Kingdom Hearts III
- PlataformaPS49.1XBO9.1PCNSW
- G¨¦neroAcci¨®n, RPG
- DesarrolladorSquare Enix
- Lanzamiento29/01/2019 (PS4, XBO)30/03/2021 (PC)10/02/2022 (NSW)
- VocesIngl¨¦s
- EditorSquare Enix
Coraz¨®n abierto
Kingdom Hearts 3, an¨¢lisis
La traves¨ªa llega a su fin. Nomura y su equipo ponen el broche de oro a una saga que muchos esperaban ver concluida.
Desde su concepci¨®n en 2002, Kingdom Hearts es una saga dif¨ªcil de explicar, con una existencia que podr¨ªamos tachar de milagrosa por la suma de factores y una premisa que ser¨ªa incluso fantasiosa en la mente de un adolescente que se inicia en el mundo del fan fiction. ?Unir a Mickey Mouse y Cloud Strife en el mismo videojuego? ?Proponer una historia en la que un chaval sacado de un shonen se al¨ªa con Donald y Goofy para vencer a la oscuridad? En 2002 chocaba y en 2019 ya podemos hablar de ello como uno de los m¨¢s excepcionales 'accidentes' de la historia del medio. Porque cualquiera que haya jugado a la saga sabe que, de la misma forma que Evangelion no es un anime sobre robots gigantes, Kingdom Hearts no es en absoluto lo que parece a simple vista.
Es por ello que la llegada de un videojuego como Kingdom Hearts III supone todo un acontecimiento, porque es una franquicia que pese al paso de los a?os ha sobrevivido no s¨®lo a varias generaciones de jugadores, sino que ha salido airosa de una explotaci¨®n comercial reiterada y de contar con una de las historias m¨¢s fragmentadas que se recuerdan, haciendo que cada uno de los t¨ªtulos que llevan su nombre sean importantes para una conclusi¨®n final. Las buenas (buen¨ªsimas) noticias son estas: Tetsuya Nomura, Tai Yasue y el resto del equipo han conseguido no s¨®lo dar respuestas a la gran mayor¨ªa de enigmas, sino facturar un juego sobresaliente y que se siente como algo ¨²nico.
Las conexiones del coraz¨®n
Kingdom Hearts III arranca justo al final de Dream Drop Distance, el juego de la franquicia que se lanz¨® originalmente Nintendo 3DS y que lleg¨® hace unos a?os remasterizado a PlayStatoin en el pack KH 2.8.; Este dato no ser¨ªa demasiado relevante de no ser porque estamos ante el, como sus propios creadores han promocionado, el final de la saga de Xehanort. Y aunque el juego hace un peque?o esfuerzo por contextualizar, explicar conceptos de la serie y personajes mediante una actualizaci¨®n del convencional diario de Pepito Grillo, al final la historia es lo que es: un final. Matizamos esto no como algo negativo, pues a fin de cuentas es perfectamente l¨ªcito, sino como una peque?a advertencia para los que teng¨¢is pensado jugarlo habiendo completado ¨²nicamente las entregas numeradas. Birth by Sleep introdujo a entre otros Aqua, Ventus, Terra y el Maestro Xehanort; y todos tienen su papel en esta entrega. Dream Drop Distance nos habl¨® del poder del despertar, de los ex¨¢menes para ser maestros de la Llave Espada de Sora y Riku, de las siete luces y las trece oscuridades, etc; y todo esto tiene relevancia y continuaci¨®n aqu¨ª. M¨¢s a¨²n: Union X, el juego exclusivo de tel¨¦fonos m¨®viles, tambi¨¦n es importante para encajar todas las piezas en este puzle narrativo.
Dicho esto, y pese su naturaleza de gran colof¨®n final (no se os ocurrir¨ªa ver la ¨²ltima temporada de "Juego de Tronos" teniendo s¨®lo en cuenta la primera, ?verdad?), hay algo en Kingdom Hearts III que hace que sea igualmente disfrutable y es que su narrativa es ciertamente robusta. Decir esto de un RPG no deber¨ªa ser una sorpresa pero en una saga con tantas ramificaciones, m¨¢s en esta en particular, en la que hay viajes temporales, mundos paralelos y un sinf¨ªn de caracter¨ªsticas que no viene a cuento recordar, supone todo un logro.
En la previa al an¨¢lisis de Kingdom Hearts III opt¨¦ por rejugar varias entregas de la saga que llevaba a?os sin revisitar, tales como los dos primeros Kingdom Hearts numerados o Dream Drop Distance en su revisi¨®n para PS4 y lo cierto es que m¨¢s all¨¢ de lo puramente tecnol¨®gico esta nueva entrega supone un salto de gigante para la franquicia, mucho m¨¢s segura de s¨ª misma a la hora de darle empaque a sus personajes, abrir y cerrar conflictos e incluso en la sinergia existente entre los mundos de Disney y los personajes originales de la franquicia. De esta forma, la experiencia es plenamente disfrutable aunque aparezca de la nada uno de los m¨²ltiples Xehanort y no sepamos ubicarlo en la cronolog¨ªa.
El videojuego que Disney y Pixar merec¨ªan
Si hay algo que se presume definitorio de la franquicia Kingdom Hearts, esa es la forma en la que los mundos de Disney son representados en pantalla, no siempre de la mejor forma posible (especialmente en los t¨ªtulos de port¨¢tiles) pero con un balance general sumamente positivo. Pesadilla Antes de Navidad tuvo una segunda vida virtual en PlayStation 2 con las magn¨ªficas recreaciones que Square llev¨® a cabo de Ciudad de Halloween y la Ciudad de la Navidad en las dos primeras entregas, mismo caso que otros como TRON, o especialmente esa Port Royal casi fotorrealista que desafiaba las convenciones de la serie con un acabado glorioso en sus sistema original. Quiz¨¢, de todos los creados hasta ahora, fueran estos citados, junto a los de Pinocho y Fantas¨ªa de Dream Drop Distance los mejor dise?ados hasta la fecha.
Importante este ¨²ltimo matiz, porque lo que Square Enix ha hecho con Kingdom Hearts III ha sido superarse en cada uno de los frentes y todos los mundos del t¨ªtulo son rotundamente mejores que todo lo que se haya visto jam¨¢s en esta franquicia, no s¨®lo en la parte tecnol¨®gica (de la que hablaremos m¨¢s adelante) sino en lo que tiene que ver con dise?o estructural, partes mec¨¢nicas y jugables, e incluso jefes finales o contenido secundario.
Por tomar un ejemplo concreto, El Olimpo es el primer mundo que se visita en el t¨ªtulo y fue tambi¨¦n el primero en anunciarse all¨¢ por 2014. Este mundo se compone de dos grandes zonas, siendo una de ellas la ciudad de Tebas y otra el Olimpo, con una espectacular y preciosista de transici¨®n, de gran tama?o, con mucho plataformeo y verticalidad. Cada zona es enorme, est¨¢ interconectada y s¨®lo requiere una carga por pantalla. Si hasta ahora los mundos m¨¢s amplios eran los de Dream Drop Distance, en KH3 la cosa va a much¨ªsimo m¨¢s y es un verdadero placer visitar no s¨®lo las localizaciones sino dejarse perder en ellas, fijarse en los m¨²ltiples detalles a?adidos (que no son pocos) y simplemente disfrutar recogiendo coleccionables.
En el caso de El Olimpo tambi¨¦n hay un gran trabajo a la hora de establecer las bases jugables del t¨ªtulo en lo que respecta al combate, la exploraci¨®n y sobre todo esa verticalidad que convierte a esta entrega en la m¨¢s rica, compleja y elaborada hasta la fecha. Sus mapas ya no son zonas peque?as y vac¨ªas interconectadas; ahora respiran, son recreaciones absolutamente formidables de las pel¨ªculas en las que se basan.
Y tenemos que hablar de otro aspecto que hace de esta entrega algo especial, algo que tiene que ver con unos valores de producci¨®n absolutamente mastod¨®nticos y que dejan en evidencia a pr¨¢cticamente cualquier juego publicado por la compa?¨ªa en los ¨²ltimos a?os, pudiendo llegar a compararse con el boom que supuso all¨¢ por 1997 la publicaci¨®n de Final Fantasy VII en comparaci¨®n a sus juegos contempor¨¢neos. S¨ª, la tecnolog¨ªa ayuda, estamos ante un juego que sale en el final de la vida de PlayStation 4 y Xbox One, pero no tiene tanto que ver con la t¨¦cnica como s¨ª con el talento de sus directores de cinem¨¢ticas, especialmente en aquellos mundos en los que son libres para reinterpretar los iconos a los que acogen.
Es extremadamente f¨¢cil ver una secuencia de Toy Story, de varios minutos, y olvidarnos de que estamos jugando a Kingdom Hearts y no a un juego oficial basado en la licencia de Pixar, porque es tal el grado de detalle, el trabajo de iluminaci¨®n, la formidable realizaci¨®n a nivel puramente cinematogr¨¢fico, el acting incluso de los personajes (c¨®mo se mueven, gesticulan, interact¨²an entre s¨ª) que se nota que los a?os en los que el t¨ªtulo ha estado desarroll¨¢ndose ha habido detr¨¢s un presupuesto holgado. Y comparando casi cualquier aspecto del mismo con el de t¨ªtulos como Final Fantasy XV salta a la vista cu¨¢l ha sido el que ha salido a destiempo y cu¨¢l ha aprovechado cada mes de desarrollo para pulirse al extremo.
Como en Kingdom Hearts II, el caso m¨¢s evidente de esta situaci¨®n es el del mundo basado en Piratas del Caribe. La iluminaci¨®n crea el hechizo de ver a Davy Jones, Jack Sparrow u otros personajes y venirse a la cabeza autom¨¢ticamente las pel¨ªculas, e incluso hay secuencias que vi¨¦ndolas un poco a lo lejos, o entrecerrando los ojos, podr¨ªan pasar perfectamente por momentos de los films multimillonarios que arrasan en taquilla.
Esto no es balad¨ª, si tenemos en cuenta que en algunos casos las historias de cada mundo son originales pero en otros se reinterpretan la trama de las mismas, y claro est¨¢, un mundo de Frozen no podr¨ªa existir sin su correspondiente secuencia de Elsa cantando Let It Go mientras construye su palacio de hielo. Misma voz (Idina Menzel), diferente motor 3D, y el mismo hechizo: una recreaci¨®n absolutamente magistral. Lo que se saca en claro con Kingdom Hearts III es que s¨ª, tiene menos mundos de lo habitual, pero es tal el mimo y cuidado dedicado a cada uno de ellos, y que su duraci¨®n es tan holgada (entre dos y cuatro horas, dependiendo del mundo, y por supuesto tambi¨¦n si nos dedicamos a conseguir el 100% o s¨®lo pasar por all¨ª) que no importa que no haya m¨¢s. Y que lo ¨²nico que puede criticarse es que ojal¨¢ se hubieran hecho as¨ª otros que en los t¨ªtulos previos se sent¨ªan desaprovechados, como el de Lilo y Stich en Birth by Sleep.
M¨¢s espectacular que nunca
Establecido todo lo anterior, toca hablar de los pormenores del t¨ªtulo a nivel mec¨¢nico. Algo que los que conozc¨¢is la franquicia y su progresi¨®n no necesitar¨¦is y que viendo cualquier v¨ªdeo queda en evidencia por qu¨¦ derroteros ha tirado, pero vamos a separar este bloque en tres partes para as¨ª cubrir cada aspecto determinante del mismo. Por un lado, hablemos de los combates, algo que en KHII ya era magn¨ªfico (especialmente en niveles de dificultad altos, donde se le sacaba todo el partido) y que con Birth by Sleep termin¨® de pulirse del todo. O el flowmotion de Dream Drop Distance, que permit¨ªa hacer aut¨¦nticas locuras a nivel de movilidad, como rebotes en las paredes, ascender a zonas elevadas con plataformeo continuo o movernos r¨¢pidamente de una zona a otra. Todo esto se ha mantenido de alguna forma en esta tercera entrega numerada, conformando el que es sin duda alguna el mejor sistema de batalla de la franquicia, O haciendo un s¨ªmil que espero sea entendible: si KHII era Smash Bros. Melee, KHIII es Smash Bros. Ultimate. La riqueza y rigor de aquel se han barnizado aqu¨ª para darle un aspecto m¨¢s espectacular, mucho m¨¢s llamativo en lo visual y eficaz en lo pr¨¢ctico. Ayuda, claro, que la c¨¢mara por primera vez en la serie no sea un desastre salvo en ocasiones muy puntuales y con una soluci¨®n sencill¨ªsima (soltar el blanco fijo en zonas peque?as).
Y a lo anterior hay que sumarle novedades, como por ejemplo el hecho de que Sora puede llevar hasta tres Llaves Espada y cambiarlas en tiempo real con la cruceta digital. Cada una de ellas es un ente vivo en el sentido en que tienen habilidades propias y transformaciones que dan lugar a movimientos finales devastadores, por lo que se introduce un aspecto estrat¨¦gico para permitir al jugador decidir qu¨¦ le conviene m¨¢s para los enfrentamientos: ?mejor llaves espadas potentes en el valor de magia frente al de fuerza? Si tu enemigo usa ataques en ¨¢rea, ?compensa m¨¢s bajar el da?o para poder utilizar proyectiles con la habilidad definitiva? Este tipo de cosas enriquecen un sistema de combate que por fluidez y ejecuci¨®n es absolutamente satisfactorio, al margen de que tenemos a los impert¨¦rritos Donald y Goofy siempre de nuestro lado adem¨¢s de los invitados que se nos unen en cada uno de los mundos de Disney.
Todos ellos son configurables para que su IA pueda ajustarse a nuestras necesidades. ?Necesitamos que Donald cure? Esa orden no tiene soluci¨®n conocida, de momento. Pero podemos hacer que priorice sus puntos de magia para usar hechizos que sean beneficiosos para el grupo en lugar de lanzar Piro contra las paredes. O hacer que H¨¦rcules arrase con los enemigos a los que tenemos nosotros en el blanco, en lugar de separarse e ir a lo suyo. Son matices que funcionan muy bien y enriquecen la experiencia.
Por otro lado, y obviando la existencia del Tiro certero (que ya conoc¨ªamos con anterioridad y aumenta la movilidad adem¨¢s de servir como elemento ofensivo) habr¨ªa que hablar del sistema de atracciones, otra de las novedades de esta entrega. Esto gustar¨¢ m¨¢s o menos y es posible que quiz¨¢ sea una ayuda un poco excesiva en ciertos combates, pues consiste en que a medida que damos golpes a los enemigos y un medidor de combo invisible va aumentando, se cree la opci¨®n de usar tri¨¢ngulo para activar un comando de reacci¨®n que hace que Sora y compa?¨ªa se suban a una atracci¨®n para acabar con los enemigos. No son muchas pero s¨ª son bastante fuertes en batalla, y aunque queda en manos del usuario decidir si usarlas o no, y est¨¢ bien como alternativa, quiz¨¢ podr¨ªan haberse gestionado de forma distinta para que tuvieran un valor a?adido m¨¢s all¨¢ de lo que verdaderamente sorprende la primera vez que se usan: su puesta en escena, una se?a m¨¢s del absoluto despliegue que es Kingdom Hearts III en el plano audiovisual.
Por lo dem¨¢s, el combate mantiene la estructura habitual: batallas en tiempo real, con opci¨®n de usar no s¨®lo ataques f¨ªsicos sino tambi¨¦n de magia (regida por un medidor) o invocar a personajes como Simba de El Rey Le¨®n o Ralph de Rompe Ralph. En esencia el combate es magn¨ªfico y se le pueden poner pocas pegas si se le saca el partido adecuado. Pero sobre todo, destaca su riqueza visual.
El segundo bloque a tener en cuenta es la parte mec¨¢nica que corresponde a lo que hacemos en cada mundo, a c¨®mo se exploran, en qu¨¦ consisten m¨¢s all¨¢ de lo evidente: ver como Sora se interrelaciona con personajes ic¨®nicos y les ayuda a superar alg¨²n problema. De nuevo tenemos una evidente progresi¨®n y evoluci¨®n de entregas previas, con plataformeo y verticalidad heredados directamente de DDD, pero llevados al extremo, llegando al punto de que en algunos de los mundos casi podr¨ªamos hablar de juegos con entidad propia, siendo el ejemplo m¨¢s claro el de Piratas del Caribe y su mundo, en el cual adem¨¢s de una ciudad enorme a explorar tenemos un peque?o archipi¨¦lago en el que podemos movernos libremente tanto en barco como a nado, para encontrar tesoros o cosas secundarias. Y claro est¨¢, hay batallas navales (sencillas pero eficaces) o la opci¨®n de mejorar el nav¨ªo. O el mundo de Winnie the Pooh, que como siempre consiste en minijuegos pero que aqu¨ª tienen una l¨ªnea marcada y siguen un patr¨®n concreto. Cada mundo es, valga la redundancia, un mundo diferente. Lo ¨²nico que comparten todos ellos es la presencia de m¨²ltiples coleccionables como son cofres o marcas ocultas con la forma de la cabeza de Mickey Mouse, necesarias estas ¨²ltimas para desbloquear el final secreto del juego.
Por ¨²ltimo, tenemos que hablar en esta tercera parte de la Nave Gumi, incuestionablemente uno de los aspectos que menos consenso crean entre los fans de la saga. En el primer t¨ªtulo era un tr¨¢mite necesario y poco agradecido, pero en Kingdom Hearts II se redise?¨® para hacer de la experiencia algo much¨ªsimo m¨¢s inmersivo e interesante, con combates contra naves de gran tama?o adem¨¢s de las habituales secciones de exploraci¨®n.
Si os gust¨® en alguna entrega previa -e incluso si no fue as¨ª- tranquilos porque en Kingdom Hearts III ha cambiado para bien. Ya no existen rutas como tal, sino un espacio libre y de semi-mundo abierto a trav¨¦s del cual podemos movernos para acceder a los mundos, eligiendo si por el camino queremos enfrentarnos a enemigos (algunos duros de roer) basados en niveles de dificultad, buscar constelaciones en el espacio (otro de los coleccionables) o ir directamente al grano. Sigue existiendo (c¨®mo no) la opci¨®n de personalizar la nave para mejorarla, cambiar su dise?o, conseguir piezas, etc¨¦tera. Es sin duda alguna la mejor versi¨®n que ha tenido este aspecto de la franquicia hasta la fecha, sin ser tampoco algo brillante, y se nota que parte del equipo que trabaj¨® en esa joya llamada Einh?nder de PlayStation ha colaborado en su confecci¨®n.
Conclusi¨®n
Kingdom Hearts III es en esencia el mejor juego de la franquicia hasta la fecha en todos y cada uno de los apartados. A nivel t¨¦cnico est¨¢ no s¨®lo por encima de sus antecesores sino de pr¨¢cticamente cualquier JRPG de los ¨²ltimos a?os y art¨ªsticamente puede mirar de t¨² a t¨² a Persona 5 como el mejor representante del g¨¦nero a este respecto de los ¨²ltimos a?os, con un acabado visual espectacular, un muy buen rendimiento incluso en la PlayStation 4 original (que es la que se ha usado para este an¨¢lisis), detalles que no se podr¨ªan comentar sin revelar sorpresas, secuencia de v¨ªdeo generadas con el motor del juego que son un regalo para los fans de Disney y c¨®mo no, una portentosa banda sonora de Yoko Shimomura y su equipo. <p><p> Es incuestionable que como ocurre con Final Fantasy, o incluso de forma a¨²n m¨¢s pronunciada, gran parte de la esencia de la serie reside en las maravillosas composiciones de Shimomura y Kingdom Hearts III no decepciona a este respecto. Por lo dem¨¢s, una jugabilidad r¨¢pida, con mec¨¢nicas variad¨ªsimas, mundos con suficientes cosas por hacer como para que revisitarlos sea un placer y no un mero tr¨¢mite y sobre todo, el que hayan sido capaces de solucionar las trabas narrativas de una saga que lleva diecisiete a?os en el candelero con entregas en m¨²ltiples sistemas. Una aventura sobresaliente que ha llegado para recordarnos porqu¨¦ Sora, Riku y Kairi... y Donald, Goofy y Mickey Mouse, claro, son historia viva de los videojuegos.
Lo mejor
- Todos sus mundos est¨¢n dise?ados con talento, sensibilidad y amor palpable hacia las licencias originales
- Sistema de combate m¨¢s vistoso y divertido que nunca
- Una duraci¨®n que se multiplica con contenido extra y secundarias
- Historia emocionante que ata la mayor¨ªa de cabos sueltos y cuenta con sorpresas
- Dise?o art¨ªstico de otra galaxia
- Una banda sonora de Shinomura que vuelve a ser memorable
Lo peor
- No es malo de por s¨ª, pero que sirva de aviso: si no tienes la saga al d¨ªa algunas cosas pueden resultar confusas, pues a fin de cuentas es un cap¨ªtulo final
- La nave Gumi ha mejorado, pero no tanto como para que sea divertido invertir en ella
- Lo sab¨ªamos pero sigue doliendo: sin personajes de Final Fantasy
Excelente
Un t¨ªtulo referente en su g¨¦nero, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutar¨¢s de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en cl¨¢sico con el paso de los a?os. C¨®mpralo sin pesta?ear.