Haegemonia: Legions of Iron (PC)
Los h¨²ngaros de Digital Reality preparan un t¨ªtulo de estrategia ambientado en el espacio que aseguran ser¨¢ una bomba. Nosotros os presentamos sus caracter¨ªsticas esperando su lanzamiento en Mayo.
Digital Reality es una compa?¨ªa de origen h¨²ngaro, en cuyo curriculum incluye ¨¦xitos de la talla de Imperium Galactica I y II, y que muy pronto tratar¨¢ de sorprendernos con su nuevo trabajo: Haegemon¨ªa: Legions of Iron.
Haegemon¨ªa pretende aportar nuevas ideas al saturado mundo de la estrategia en tiempo real, todo ello arropado por la calidad de un motor gr¨¢fico en cuyo desarrollo se ha invertido m¨¢s de a?o y medio. Una de sus m¨¢s atractivas caracter¨ªsticas, es que desarrollar¨¢ el tema de la guerra en el espacio, a escala ¨¦pica. Es decir: desde nuestra posici¨®n como comandante en jefe podremos controlar desde los movimientos de un simple pelot¨®n, o gestionar los movimientos de todo una flota gal¨¢ctica.
Lazlo Peller, portavoz de Digital Reality, afirm¨® en una reciente entrevista que el universo recreado por Haegemon¨ªa contar¨¢ con unos cuarenta sistemas solares, con sus respectivos planetas, asteroides y estaciones orbitales. Nosotros, desde nuestra posici¨®n como comandantes en jefe, podremos gestionar la producci¨®n de cada uno de esos planetas, o bien dejarla en manos en nuestros comandantes, para concentrarnos en otras tareas, como la gesti¨®n de nuestra flota gal¨¢ctica.
Ese ¨²ltimo punto, el de nuestros oficiales, es otro de los m¨¢s interesantes atractivos de este t¨ªtulo. Tendr¨¢n capacidad de aprendizaje y, como en un juego de rol, a medida que progrese el juego adquirir¨¢n experiencia y mejorar¨¢n sus habilidades o adquirir¨¢n otras nuevas. Adem¨¢s, nuestros oficiales contar¨¢n con iniciativa propia, y podremos cederles la responsabilidad de dirigir libremente a las tropas y a los recursos bajo su mando. Obvia decir que se est¨¢ trabajando muy duro en la inteligencia artificial de cada uno de los personajes.
Las im¨¢genes que acompa?an a este art¨ªculo, de momento, son las ¨²nicas muestras del aspecto que tendr¨¢ Haegemon¨ªa. No, no se trata de dibujos realizados por un profesional, ni siquiera de pantallas de presentaci¨®n: son im¨¢genes directamente extra¨ªdas del juego. Alucinante: ese es el ¨²nico comentario que se me ocurre.
Evidentemente, tendremos que esperar a que el juego est¨¦ listo para comprobar como funciona en nuestros ordenadores (s¨ª, esos arcaicos cacharros que compramos en el cret¨¢cico, hace m¨¢s de un mes). De momento, contamos con esas im¨¢genes, y la promesa de un motor gr¨¢fico capaz de mover 100.000 pol¨ªgonos, y que cuenta con un sistema llamado LOD (Level of Details) que nos permitir¨¢ hacer zoom sobre cualquier planeta o nave sin que se pierda la calidad de los detalles.
El argumento del juego tiene lugar en el futuro. Un futuro en el que la humanidad ha conseguido colonizar todo el sistema solar, y se prepara para dar el salto a otros horizontes. Pero no va a ser una tarea sencilla, sobre todo porque cada colonia o facci¨®n intenta imponer sus propios criterios e intereses. Nuestro trabajo ser¨¢ el de reunir a toda la humanidad bajo una misma bandera. Pero ese s¨®lo representa el primer paso. Otras criaturas se preparan tambi¨¦n para conquistar la galaxia, y estar¨¢n dispuestas a todo para conseguirlo.
Los desarrolladores han afirmado que podremos elegir entre tres bandos: los humanos, y dos especies alien¨ªgenas cuyos nombres y caracter¨ªsticas a¨²n no han sido revelados. Adem¨¢s de estas razas, tropezaremos con otras, no seleccionables, que podr¨¢n ser amigas, enemigas o simplemente neutrales. Ya sea como humano o alien¨ªgena, nuestras principales armas ser¨¢n las naves, desde simples interceptores o grandes naves nodrizas. Se ha prometido que cada una de ellas podr¨¢ ser personalizada con un enorme repertorio de equipo extra, para mejorar caracter¨ªsticas tales como la autonom¨ªa de vuelo, la velocidad, la potencia de ataque o el nivel defensivo de los escudos. Adem¨¢s, como ya hemos tenido la oportunidad en numerosos t¨ªtulos del g¨¦nero, tendremos la oportunidad de desarrollar todo un ¨¢rbol de nuevas tecnolog¨ªas.
Retomando las palabras de Lazlo Peller, Digital Reality asever¨® que mediante la inteligencia artificial de nuestros comandantes, se ha pretendido facilitar la vida del jugador, ahorr¨¢ndole la siempre pesada tarea de la "microgesti¨®n". Por ejemplo, no tendremos que preocuparnos de enviar a la unidad X a buscar el recurso Y. Incluso, cada planeta contar¨¢ con sus sistemas autom¨¢ticos de defensa, y ser¨¢n capaces de rechazar un ataque y reparar los da?os pr¨¢cticamente sin nuestra intervenci¨®n.
Un elemento muy destacado por los desarrolladores ser¨¢ el del espionaje. En un universo abierto, donde el enemigo puede f¨¢cilmente saltarse nuestros cordones de vigilancia y atacar cualquier punto sin previo aviso, los esp¨ªas se convierten en una herramienta fundamental para el ataque y la defensa. Aunque, de nuevo, se ha insistido en la idea de que la inteligencia artificial ser¨¢ tan avanzada que esos esp¨ªas har¨¢n su trabajo sin necesitar de nuestra intervenci¨®n directa.
Pero Haegemon¨ªa incluye otras interesantes ideas, como la de la exploraci¨®n espacial. ?Recuerdan esa irrepetible joya llamada Starflight? El espacio no est¨¢ vac¨ªo: agujeros de gusano, campos de asteroides y criaturas desconocidas har¨¢n de cada viaje toda una aventura.
Del aspecto multijugador poco se sabe, salvo que ha sido trabajado con much¨ªsimo mimo. Hasta 16 jugadores podr¨¢n disfrutar de hasta ocho modalidades, incluyendo la de Muerte S¨²bita y juego Cooperativo. Para cerrar el elenco de virtudes que promete Haegemon¨ªa, se incluir¨¢n m¨¢s de veinte minutos de secuencias cinem¨¢ticas.
- Estrategia