Mario and Donkey Kong: Minis on the Move
Mario and Donkey Kong: Minis on the Move
Los Minis recorren este 17 de mayo Nintendo 3DS en este completo y divertido descargable que va a hacernos colocar piezas de trazado casi a su velocidad de ca¨ªda. Mario and Donkey Kong: Minis on the Move estrena mec¨¢nica de puzle en m¨¢s de 200 niveles y la acompa?a de un pu?ado de adiciones.
Peque?os y automatizados, los Minis llegaron a la serie Mario Vs. Donkey Kong hace mucho tiempo, obligando al jugador a actuar r¨¢pido para ponerlos a salvo, en una propuesta que recordaba a grandes cl¨¢sicos del puzle contrarreloj como Lemmings o The Humans. Ahora la serie se ha reconvertido en Mario and Donkey Kong, y abraza una din¨¢mica m¨¢s semejante a Pipe Mania y otros "colocapiezas" sobre cuadr¨ªcula para formar el camino sobre la marcha. Todo esto, claro est¨¢, en el universo Super Mario y con una jugabilidad tan robusta y precisa como la que suele caracterizar a las producciones que llevan la licencia del fontanero. Mario and Donkey Kong: Minis on the Move es una idea sorprendente en la subserie ya que llega a complicarse tanto que en los ¨²ltimos niveles de su colecci¨®n de m¨¢s de 200 fases tendremos que estar pendientes de aut¨¦nticas obras de ingenier¨ªa, geniales y retorcidos laberintos donde un solo fallo upone el error.
Hasta ese momento, el juego -solo en formato descargable desde la eShop y a un irresistible y agradable precio de 9,99 euros- va sofisticando paulatinamente su propuesta, y aunque no se libra de algunos repuntes de dificultad desmesurados y desequilibrados, en general consigue que el jugador vaya sintiendo m¨¢s potencial en sus manos, m¨¢s capacidad para resolver rompecabezas a priori casi incognoscibles, que el Stylus fluya por la pantalla t¨¢ctil con plena soltura y naturalidad. ?se es el acierto de este t¨ªtulo, la satisfacci¨®n que ofrece a cada mundo avanzado de los cuatro que ofrece. Pero con eso no basta, Nintendo tambi¨¦n ha querido dar forma a un contenido adicional generoso y un editor de niveles para compartir online que lo haga casi infinito, preparado para recibir las genialidades que dise?en los jugadores m¨¢s sesudos. Minijuegos, galer¨ªas y tablas de rankings se suman a este creativo modo extra.
Minis on the Move est¨¢ completamente pensado para 3DS, sacando provecho de la doble pantalla y con una din¨¢mica de juego absolutamente t¨¢ctil, donde las piezas no paran de caer por la tuber¨ªa y deben ser r¨¢pidamente colocadas en el esquema del tablero, fomentando el avance y supervivencia ante las trampas de los mecanizados Minis hacia la l¨ªnea de meta. Los items, coleccionables, potenciadores de puntos, y otros objetos opcionales salpican la cuadr¨ªcula, para que los que quieran las puntuaciones y desbloqueos m¨¢s exigentes extrujen a¨²n m¨¢s sus reflejos y cerebro. Es divertido, es r¨¢pido y es desafiante, aunque puede llegar a caer en la repetici¨®n si se le pide una variedad que de base es pr¨¢cticamente imposible que tenga. Como otros puzzle games, no gustar¨¢ a todo el mundo, aunque funciona de maravilla en su g¨¦nero.
De la tuber¨ªa a la Estrella
Lanzados como juguetes de cuerda que avanzan autom¨¢ticamente por la ruta que les confeccionemos, los diversos Minis de Mario, Toad o Peach van a enfrentarse uno a uno o en grupo saliendo desde distinta casilla a cuatro mundos diferentes: Mario en Marcha, Palacio de las Fichas, Revuelta de Minis, Enredo Selv¨¢tico, de distinta composici¨®n por niveles y ambientaci¨®n cada uno. Lo que al principio parecer¨¢ un f¨¢cil y obvio trazado, pronto ir¨¢ ganando dificultad y empezaremos a perder Minis cayendo a los paneles de pinchos, explotando o al vac¨ªo al salirse del tablero. Gran parte del aumento de exigencia en este Mario and Donkey Kong viene por la cantidad de fichas distintas que van introduci¨¦ndose, poco a poco, cada varios niveles, adem¨¢s de por la velocidad de las figuras al recorrer el casillero y las fichas cayendo por el tubo, claro.
Pronto, a los pocos niveles, Mario and DK muestra al jugador las nuevas fichas que act¨²an como papelera y donde al arrojar otras conseguimos que caigan por la tuber¨ªa fichas m¨¢gicas azules, polivalentes para cualquier posici¨®n. Tambi¨¦n se puede formar una de ¨¦stas papeleras dibujando una circunferencia con cuatro piezas curvas. M¨¢s adelante se introducen las fichas Catapulta Kong que hacen saltar a los Minis dos posiciones o las piezas p¨²rpura que permiten su colocaci¨®n en columna, encima de otras. No tardan tampoco en presentarse las piezas Pivote que se pueden girar una vez colocadas o las Obstaculizadoras que har¨¢n a las figuras darse media vuelta. Todas estas fichas van insertando m¨¢s posibilidades y formas de resolver los puzles, pero otros componentes en forma de items juegan al mismo tiempo un papel importante, por ejemplo los martillos, que dejan a los Minis golpear a los Shy Guy que pueblan algunos niveles.
Otro tipo de estrategias que tendremos que poner en pr¨¢ctica sobre todo en niveles avanzados parecen de pura l¨®gica una vez descubiertas, pero pueden llegar a atascar incluso al m¨¢s h¨¢bil antes de conocerse. Por suerte los tutoriales y consejos dan pistas. Se trata por ejemplo de crear un bucle donde el Mini se quede dando vueltas y nos haga ganar tiempo mientras esperamos que caiga esa pieza concreta que necesitamos para unir caminos hasta la meta o superar un obst¨¢culo o enemigo. Otro truco consiste en ocupar las esquinas con piezas inservibles en ese momento, piezas que ya no se podr¨¢n recuperar pero que generan atasco en la tuber¨ªa.
Todo se complica hasta el punto de que en los ¨²ltimos niveles los tableros no cabr¨¢n en la pantalla y tendremos que desplazarnos de una zona a otra, cambiando la vista desde la cruceta (o los botones A, B, X e Y para los zurdos) a toda velocidad mientras no dejamos de colocar fichas y controlar que todas las figuras avanzan por rutas sin peligros. Incluso hay interruptores que nos permiten girar el tablero completo en vez de una ficha concreta, lo que supone ya el rizado de rizo que logra volver completamente loca la propuesta, sencillamente genial. Algunas fases -como introduc¨ªamos antes- son un perfecto ejercicio de l¨®gica y toma de decisiones r¨¢pida, una obra de ingenier¨ªa muy bien pensada. No faltan los niveles de bonus, los de tiempo pausado y algunos secretos que se abrir¨¢n al conseguir una calificaci¨®n de 3 estrellas.
M¨¢s por el mismo precio
Mario and Donkey Kong: Minis on the Move reta de entrada al jugador a conseguir todas las figuritas de los Minis, las monedas, las calificaciones m¨¢s altas y de tres estrellas en todos los puzles y los desbloqueables. Pero m¨¢s all¨¢ de este tipo de extras de rejugabilidad incorporados en casi todos los t¨ªtulos del estilo, existe un modo Minijuegos que act¨²a como producto adicional, un obsequio que poco o nada tiene que ver con la mec¨¢nica central pero que alargar¨¢ la vida ¨²til del descargable. Por desgracia, estos minijuegos no son ninguna sorpresa ni un c¨²mulo de ideas innovadoras, ni mucho menos. Tres de ellos funcionan de forma parecida, con disparos de catapulta desde la pantalla t¨¢ctil, en un caso a dianas, en otro a formas geom¨¦tricas gigantes formadas por piezas y bombas, y en el tercero a Shy Guys que pescar. El efecto 3D de la pantalla superior es amortizado aqu¨ª ya que ayuda a calcular las distancias (profundidad) y con ello la fuerza de los tiros.
El cuarto minijuego de los recogidos consiste en recoger monedas con Mini Mario subido a una plataforma que elevaremos y bajaremos girando una manivela en la pantalla t¨¢ctil. Al mismo tiempo hay que esquivar balas de ca?¨®n y otros riesgos, lo que lo hace pronto muy intenso y adictivo, probablemente el mejor de los cuatro incorporados. A parte de ¨¦stos, la otra gran baza de Minis on the Move reside en el editor de niveles, complet¨ªsimo y con todas las piezas y herramientas que contiene el juego para que demos rienda suelta a nuestra imaginaci¨®n y formemos los desaf¨ªos m¨¢s desquiciados y exigentes que se nos puedan ocurrir. Una vez formados los rompecabezas y comprobado que tienen soluci¨®n Mario and DK da la opci¨®n de compartir estas fases propias con el resto del mundo, a trav¨¦s de la conexi¨®n online de la consola. Tambi¨¦n, claro est¨¢, podremos descargar creaciones de otros jugadores, se?aladas por popularidad, lo que prolonga enormemente la vida del juego.
Estilo Super Mario
Y, por ¨²ltimo, claro est¨¢, el aspecto audiovisual del juego no desentona ni un poquito en la est¨¦tica habitual de los juegos del fontanero. Color radiante, formas redondeadas y brillos y destellos para las superficies reflectantes son la t¨®nica en un apartado gr¨¢fico que luce de forma notable pero que no se puede considerar totalmente destacable en el cat¨¢logo de la consola, no la amortiza y se queda en un acertado resultado conformista. El aspecto desenfadado, la coherencia de f¨ªsicas o la suavidad de todo lo que ocurre en ambas pantallas se refuerza de una banda sonora con canciones reconocibles y otras menos esmeradas, efectos de sonido habituales de los juegos de la primera l¨ªnea de Nintendo y alguna que otra intervenci¨®n oral, pocas.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.