos monedas, que podemos gastar para desbloquear otros contenidos. Y poco m¨¢s.

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Este modo, en el que veremos que el nivel de la IA enemiga no es precisamente muy exigente durante las primeras tandas (en total son 30 partidos), tambi¨¦n cuenta con soporte para Amiibos. Si activamos alguna de las figuras de Nintendo jugar¨¢n con nosotros en un desequilibrado dos contra uno mientras va almacenando datos y va subiendo de nivel y mejorando propiedades. Queda claro, en todo caso, que las modalidades iniciales saben a poco sin torneos ni copas por niveles que ganar. De hecho, a las pocas horas veremos que los tres niveles de IA iniciales son batibles f¨¢cilmente y muy previsibles, aunque podremos desbloquear dos niveles m¨¢s de dificultad donde la exigencia es algo m¨¢s elevada

Tampoco gana el juego en opciones de minijuegos y extras. De inicio contamos solo con el megapeloteo, un partido con una pelota de grandes dimensiones que vamos devolviendo a nuestro contrincante. Cada vez se va haciendo m¨¢s peque?a hasta que uno de los dos falla. Es divertido ver como va aumentando el ritmo de la pelota a medida que se reduce su tama?o, pero tampoco es nada del otro mundo si se compara con el Artista en la Pista o el modo de fantasmas del juego que sali¨® en Gamecube. Lo mejor de los modos exhibici¨®n y dem¨¢s es jugarlos en cooperativo o competitivo con hasta cuatro jugadores. La diversi¨®n, naturalmente, se multiplica en estos partidos y se nota que el juego se ha pensado m¨¢s en este sentido que no para el jugador solitario. Sin lugar a dudas, la falta evidente de contenido en este sentido es uno de los grandes contratiempos del juego, comparado tambi¨¦n con las propuestas porta¨¢tiles donde hab¨ªa un modo principal incluso con toques RPG. Y en este sentido, este Mario Tennis acaba quedando cojo.

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Su apuesta es el online

Y es que queda claro que la apuesta firme de Mario Tennis Ultra Smash es el modo online. Tendremos la opci¨®n de jugar partidos amistoso o partidos serios con r¨¢nking seg¨²n lo que escojamos antes de empezar. Podremos escoger la tipolog¨ªa de enfrentamientos -champi?ones, golpes afortunados, etc.- as¨ª como el tipo de campo que queremos jugar. Adem¨¢s de los tres habituales que cambian propiedades -arena, pista dura o hierba- iremos a?adiendo nuevas pistas que ofrecen muchos contrastes. La alfombra es rapid¨ªsima y con apenas bote, mientras que la de champi?ones hace que haya un rebote de la pelota m¨¢s acusado que otras por citar dos ejemplos que conseguiremos pronto, aunque hay m¨¢s.

Una vez escogemos el perfil de partida, podemos elegir que nos da igual y ya est¨¢ y que sea lo que Dios quiera, tambi¨¦n podremos especificar si jugamos solo en dobles, algo realmente potente porque desde casa podemos jugar dos amigos juntos contra parejas de todo el mundo. Y a jugar. El rendimiento online de las partidas que hemos realizado es muy bueno, sin problemas de lag ni nada por el estilo. Las partidas que hemos jugado flu¨ªan sin problema ni nada achacable en este sentido. Faltar¨¢ ver qu¨¦ pasa con ciertos jugadores de otras regiones pero en general, las sensaciones se acercan m¨¢s a Mario Kart que no a Smash Bros, m¨¢s irregular en ciertas partidas. Adem¨¢s, jugar online da muchas recompensas, ya que las monedas que ganamos son m¨¢s que las que podemos conseguir en los modos offline. Por una parte eso es positivo, aunque por otra desbloquearemos relativamente r¨¢pido los extras (25) que tenemos por conseguir.

Apartado t¨¦cnico

A nivel visual, el juego ofrece un buen acabado siendo vistoso y colorido en la tele y manteniendo el tipo en la pantalla del mando tableta, que puede servir para jugar de manera tradicional, para ver el resultado del partido o para dar otro punto de vista distinto a lo que vemos en pantalla. En todo caso, el juego funciona de manera fluida sin demasiados alardes, destacando seguramente el dise?o de los personajes marca de la casa que est¨¢n presentes en la plantilla. A nivel de detalles, efectos especiales y dem¨¢s cumple su cometido, sin llegar al acabado que pueden tener otros juegos como Mario Kart o Smash Bros. La banda sonora est¨¢ un escal¨®n por debajo, con melod¨ªas que acompa?an pero que no pasar¨¢n a la historia de las OST de Nintendo y buenos efectos especiales sin ser nada especialmente espectacular. El juego est¨¢ totalmente traducido al castellano.