Manifold Garden
- PlataformaXBO7NSW7XBS7PS47PC7
- G¨¦neroAventura
- DesarrolladorWilliam Chyr Studio
- Lanzamiento18/08/2020 (XBO, NSW, PS4, PC)10/11/2020 (XBS)
- EditorWilliam Chyr Studio
Manifold Garden, An¨¢lisis. El cubo de Rubik infinito
Conocemos este singular juego de puzles en primera persona aderezado por un apartado art¨ªstico preciosista que nos ha sorprendido. Sencillez bien ejecutada.
El g¨¦nero de los puzles nunca deja de sorprendernos. Sea de una forma u otra, las posibilidades del ingenio a trav¨¦s del ocio electr¨®nico son indefinidas y no parecen tener fecha de caducidad; especialmente cuando vemos que propuestas como Portal siguen siendo referentes y referencia para producciones tanto grandes como dentro de la emergente escena independiente. Manifold Garden es una de esas ideas que llegan casi sin avisar y que, al mismo tiempo, nos encantan por su sencillez.
William Chyr es el art¨ªfice de esta obra, que podemos definir como un gigante ¡ªmay¨²sculo¡ª juego de puzles en primera persona donde todo est¨¢ medido, parad¨®jicamente, en su justa medida. Un cubo de Rubik hecho videojuego. Y decimos esto porque, a pesar de la magnitud de los escenarios y la majestuosidad del conjunto, es sofisticado. Tanto a nivel de dise?o como en el plano visual, que entra por los ojos en una gran pantalla. Tras su paso por PC, consolas y dispositivos m¨®viles, nos enfrentamos a estas escasas tres horas de experiencia en Xbox Series S, cuya memoria SSD y Xbox Velocity Architecture han hecho desaparecer los tiempos de carga. Huelga decir que la recomendaci¨®n del juego est¨¢ garantizada, pero dejadnos explicaros por qu¨¦.
A veces la soluci¨®n es simplemente saltar al vac¨ªo: entendiendo Manifold Garden
?Por qu¨¦ hacer algo artificialmente complejo si a trav¨¦s de la sencillez se puede ganar complejidad? Es eso lo que parece querer decirnos a los mandos Manifold Garden, que no llega a explotar en el dise?o individual de sus rompecabezas, pero que s¨ª acierta de lleno cuando sumas todas esas peque?as partes individuales. El desaf¨ªo est¨¢ ah¨ª; la curva de dificultad considerablemente progresiva tambi¨¦n lo est¨¢. El uso de la tridimensionalidad es total.
Manifold Garden nos propone resolver desaf¨ªos a trav¨¦s del uso de la gravedad, los colores y un sistema c¨²bico que sirve como eje vertebrador de todo. Aqu¨ª no hay muertes, no hay vidas, no hay contadores de da?o ni medidores de tiempo. Simplemente tenemos que tomarnos nuestro tiempo, pensar y¡ avanzar. Llegar. ?D¨®nde? Eso no importa, solamente tenemos que dejarnos llevar.
Nada m¨¢s empezar nos veremos dentro de una sala, entre cuatro paredes. Nosotros vemos todo en primera persona; podemos caminar y tocar los elementos interactivos del entorno, que se rigen a un esquema de color donde solo aquello del mismo color da respuesta a un est¨ªmulo. Entre tanto, la gravedad, que se puede activar en cualquiera de las paredes. ?Ves ese techo? Puede ser el suelo si primero giras el escenario noventa grados y, acto seguido, giras en ese mismo sentido otros noventa grados. Guau. La primera vez es extra?o, pero tambi¨¦n es satisfactorio.
A continuaci¨®n, ver¨¢s un enorme hueco azul y una caja de ese mismo color. ?Y si la situamos en ese enorme agujero? Se abre entonces una puerta¡ y avanzas. Ahora aparecen escalones, cajas verdes, interruptores amarillos e intersecciones rojas. De pared en pared, de cubo en cubo, de escenario en escenario. Es como un cubo de Rubik, con patrones de color que sirven como llave para abrir puertas. Es sencillo, no hacen falta di¨¢logos y por eso no recurre a ellos. Manifold Garden prescinde de todo aquello que no necesita para ser naturalmente minimalista. Esencialmente efectivo. Puramente satisfactorio. Es casi matem¨¢tico, por eso es una pena que no llegue a haber ning¨²n momento en las escasas tres horas que dura, porque parece querer explotar y no puede. Se queda en el notable cuando podr¨ªa haber sido incluso m¨¢s.
Jugando con el concepto de infinito, ?qu¨¦ es el cielo, realmente?
Hay un momento que recordamos con una sonrisa en la boca, y es cuando te das cuenta de que las leyes de Manifold Garden se vulneran de forma deliberada, que el vac¨ªo es quiz¨¢ tambi¨¦n el techo; que el infinito es real y se puede jugar con ¨¦l. Es en ese momento, cuando das el salto al vac¨ªo entre escalones, rascacielos y formas c¨²bicas, que entiendes que William Chyr tuvo en mente una idea extraordinaria porque no se puede entender ni representar en otro medio cultural ni en otra manifestaci¨®n art¨ªstica. Es arte pict¨®rico de vanguardia en movimiento, con profundidad, sumado al a?adido de ser sensible.
Cuando estudias las obras de William Chyr, que reconoce en un encuentro con HyperHype haber tardado siete a?os en terminar el t¨ªtulo, entiendes que su idea inicial fuese dise?ar un MMO de viajes en el tiempo. Al final, la obra se siente como el videojuego heredero del efecto ¨®ptico de las escaleras infinitas del cuadro Relativity de M. C. Escher. Esa inspiraci¨®n es leg¨ªtima, tanto como la que abraza a Portal, de Valve. El resultado es que todo funciona. Otro nombre que no podemos olvidar en este an¨¢lisis es el de Martin Kvale, encargado de dise?ar los efectos de sonido del juego. Son pocos, poqu¨ªsimos, pero funcionan de maravilla. Recomendamos jugar con auriculares porque es de esos t¨ªtulos que precisan de concentraci¨®n, que se sienten en los matices, y jugar en est¨¦reo nos ayudar¨¢ a situar el sonido en el lugar exacto del que proviene.
Por lo dem¨¢s, este particular cubo de Rubik desaprovecha la oportunidad de contar una historia, que seguramente con un poco de esfuerzo hubiese quedado de maravilla. Por suerte ¡ªy esto dice bien de la idea de Chyr¡ª, no ha necesitado de una sola l¨ªnea de di¨¢logo para comunicarse con el jugador. Y eso, creednos, tiene mucho m¨¦rito, porque hemos completado la aventura casi del tir¨®n, en una sola tarde, sin pensar cu¨¢nto faltaba ni por qu¨¦ est¨¢bamos caminando por la pared (que a veces era el techo y otras era el suelo). Solo te dejas llevar. Saltas. Caes. Colocas. Descolocas. Caminas. Avanzas. Si hubiese durado m¨¢s hubiese terminado agotando su propia f¨®rmula. Ser dosificado es tambi¨¦n una virtud.
Conclusi¨®n
Manifold Garden es una agradable sorpresa. Un videojuego simple, sencillo, abstracto, minimalista y complejo a trav¨¦s de su sencillez. Pero, sobre todo, un videojuego. Inspirado en el cubo de Rubik y tomando como base la idea del cuadro Relativity, este t¨ªtulo de puzles en primera persona nos invita a experimentar desafiando las leyes de la f¨ªsica y la gravedad, un ejemplo de que los rompecabezas est¨¢n ah¨ª para imponer sus propias reglas, para salt¨¢rselas y darles la vuelta para que el jugador se sienta dentro. En ocasiones fascinante, en otras demasiado limitado, sus tres horas de duraci¨®n dejan un gran sabor de boca. Completamente recomendado.
Lo mejor
- Un sorprendente dise?o de escenarios
- Art¨ªsticamente es bello y sencillo; te habla a trav¨¦s del color
- Su idea del concepto de infinito, muy bien ejecutada
- Tiempos de carga inmediatos en Xbox Series X|S
Lo peor
- No termina de explotar
- Su desaf¨ªo se queda por debajo de lo que nos hubiese gustado
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.