Los cl¨¢sicos nunca mueren

Hab¨ªa un tiempo en el que con apenas cinco duros resultaban un premio muy goloso puesto que tal cantidad de dinero daba para muchas cosas, desde chucher¨ªas hasta una corta pero intensa partida a una recreativa de la ¨¦poca.  En esos momentos, no importaba que los gr¨¢ficos fueran en 3-d, el sonido envolvente o el sensor de vibraci¨®n. En esos momentos primaba m¨¢s la tensi¨®n y la diversi¨®n pura y dura concentrada en unos m¨ªseros minutos, tiempo que deb¨ªa dar para avanzar lo m¨¢ximo posible en el juego de turno. Nada comparado con hoy.

?Qui¨¦n no recuerda Choplifter y sus sucesivas entregas? S¨ª, aquel arcade en el que te pon¨ªas al mando de un helic¨®ptero cuya misi¨®n casi suicida era la de rescatar sucesivos rehenes mientras te cos¨ªan a balazos y misiles sin piedad por parte de los malos de turno? Pues s¨ª, este t¨ªtulo hereda pr¨¢cticamente la est¨¦tica, desarrollo y jugabilidad de susodicho, con las virtudes y defectos que luego comentaremos, pero adaptados al hardware de la port¨¢til de doble pantalla de Nintendo.

A decir verdad, este t¨ªtulo pod¨ªa haber llevado la coletilla de Choplifter sin ning¨²n problema, ya que las semejanzas entre ambos juegos son notables, aunque en este caso presenta novedades interesantes que aportan algo de frescura y originalidad a este t¨ªtulo, como la opci¨®n de uso de otros veh¨ªculos de combate adem¨¢s del helic¨®ptero, variedad de misiones y la incuestionable ayuda de nuestro ej¨¦rcito, que estar¨¢ dispuesto a echarnos una mano mientras nosotros nos jugamos el pellejo. 

Gr¨¢ficos, sonido, ametralladoras y rehenes

A primera vista, el juego no presenta un apartado gr¨¢fico revolucionario. El t¨ªtulo original tampoco lo era, pero daba lo mismo al trasladar todo el encanto a la jugabilidad.  Pese a todo, los gr¨¢ficos en 2-D con scroll horizontal lucen un buen acabado. El dise?o de nuestro veh¨ªculo es bueno, as¨ª como la ambientaci¨®n y variedad de escenarios, aunque en algunos casos unos presentan mayor n¨²mero de detalles que otros, que pueden resultar algo vac¨ªos. Respecto a los carros de combate y los soldados, ¨¦stos presentan una apariencia m¨¢s bien simple. No obstante, no empa?a el buen acabado general de este apartado. 

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En cuanto al sonido, ¨¦ste se encuentra muy bien recreado: disparos, bombas, explosiones. Todos se muestran bastante fieles a la realidad. La banda sonora es muy absorbente: una melod¨ªa ¨¦pica muy bien acabada y ampulosa nos acompa?ar¨¢ durante la partida, y que mostrar¨¢ toda su grandeza durante la pantalla de presentaci¨®n y pausas. 

Jugabilidad: ?te gusta pilotar?

Como ya dijimos al principio, este juego destaca m¨¢s por su apartado jugable que por los gr¨¢ficos. Si el t¨ªtulo al que hicimos referencia al principio destacaba por ello, en este caso no iba a ser menos.

El control de nuestro veh¨ªculo es muy simple e intuitivo. Con la cruceta controlaremos los movimientos y la velocidad, mientras que dispararemos con los botones cl¨¢sicos de toda la vida. No obstante, hay algo que puede suponer un escollo, y es que a veces la velocidad que puede llegar a tomar el avi¨®n o al helic¨®ptero puede suponer un peque?o problema. Y es que la inercia a veces nos puede producir m¨¢s de un disgusto. Adem¨¢s, si no ajustamos la velocidad podemos no conseguir atinar en nuestro objetivo, algo que puede suponer un engorro, sobre todo cuando tienes que volver al principio de la pantalla para recargar nuestras armas y salud. 

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El uso de la doble pantalla est¨¢ implementado en este juego. Mientras que en la superior se muestra el control de nuestro veh¨ªculo, en la inferior nos presenta el avance de tropas. As¨ª podemos tener un control m¨¢s o menos adecuado de la situaci¨®n, puesto que nunca vendr¨¢ mal la ayuda de nuestro ej¨¦rcito, sobre todo si nos encontramos en apuros. Asimismo se nos mostrar¨¢ una peque?a franja donde nos permitir¨¢ localizar nuestra posici¨®n con respecto al ¨¢rea de juego. Tambi¨¦n podremos conocer en cualquier momento donde se encuentran nuestros enemigos o aliados dependiendo del color, el rojo para los malos, y el azul para los buenos.

Por ¨²ltimo, dependiendo de si volamos m¨¢s o menos bajo, la pantalla se alejar¨¢ o acercar¨¢ autom¨¢ticamente, lo cual puede ser ¨²til para divisar torretas, soldados o lo que tengamos delante que no podamos divisar.

Respecto a las opciones de juego, la verdad es que est¨¢n las justas y necesarias. Modo campa?a, multijugador online, batalla uno contra uno y opciones de control. Un punto a favor a?adido del juego es la traducci¨®n a nuestro idioma, lo que ayudar¨¢ a comprender mejor el desarrollo de las misiones y las sucesivas ¨®rdenes que vayamos recibiendo.

Conclusiones: las guerras nunca son f¨¢ciles

Glory Days II es un t¨ªtulo que puede convertirse en una buena opci¨®n para el amante de los arcades de toda la vida, ya que sabe aglutinar con buenos resultados la esencia de los juegos cl¨¢sicos de toda la vida, sobre todo por la simplicidad que re¨²ne, y las nuevas mejoras que aporta nuestra port¨¢til. Los efectos de sonido, la doble pantalla y las posibilidades online aportan un a?adido de frescura a este t¨ªtulo. Sin embargo, los peque?os errores de control nos pueden jugar una mala pasada en nuestro devenir por las sucesivas misiones.

En definitiva, Glory Days II puede convertirse en una buena alternativa a los t¨ªtulos de acci¨®n que posee nuestra port¨¢til, y una buena opci¨®n para aquellos amantes de los arcades de disparos de toda la vida, aunque los puntos negros que posee quiz¨¢s le reste algo de inter¨¦s.  

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