Una peque?a mascota

La mec¨¢nica en el modo principal Mi Pet Shop es bastante sencilla. El jugador empezar¨¢ con algunas mascotas en la plaza mayor donde ir¨¢ cumpliendo los objetivos marcados por cartas que llegan al buz¨®n. Cumpliendo los requisitos marcados se obtendr¨¢n nutris, que son como una especie de monedas que se podr¨¢n canjear en la tienda por accesorios, complementos y nuevas mascotas. Cada vez habr¨¢ objetos m¨¢s caros en la tienda que requerir¨¢n m¨¢s trabajo y mejores puntuaciones en las pruebas.

Los minijuegos son la base del modo principal. Los animales ir¨¢n pensando en minijuegos disponibles que se podr¨¢n seleccionar. Estos usan principalmente el stylus, y van desde ordenar fichas de colores como si de un puzle se tratara a marcar los matorrales donde las mascotas se esconden. En total, hay una quincena de minijuegos, algunos tan sencillos como dar vueltas con el stylus para que una rueda coja mucha velocidad a otros m¨¢s complejos como pulsar correctamente series de botones para conseguir el balanceo ¨®ptimo en un columpio. La mayor¨ªa de ellos son bastante sencillos, y s¨®lo intentar en algunos casos la m¨¢xima puntuaci¨®n puede traer alg¨²n problema en los primeros intentos. Normalmente hay tres niveles de dificultad para poder adaptarse al nivel del jugador.

Los animales tambi¨¦n se tendr¨¢n que cuidar y mimar. Para eso, hay la opci¨®n de controlar a la mascota y darle de comer o acariciarla para que se sienta m¨¢s a gusto. Todo lo que hagamos nos dar¨¢ recompensa en forma de nutris que luego podremos cambiar en la tienda. Los objetos sirven para poder personalizar a las mascotas con todo tipo de atuendos, ya sean gafas, gorros, vestidos, etc. Hay bastantes objetos para comprar y dar un toque personal a cada mascota.

Los mapeados no son demasiado extensos, pero sirven para poder recoger nutris que est¨¢n esparcidos por la zona y tambi¨¦n para montar diferentes accesorios como columpios, pelotas de goma, toboganes y? cintas de correr entre otros. Los animales podr¨¢n montarse en estos espacios y, cumpliendo con los objetivos marcados (en algunos casos se trata de seguir con el stylus una estrella que se va moviendo) nos dar¨¢n el dinero de Littlest Pet Shop a cambio. A m¨¢s nutris, m¨¢s posibilidades de completar la familia comprando a las mascotas que se venden en la tienda.

Fuera del modo principal existe la opci¨®n de jugar directamente a los minijuegos en el modo recreativo. Adem¨¢s, hay la posibilidad de jugar con otros amigos mediante comunicaci¨®n inal¨¢mbrica -cada uno con su respectivo juego.? El modo fiesta permite albergar partidas de seis juegos seleccionados previamente para jugar con hasta tres compa?eros m¨¢s. Una vez completados los minijuegos, se hace una puntuaci¨®n de cada jugador y sale el r¨¢nking del primero al cuarto.

Conclusi¨®n
Littlest Pet Shop es un producto dirigido a un p¨²blico muy concreto. Su sencillez a la hora de controlar y realizar los retos, as¨ª como la poca dificultad que tiene conseguir los nutris necesarios para completar el juego coleccionando mascotas y desbloqueando todos los mundos va dirigido a jugadores de temprana edad. Y aun as¨ª, el juego se antoja corto y demasiado simple en algunos aspectos como para satisfacer a los jugadores que no sean amantes del mundo de estas mascotas cabezonas. T¨¦cnicamente el juego tampoco destaca en especial, con gr¨¢ficos reconocibles, resultones pero poco acabados y unas melod¨ªas y sonidos que acompa?an sin m¨¢s al desarrollo.

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