Fog: Seek the hidden truth
- PlataformaPC4
- G¨¦neroAventura gr¨¢fica
- DesarrolladorCryo Networks
- Lanzamiento10/12/2001
- TextoEspa?ol, Ingl¨¦s, Franc¨¦s
Solitarios en la red
Cryo vuelve a la carga con las aventuras gr¨¢ficas, en esta ocasi¨®n hacen la prueba con una aventura a trav¨¦s de Internet. Parece una buena idea ?pero habr¨¢n dado en el clavo?
El g¨¦nero de las aventuras gr¨¢ficas pasa por una de las crisis m¨¢s importantes de los ¨²ltimos a?os. Compa?¨ªas como Sierra o Lucas Arts se han subido al tren del progreso y han abandonado un g¨¦nero que les otorg¨® prestigio hace una d¨¦cada. Aunque las aventuras ya no son lo que eran, en la actualidad existen compa?¨ªas que siguen apostando fuerte por las historias y los puzzles. Cryo es una de ellas y Fog?Seek the hidden truth es la prueba que lo demuestra.
A primera vista, lo que m¨¢s llama la atenci¨®n es su planteamiento, una aventura gr¨¢fica cien por cien online ambientada en el a?o 1888 de la Inglaterra victoriana. Un departamento de detectives de Scotland Yard, los Crimestalkers, se dedica a resolver los casos de asesinatos que se suceden continuamente en la capital inglesa. El jugador tendr¨¢ que introducirse, con o sin ayuda, en los c¨ªrculos de esta asociaci¨®n y convertirse en el mejor detective de la ¨¦poca.
Sin duda, todas estas premisas son interesantes "a priori" para el jugador, pero una vez comience a cumplir con los requisitos que necesita para jugar el concepto de interesante ir¨¢ perdiendo fuerza.
Existen dos formas de hacerse con el juego: a trav¨¦s de la p¨¢gina www.fogmysteries.com o compr¨¢ndose la caja con el CD e instalando el juego. No existen diferencias destacables entre una y otra, tan s¨®lo en la velocidad y, seg¨²n se mire, en el precio final. Si se decide comprar, el juego utilizar¨¢ el CD Rom para imprimir m¨¢s velocidad al movimiento y el jugador podr¨¢ resolver tres casos incluidos en el precio final. Si se quiere seguir jugando, habr¨¢ que comprar los denominados tokens o casos en la p¨¢gina web. ?sta tambi¨¦n es la segunda opci¨®n. El juego ir¨¢ un poco m¨¢s lento y habr¨¢ que adquirir tres casos por 12,13€. Hasta el momento hay un total de nueve casos disponibles, incluyendo la demo que es gratuita, y que desde aqu¨ª se recomienda jugar antes de comprar Fog por cualquiera de las dos v¨ªas.
El primer problema llega a la hora de realizar el registro. ?ste se hace a trav¨¦s de Internet en uno de los enlaces de la p¨¢gina principal. Despu¨¦s de rellenar unos datos personales, un apodo y una contrase?a, el juego te pide la clave, que se encuentra en la caja del CD o, si se ha adquirido por Internet, en el correo electr¨®nico enviado por la propia compa?¨ªa. Fog?Seek the hidden truth apareci¨® en el mercado en octubre del a?o pasado, pero hasta hace un mes la validaci¨®n de la clave no funcionaba por un error del servidor. Cuatro meses es mucho tiempo si se ha pagado un precio para disfrutar del juego.
Una vez superado este bache, cada vez que comience el juego pedir¨¢ un apodo y su correspondiente contrase?a. La primera vez habr¨¢ que seleccionar un personaje y darle un nombre. Existen cuatro profesiones, cient¨ªfico, abogado, que son hombres, y periodista y m¨¦dium, que son mujeres. Los nombres no se pueden escoger libremente, hay una lista restringida de nombres y apellidos de estilo victoriano. Sin embargo, s¨ª se puede cambiar el aspecto de los personajes, aunque tambi¨¦n con patrones establecidos.
Tras esto, el personaje entra en lo que el juego denomina Club. Y aqu¨ª viene el segundo inconveniente. El tiempo de espera puede oscilar entre los dos minutos y los cinco, dependiendo de la conexi¨®n. Con ADSL ha llegado a sobrepasar, en ocasiones, los cinco minutos. El Club es la antesala del juego. Desde aqu¨ª se puede acceder a la clasificaci¨®n global de los investigadores, haciendo clic en un mueble lleno de trofeos, leer un peri¨®dico o entrar en los salones privados, donde se re¨²nen los detectives y de los que no se ha podido comprobar su eficacia porque en este juego online nunca hay nadie. Tercer inconveniente.
Lo m¨¢s ¨²til del club es la Sala de los Stalkers, que en realidad es un recoveco de la sala principal. Aqu¨ª hay dos herramientas ¨²tiles para la resoluci¨®n de los casos. Un mapa de Londres desde el que se acceder¨¢ a los interrogatorios de posibles testigos y a lugares donde el jugador podr¨¢ documentarse, y un mapa del mundo que sirve para interrogar a testigos que vivan fuera de Inglaterra. Cada caso est¨¢ representado por un cuadro. Los cuadros que resaltan son los casos a los que se puede acceder. Si pinchamos en uno aparecer¨¢ la pantalla de investigaci¨®n. En esta pantalla hay una descripci¨®n general del caso, a veces demasiado densa para empezar, una lista de los servidores del juego, otra de la clasificaci¨®n de los jugadores, un bot¨®n para acceder al cuestionario de resoluci¨®n del caso y dos m¨¢s para comprar o conectarse al servidor y para volver al club.
Solucionado este paso, cuarto inconveniente. Otros cinco minutos de tiempo de carga y, por fin, comienza el juego. No deja de resultar sorprendente que siendo un juego online la soledad sea su caracter¨ªstica m¨¢s importante. Los tres primeros casos se parecen demasiado. No ya en su argumento, personas importantes de la Inglaterra victoriana asesinadas o desaparecidas, sino en su din¨¢mica. La mayor¨ªa de los objetos con los que se puede interactuar son los mismos en todos los casos y, lo que es a¨²n peor, sirven para lo mismo. Si se soluciona el primer caso, el resto son pan comido.
Quinto inconveniente, el p¨ªxel maldito o la maldici¨®n del p¨ªxel. Resulta frustrante para el jugador tener que se?alar el lugar justo para abrir una puerta o un caj¨®n, aunque a veces sea aleatorio. Se puede pasar de una estancia a otra haciendo clic desde la distancia y, sin embargo, no se puede abrir un caj¨®n si no pinchamos justo en el tirador.
Todos los casos se desarrollan en estancias cerradas, generalmente mansiones, con numerosas habitaciones. La din¨¢mica del juego consiste en mirar, manipular y coger todo lo que se pueda. Coger un objeto no significa que s¨®lo t¨² lo tengas. Se supone que otros jugadores tambi¨¦n pueden estar en ese caso y pueden asimismo investigar. Eso s¨ª, ellos no saben qu¨¦ objetos tiene el resto.
Sin embargo, estas acciones no ser¨¢n determinantes a la hora de solucionar el caso, de hecho, nada lo es. Si se quiere resolver hay que confiar en la l¨®gica del jugador. Los puzzles son muy sencillos, gran parte de ellos consisten en abrir puertas y buscar cartas, peri¨®dicos o papeles que desvelan parte de la trama. La opci¨®n de los interrogatorios, el ¨²nico contacto con otros personajes, es insuficiente a todas luces. S¨®lo hay que se?alar un nombre y el interrogado responder¨¢ lo que le parezca. Si se considera que se ha resuelto el caso, hay que volver a la pantalla de investigaci¨®n y rellenar el cuestionario. Cuatro preguntas sobre el caso que s¨®lo podr¨¢n responderse una vez. El jugador sabr¨¢ si ha acertado mirando la lista de ganadores pero no recibir¨¢ una explicaci¨®n. Ah¨ª termina todo.
No todo es tan negativo en Fog?Seek the hidden truth. La ambientaci¨®n de la ¨¦poca victoriana en todos los escenarios es digna de admiraci¨®n. Cada uno de los elementos que aparecen son de la ¨¦poca, desde el aspecto y los trajes de los personajes, hasta la decoraci¨®n. Sobre todo, llaman la atenci¨®n los cuadros que decoran las estancias. Copias muy bien logradas de obras de Vel¨¢zquez y Miguel ?ngel, por ejemplo.
Otro punto positivo es la visi¨®n por defecto en tercera persona. Cryo ha sorprendido en este aspecto. Tambi¨¦n puede cambiarse a primera persona, imprescindible para resolver muchos de los puzzles. Sin embargo, este cambio de tercera a primera persona tambi¨¦n acarrea problemas por su dif¨ªcil manejo, la c¨¢mara a veces se vuelve loca y resulta complicado "apuntar" hacia el sitio al que se quiere mirar.
Fog es un juego en tres dimensiones con unos gr¨¢ficos correctos, siempre y cuando se carguen completos, pero que no hace uso del juego de sombras en ning¨²n momento. Es m¨¢s, si el personaje se encuentra en un suelo de color claro, la cruz encargada de delimitar su posici¨®n en el suelo puede verse claramente, un fallo que llama mucho la atenci¨®n. Otro error importante se produce en un pasillo largo donde hay varias habitaciones. En su mitad se puede ver claramente la l¨ªnea que une las dos partes y el personaje, llegado a ese punto, se da media vuelta y no contin¨²a.
Por ¨²ltimo, hay que destacar la traducci¨®n irregular del juego. As¨ª como la p¨¢gina web y el primer caso est¨¢n traducidos correctamente, no ocurre lo mismo con las otras dos misiones. Una de ellas tiene la introducci¨®n en ingl¨¦s y el resto en franc¨¦s y la otra sigue con la introducci¨®n en ingl¨¦s.
Audio y video
Estos dos aspectos han sido muy cuidados en el juego. Las melod¨ªas, m¨²sica cl¨¢sica de misterio que recuerda a series de televisi¨®n de los ochenta, aparecen siempre que el personaje ha dado en el clavo y al comienzo de cada caso.
Los efectos de sonido tambi¨¦n son fieles a la realidad y acordes con las acciones. Son numerosos, desde las pisadas del personaje hasta sonido de cajones, de puertas y de armarios. La l¨¢stima es que el juego no permita que se luzcan.
Gui¨®n
Sin duda, lo mejor del juego. El planteamiento es muy original. El jugador encarnar¨¢ a un investigador del Club Crimestalkers, filial de Scotland Yard, y su misi¨®n ser¨¢ la resoluci¨®n de casos escabrosos que la polic¨ªa no quiere investigar.
Todos tienen detr¨¢s una documentaci¨®n de la ¨¦poca victoriana que puede mantener al jugador pegado a la pantalla horas? si le gusta la ¨¦poca victoriana. Los m¨®viles y la din¨¢mica de los asesinatos son de sobresaliente.
Jugabilidad
El manejo del juego es sencillo. El personaje se mover¨¢ con las teclas de direcci¨®n arriba, derecha e izquierda. Para interactuar con los objetos se utiliza el bot¨®n derecho del rat¨®n. Las acciones son mirar, representada por un ojo, manipular, una mano abierta, coger, una mano cerrada y una ¨²ltima que es individual en cada profesi¨®n. ?sta viene representada por objetos como una lupa, una pipeta o un p¨¦ndulo y son pr¨¢cticamente in¨²tiles porque no dan ninguna pista al jugador.
El inventario se encuentra en la parte inferior de la pantalla. Cada objeto estar¨¢ en un casillero. A la derecha hay unas flechas para mover la c¨¢mara autom¨¢ticamente y, a la izquierda, est¨¢n la opci¨®n de primera persona, representada por un ojo dentro de un frasco, y la de agacharse, simbolizada con unos intestinos dentro de un frasco. Otro punto de originalidad.
Por ¨²ltimo, tenemos el cuadro para hablar con otros jugadores. En ¨¦l aparecen, en franc¨¦s, los movimientos del jugador cuando entra y sale de los escenarios y tambi¨¦n los destinos de los otros jugadores, siempre y cuando est¨¦n en la misma sala. Escribiendo o utilizando los comodines de conversaci¨®n del manual se pueden mantener conversaciones con otros compa?eros. L¨¢stima que nunca haya nadie.
Estrategia y trucos
Fog es un juego bastante f¨¢cil. Como consejo general, lo de siempre en todas las aventuras gr¨¢ficas: mirar, coger y manipular todo. Siempre pinchar en el punto justo para evitar frustraciones y, si se da el caso, buscar aliados que ayuden a resolver los casos.
Compar¨¢ndolo con?
Otras aventuras gr¨¢ficas de detectives de ¨¦poca. Sherlock Holmes y El caso del escalpelo mellado y Sherlock Holmes y El caso de la rosa tatuada. Ambas son cl¨¢sicas y ambas superan a Fog en todos sus aspectos. Quiz¨¢, por su antig¨¹edad, no tengan unos gr¨¢ficos tan bien logrados, pero su diversi¨®n supera con creces a la de este juego. Y lo m¨¢s importante, en las aventuras de Sherlock Holmes siempre tenemos al Doctor Watson de compa?ero, aunque sea s¨®lo virtual.
La concepci¨®n original del juego. La ambientaci¨®n de la ¨¦poca victoriana. Los cuadros de Vel¨¢zquez. La visi¨®n en primera y tercera persona.
Mediocre
Pod¨ªa ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con ¨¦l quedar¨¢ archivado en la estanter¨ªa para no jugarlo nunca m¨¢s. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.