Mario & Luigi: Viaje al centro de Bowser + Las peripecias de Bowsy, an¨¢lisis

Durante los primeros compases de Mario & Luigi: Viaje al centro de Bowser, nos encontramos explorando los parajes de Playa Picada con el eterno antagonista de nuestros fontaneros predilectos mientras algo llama su atenci¨®n. Desesperados gritos de auxilio alertan a Bowser; uno de los habitantes de la costa parece estar en serios problemas.

Bowser lo tiene claro: ¡ªtengo mejores cosas que hacer¡ª, piensa. No obstante, ante el ofrecimiento de una golosa recompensa en forma de bloque especial por parte del misterioso personaje, nuestro verdoso compa?ero de viaje decide ayudar al pueblerino. Sin comerlo ni beberlo, nos vemos controlando a Bowser ?ayudando a alguien!, mientras nuestros amigos bigotudos le asisten desde el interior de su fornido cuerpo (martillo en mano) haciendo que sus m¨²sculos adquieran mayor tes¨®n. Y la f¨®rmula funciona, ceder protagonismo al antagonista tambi¨¦n lo hace, y combinarlo dentro de una din¨¢mica a doble pantalla vuelve a sorprender.

Sin ninguna duda, este cap¨ªtulo de la subsaga Mario & Luigi, heredera de una larga y variada trayectoria dentro del panorama del JRPG ¡ªcuyo viaje ya detallamos en el an¨¢lisis de Mario & Luigi: Superstar Saga + Secuaces de Bowser¡ª, vuelve a maravillar a trav¨¦s de su planteamiento. Pese que el juego que nos ocupa se basa en un t¨ªtulo con casi diez a?os a sus espaldas, su f¨®rmula sigue siendo variada, sorprendente y, adem¨¢s, bastante diferente a la definitoria de su precuela. Y todo ello, si tenemos en cuenta que el trabajo audiovisual realizado en este remake sigue los excelentes c¨¢nones de Superstar Saga, se combina en un perfecto c¨®ctel cuyos ingredientes se mueven entre la nostalgia y la actualidad: las cosas no podr¨ªan ¡ªa priori¡ª pintar mejor.

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Dentro de la mente de Bowser¡­

¡­ y tambi¨¦n en el interior de su est¨®mago; o incluso de sus brazos o su sistema nervioso central. El planteamiento de esta aventura JRPG dual ofrece grandes variaciones de la mec¨¢nica habitual de la saga. El componente RPG, suavizado para atraer a todo tipo de jugadores, deja esta vez m¨¢s margen de actuaci¨®n a otro de sus pilares fundamentales: las plataformas. Pero aqu¨ª las mec¨¢nicas de saltar, golpear bloques o matar enemigos son muy diferentes a las de un videojuego de Mario al uso.

El argumento es tan sencillo como desternillante: Ciudad Champi?¨®n se ha visto azotada por la Redonditis, una epidemia cuyos efectos se presumen devastadores. El cuerpo de los habitantes de la aldea ha comenzado de hincharse, haciendo que el paisaje amanezca albergando inm¨®viles esferas vivientes por doquier. A ra¨ªz de la reuni¨®n de emergencia que se convoca, a la que no ha sido invitado el mal¨¦volo Bowser, se generan una serie de acontecimientos que acabar¨¢n con nuestro archienemigo trag¨¢ndose todo bicho viviente, los hermanos Mario intentando escapar de su cuerpo, y una enorme aventura desarroll¨¢ndose mientras todos los actores de esta surrealista historia cooperan para conseguir mandar al traste los planes de un enemigo com¨²n: Gr¨¢covitz. Como no podr¨ªa ser de otra forma, uno de los elementos que articulan la trama es el magn¨ªfico humor que destila la obra.

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Esta vez manejaremos al d¨²o de fontaneros a trav¨¦s de niveles de desarrollo lateral aderezados con peque?os puzles, conectados o no con las acciones de Bowser en la pantalla superior (alternaremos con facilidad el manejo de los hermanos mario con el de su antagonista) en aras de ofrecer un progreso en la aventura divertido, imaginativo y, adem¨¢s, bastante variado. Si saltamos sobre los enemigos o les tocamos entraremos en combate por turnos, muy al estilo de su precuela, mientras disfrutamos de nuevos ataques t¨¢ndem, enemigos finales originales y un buen n¨²mero de din¨¢micas ofensivas, defensivas y de asistencia.

Una buena combinaci¨®n de din¨¢micas

Todo fluye como un RPG al uso (subidas de nivel, selecci¨®n de par¨¢metros al que a?adir un peque?o bonus, desbloqueo de nuevas habilidades mediante), mientras saltamos, alternamos entre las habilidades de los diferentes personajes protagonistas y, en definitiva, nos sumergimos en un universo plataformero ¡ªel interior de Bowser¡ª mientras exploramos desde una vista cenital los bellos escenarios del t¨ªtulo manejando al mal¨¦volo reptil. Podremos romper rocas dando pu?etazos, desbloquear caminos haciendo arder ¨¢rboles y vegetaci¨®n, o servirnos de diferentes habilidades para lograr avanzar en la trama.

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No hay tanto backtracking como nos ten¨ªan acostumbrados en Alpha Dream, el mundo no se organiza de forma tan amplia como en la anterior aventura JRPG de nuestros simp¨¢ticos hermanos bigotudos, y tampoco hay tantas tareas propias de un juego de Rol. En su lugar, se enfatizan las mec¨¢nicas de plataformas, la imaginativa interacci¨®n entre las dos pantallas (si Bowser se hincha de agua, los escenarios en su interior cambiar¨¢n) y, adem¨¢s, contaremos con habilidades totalmente nuevas. A pesar de ello, tendremos a nuestra disposici¨®n distintas tiendas donde mejorar nuestros personajes y dotarlos de ¨ªtems de apoyo, tambi¨¦n habr¨¢n tareas secundarias ¡ªcomo la de encontrar los gatibloks escondidos¡ª y minijuegos in¨¦ditos (tanto Bowser como los hermanos Mario cambiar¨¢n de forma para enfrentarse a nuevas din¨¢micas arcade).

Todo ello apoyado de manera firme por una jugabilidad a prueba de bombas. Es cierto que las fases de plataformas no cuentan con las f¨ªsicas cl¨¢sicas de la saga principal de Mario en 2D, y adem¨¢s se ha simplificado el dise?o de niveles. No obstante, alternar entre las diferentes habilidades de los hermanos, disfrutar de los variados enfrentamientos por turnos (con el cl¨¢sico toque de acci¨®n marca de la casa) y resolver sencillos pero satisfactorios puzles hace que, una vez cerramos la consola, esta nos llame desde la mesita de noche para echarle algunas horillas m¨¢s a esta adictiva ¡ªaunque no demasiado desafiante, salvo en puntos concretos de la trama¡ª aventura.

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Y hablando de horas, ten en cuenta que el t¨ªtulo que nos ocupa cuenta con una duraci¨®n que puede, f¨¢cilmente, superar las 20 horas si nos entretenemos explorando el Reino Champi?¨®n para sacarle todo el jugo. Adem¨¢s, el nuevo modo de juego (que detallaremos m¨¢s adelante) ofrece un atractivo aliciente el cu¨¢l, de forma similar al incluido en Superstar Saga, tampoco supone una revoluci¨®n dentro de la franquicia, siendo lo menos destacable del t¨ªtulo que nos ocupa.

Remake visual realizado con amor

Como ya sucediera con Superstar Saga, el t¨ªtulo que protagoniza este texto ha sido sometido a un lavado de cara integral. Hemos de aclarar que todo sigue en su sitio: localizaciones, elementos de los escenarios, dise?o de niveles, enemigos, personajes secundarios, tesoros y objetos coleccionables. Lo que sucede es que todo se ha renovado.

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Como si de un artwork de la factor¨ªa Disney/Pixar se tratase, los escenarios adquieren mayor profundidad de color (que no a nivel de perspectiva, pues la vista cenital imposibilita el visionado estereosc¨®pico del t¨ªtulo que no ocupa), el tratamiento de todos los personajes y objetos ganan en detalle, y la sensaci¨®n de estar ante una obra a caballo entre el arte digital tradicional y los gr¨¢ficos pre-renderizados es constante.

A la hora de hablar de los personajes y los enemigos del juego un nuevo actor entra en escena: la animaci¨®n. Todo se mueve de forma m¨¢s fluida, se han a?adido movimientos totalmente renovados a todos los personajes, y las nuevas animaciones casan de forma perfecta con el replanteamiento sonoro de Viaje al Centro de Bowser.

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La OST creada por Yoko Shimomura no decepciona en su revisi¨®n: las melod¨ªas suenan m¨¢s ricas, los arreglos de piano y cuerda acompa?an de forma magn¨ªfica en los temas m¨¢s animados del juego, y su enorme variedad en sus composiciones redondean un notable apartado. Todo ello acompa?ado por los siempre simp¨¢ticos balbuceos y conversaciones ininteligibles entre los hermanos Mari ¡ªde las tradiciones de la saga m¨¢s celebradas por los seguidores de estos encantadores JRPG¡ª y una brillante localizaci¨®n al castellano, con cascarrillos propios que, no obstante, resultan graciosos y para nada cargantes.

Novedades jugables cortes¨ªa de Bowsy

Como ya sucediera en el anterior remake de la franquicia, el t¨ªtulo que nos ocupa cuenta con un modo independiente llamado Las Peripecias de Bowsy. La estrategia ligera vuelve a ser la excusa de este modo, donde controlaremos al ej¨¦rcito de Bowser mientras se enfrentan a las hordas de Gr¨¢covitz, mientras intentan dar con una soluci¨®n a la epidemia de la Redonditis.

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De forma similar a Secuaces de Bowser, en esta ocasi¨®n tambi¨¦n deberemos seleccionar las unidades con cuidado, atendiendo a sus habilidades en base a la relaci¨®n entre aviaci¨®n, artiller¨ªa e infanter¨ªa, con el objetivo de completar una serie de requisitos que nos garanticen la victoria en el campo de batalla.

De la misma forma que en Secuaces de Bowser, el modo es un buen complemento del juego principal, su argumento es tremendamente divertido, pese a que en t¨¦rminos generales su poca profundidad y el, por momentos, repetitivo desarrollo de la mini-aventura de estrategia quede por debajo, en t¨¦rminos de calidad y acabado, de la aventura principal. Algunos ajustes menores durante el juego y la compatibilidad con figuras Amiibo completan las novedades de uno de los ¨²ltimos lanzamientos de peso para nuestra querida Nintendo 3DS.

Videojuego analizado en New 3DS XL con un c¨®digo facilitado por la editora.