Bloques iluminados

Sin duda, el desarrollador Tetsuya Mizuguchi, cabeza visible de Q Entertainment, es en nuestro mundillo sin¨®nimo de revoluci¨®n visual, m¨²sica al servicio de la jugabilidad e ideas innovadoras y vanguardistas. Cualquier juego auspiciado por ¨¦l incluir¨¢ todas o alguna de estas caracter¨ªsticas, siendo perfecto ejemplo de ello t¨ªtulos como Rez, Space Channel 5, Meteos o Lumines. Esta ¨²ltima franquicia cuenta ya con unas cuantas entregas a sus espaldas, siendo la primera de ellas aquella que en 2005 irrumpi¨® en PSP, como parte de la primera hornada de juegos destinados a la por entonces novedosa port¨¢til de Sony. Dicho t¨ªtulo fue creado espec¨ªficamente para dicha consola, y acab¨® convirti¨¦ndose por m¨¦ritos propios en uno de los mejores puzzles lanzados en los ¨²ltimos a?os.

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Gracias al ¨¦xito de la propuesta de Q Entertainment, Lumines se transform¨® en una franquicia de la que hasta la fecha han llegado ediciones destinadas a PlayStation 2, Xbox Live Arcade, PC y tel¨¦fonos m¨®viles (esta ¨²ltima de sorprendente calidad), todo sumado a una secuela del original lanzada para PSP en 2006. Era obvio que Lumines ten¨ªa que llegar a PS3 tarde o temprano; y tampoco era dif¨ªcil adivinar que, de hacerlo, tomar¨ªa PlayStation Network como plataforma de lanzamiento. Finalmente, y con el 'gal¨¢ctico' t¨ªtulo de Lumines Supernova, llega a PSN uno de los mejores puzzles de los ¨²ltimos a?os, el cual por supuesto conserva todas las cualidades de los t¨ªtulos anteriores de la franquicia, sumadas a alguna que otra nueva propuesta que pasaremos a rese?ar a continuaci¨®n. Eso s¨ª, el juego adolece de algunas carencias que, inevitablemente, acaban enturbiando el resultado final.

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Jugabilidad bicolor

Daremos comienzo al presente an¨¢lisis explicando la mec¨¢nica de juego de Lumines Supernova, para que as¨ª los ne¨®fitos en la franquicia sepan a qu¨¦ atenerse. Tal y como mandan los c¨¢nones del g¨¦nero, asentados largo tiempo atr¨¢s por el inmortal Tetris, la estructura de lumines se apoya en una zona de juego delimitada a la que caen bloques de manera regular, los cuales son controlados por el usuario tanto a la hora de desplazarlos a izquierda o derecha como de girarlos con vistas a que las piezas de colores que los forman puedan servir mejor a nuestros prop¨®sitos.

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Y es que, dado que la partida llega inevitablemente a su fin en el caso de que los bloques alcancen el extremo superior de la zona de juego, nos corresponder¨¢ a nosotros eliminarlos para evitar su peligrosa acumulaci¨®n. Es aqu¨ª donde reside uno de los mayores aciertos de Lumines: la simpleza a la hora de llevar a cabo dicha tarea. Para eliminar los bloques que caen de manera incesante, deberemos crear cuadrados de un mismo color, compuestos por un m¨ªnimo de 4 peque?as piezas, quedando el n¨²mero m¨¢ximo ya supeditado a nuestra rapidez de reflejos e ingenio a la hora de apilar los bloques.

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Sin embargo, la simpleza anteriormente mencionada no se debe a la mec¨¢nica a seguir a la hora de eliminar bloques, sino m¨¢s bien a que ¨²nicamente existen dos colores de piezas con los que lidiar, a diferencia de otros t¨ªtulos como Puzzle Bobble en los que la variedad de tonalidades ya es mucho mayor. Dicha simpleza no quiere ni mucho menos decir que el juego se encuentre exento de profundidad y dificultad, ya que los bloques de 2x2 piezas que caen desde el extremo superior de la zona de juego tienden a mezclar ambos colores de manera que no nos resulte nada sencillo apilarlos en la zona inferior de la forma en la que pueden ser eliminados.

Como ¨²ltimo aspecto importante de la mec¨¢nica de juego, y quiz¨¢ tambi¨¦n el mayor elemento original de Lumines, se encuentra la llamada l¨ªnea temporal, una marca que barre la zona de juego de izquierda a derecha de manera regular, y que ir¨¢ eliminando a su paso los bloques que se encuentren compuestos por 4 o m¨¢s piezas del mismo color. Es decir, conseguir crear un bloque de un ¨²nico color no supone su eliminaci¨®n inmediata, sino que ¨¦sta se producir¨¢ s¨®lo cuando la l¨ªnea temporal pase por encima de ¨¦l. Esto permite apilar piezas extra de forma que se puedan crear bloques monocromos m¨¢s grandes antes de que la l¨ªnea temporal los borre, con lo que podremos elaborar combos de lo m¨¢s satisfactorios y espectaculares.

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Ya como adici¨®n final a la mec¨¢nica, contamos con las piezas especiales que de cuando en cuando vendr¨¢n incluidas en los bloques que caen desde el extremo superior de la pantalla. As¨ª, si creamos un cuadrado en el que se incluya una de estas piezas especiales, todas las piezas adyacentes del mismo color ser¨¢n tambi¨¦n eliminadas. Y hasta aqu¨ª llega la explicaci¨®n b¨¢sica de todo lo que ofrece la mec¨¢nica de Lumines Supernova. Como hab¨¦is podido comprobar, el sistema es simple, sencillo y directo, aunque volvemos a subrayar que ello no es ¨®bice para que el juego pueda disfrutar de una absorbente jugabilidad a prueba de bombas y un alto nivel de desaf¨ªo.

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Fusi¨®n de gr¨¢ficos y sonido

El apartado audiovisual no suele ser ni mucho menos el aspecto m¨¢s destacado de un juego de puzzle, aunque, teniendo en cuenta qui¨¦n es el creador de Lumines, no es de extra?ar que el t¨ªtulo que nos ocupa posea grandes virtudes tanto en gr¨¢ficos como en sonido. Lo m¨¢s destacable en lo que al aspecto visual se refiere se encuentra sin ninguna duda en los fondos que ambientar¨¢n nuestras partidas en Lumines Supernova, compuestos por gr¨¢ficos de estilo vanguardista repletos de luz, colorido y animaci¨®n. Dichos fondos (entre los que se incluye uno dedicado a LittleBigPlanet) incluso reaccionar¨¢n a nuestro devenir en las sesiones de juego, por lo que Lumines adquiere un necesario virtuosismo visual del que carecer¨ªa debido a la naturaleza bicolor de los bloques que construyen su mec¨¢nica.

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Como ya mencionamos al principio del art¨ªculo, el talento creativo de Tetsuya Mizuguchi, cabeza visible del estudio desarrollador del juego que nos ocupa, destaca por la excepcional fusi¨®n entre m¨²sica y jugabilidad que logra implementar en muchas de sus creaciones. Lumines Supernova es una nueva prueba de ello. De entrada, la calidad de los temas que amenizar¨¢n nuestras partidas es indiscutible, con composiciones que tocan g¨¦neros tan dispares como techno, rock o m¨²sica cl¨¢sica; aunque lo m¨¢s destacable son los efectos de sonido, ya que han sido creados de manera que encajen perfectamente en la melod¨ªa que se encuentre sonando en ese momento, hasta el punto de acabar formando parte de ella.

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As¨ª, al girar un bloque, desplazarlo a izquierda o derecha, dejarlo caer, formar un grupo de 4 piezas monocromas, borrarlas de la pantalla? se producir¨¢ un determinado efecto sonoro poseedor de un ritmo mel¨®dico que casar¨¢ perfectamente con la m¨²sica principal. Gracias a ello incluso podremos contribuir con nuestras acciones a intercalar nuevos ritmos en la estructura del tema. Esto, unido a los efectos visuales que se producen en el fondo del escenario tambi¨¦n a causa de nuestras acciones, da como resultado una fusi¨®n entre jugabilidad, gr¨¢ficos y sonido como s¨®lo un juego auspiciado por Tetsuya Mizuguchi es capaz de ofrecer.

Modos de juego

De entrada, es un alivio comprobar c¨®mo la mayor lacra del Lumines destinado a Xbox Live Arcade (un t¨ªtulo parco en contenido que requiere la descarga de nuevo material mediante micropagos para poder ser considerado completo) no se encuentra presente en este Lumines Supernova, ya que su oferta es m¨¢s que extensa desde un principio. Eso s¨ª, existen un par de incomprensibles e importantes carencias, las cuales pasar¨¢n a ser rese?adas a su debido tiempo. De momento, centr¨¦monos en la oferta del t¨ªtulo que nos ocupa en lo que a modos de juego se refiere.

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Lo m¨¢s recomendable para adentrarse en la experiencia Lumines es sin duda el modo Desaf¨ªo, que ser¨¢ la llave para desbloquear nuevas melod¨ªas y fondos de pantalla. Dicho modo se encuentra dividido en dos apartados: b¨¢sico y avanzado. En el modo b¨¢sico los bloques caer¨¢n lentamente, mientras la l¨ªnea temporal que los barre se desplazar¨¢ con aceptable rapidez; en el modo avanzado, l¨®gicamente, ocurrir¨¢ justo lo contrario, con lo que la dificultad subir¨¢ varios enteros. Tras Desaf¨ªo nos encontramos con el modo Editar Skin, una suerte de juego libre en el que podremos seleccionar los fondos de pantalla y melod¨ªas con las que queremos jugar. Luego tenemos el Contrarreloj, en el que debemos eliminar todas las piezas posibles en un tiempo determinado. El modo Excavador ofrece nuevas variantes a la mec¨¢nica, ya que partiremos de entrada con varias filas de piezas ubicadas en la parte inferior de la zona de juego, siendo nuestro objetivo despejar un determinado n¨²mero de columnas antes de que expire el tiempo l¨ªmite.

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En ¨²ltimo lugar quedan los que son sin duda los modos de juego m¨¢s dif¨ªciles, reservados ¨²nicamente a aut¨¦nticos expertos en Lumines Supernova. En el modo Rompecocos debemos crear diversas figuras geom¨¦tricas usando los bloques que caen desde el extremo superior de la zona de juego. Dichas figuras pasan desde cruces y cuadrados simples hasta formas m¨¢s complejas como jirafas, platillos volantes o flores; todas ellas deber¨¢n ser creadas dentro de un l¨ªmite de tiempo marcado. Y por ¨²ltimo tenemos el modo Misi¨®n, en el cual deberemos cumplir una acci¨®n determinada para poder avanzar, como limpiar una pantalla completa de piezas en un n¨²mero determinado de turnos, borrar una cadena concreta de bloques en una sola pasada de la l¨ªnea temporal, etc? Muchas de estas misiones requerir¨¢n habilidad y grandes dosis de ingenio por nuestra parte, as¨ª que habr¨¢ que tomarse las cosas con calma.

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La gran carencia de Lumines Supernova la encontramos en el modo Duelo, destinado a las partidas uno contra uno. ?stas s¨®lo pueden llevarse a cabo contra un segundo jugador desde una misma consola. No existe posibilidad de competir contra la CPU, o alg¨²n modo online que nos permita retar a aficionados por Internet. Ambas carencias son incomprensibles, dado que el modo vs. CPU se encuentra disponible en otras entregas de Lumines (incluso en la versi¨®n destinada a tel¨¦fonos m¨®viles), y el modo online, bueno, es obvio que deber¨ªa haber sido obligatoria su inclusi¨®n, m¨¢s a¨²n teniendo en cuenta que dicha posibilidad existe en el Lumines destinado a Xbox Live Arcade.

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Una de las mayores adiciones de Lumines Supernova respecto a anteriores entregas de la franquicia es el denominado Secuenciador, mediante el que podremos crear nuestras propias melod¨ªas. Dicha posibilidad ya se encontraba implementada en el Lumines II de PSP, aunque aqu¨ª ha sido agradablemente potenciada. Sorprende la facilidad con la que podremos crear m¨²sica, dado que para ello ¨²nicamente debemos escoger distintos ritmos y efectos divididos en varias clases, con un resultado ciertamente notable en la mayor¨ªa de las ocasiones por muy aleatoria que sea nuestra selecci¨®n de temas.

Impresiones finales

De entrada, es obligatorio subrayar que Lumines Supernova se convierte por m¨¦ritos propios en una m¨¢s que notable adici¨®n al cat¨¢logo de juegos de PSN, as¨ª como en uno de los puzzles m¨¢s destacados del cat¨¢logo de la tienda virtual de PS3 junto a Echochrome y Super Puzzle Fighter II HD. La extraordinaria fusi¨®n lograda entre jugabilidad, gr¨¢ficos y sonido, as¨ª como la simpleza de mec¨¢nica al tiempo que profundidad de juego que se nos brinda, son los mayores logros de Lumines Supernova. El gran y variado n¨²mero de modos que se nos ofrece brindan horas y horas de diversi¨®n y estrujamiento de neuronas en el caso de que afrontemos nuestras partidas en solitario.

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En cambio, la mayor lacra de Lumines Supernova reside sin duda en su casi absoluta carencia de modos multijugador, ya que ¨²nicamente podremos competir contra otro usuario desde una misma consola. Las modalidades online brillan por su ausencia, algo absolutamente incomprensible teniendo en cuenta tanto la clase de juego que nos ocupa como las posibilidades que una consola de la actual generaci¨®n como PS3 brinda a la hora de jugar por Internet. La ¨²nica explicaci¨®n posible a dicha carencia es la posibilidad de que la modalidad online se nos ofrezca en el futuro por medio de una descarga adicional; de acabar siendo as¨ª, tambi¨¦n habr¨ªa que criticar aquello que ha hecho del Lumines destinado a Xbox Live Arcade un juego de precio abusivo. De entrada, este Lumines Supernova no lo es, dado que ofrece una gran y completa experiencia monojugador por 15 d¨®lares, un precio que seguramente se mantendr¨¢ en 15 € en su desembarco europeo; aunque esperamos que sea al menos ligeramente inferior, dado el cambio de moneda.

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-Mec¨¢nica de juego simple, libre de cualquier clase de complicaci¨®n

-La profundidad y jugabilidad de la que hace gala Lumines Supernova es m¨¢s que notable

-La agradable fusi¨®n entre el apartado audiovisual y jugable da como resultado una experiencia fresca y con identidad propia