El hijo pr¨®digo vuelve a casa.

Final Fantasy es m¨¢s que un nombre, es una leyenda. Todos conocen la saga que naci¨® y creci¨® en las consolas de Nintendo. Y tras muchos a?os, es el momento de volver, para mejorar lo pasado y para preparar el futuro. Bienvenido a Final Fantasy Tactics.

Pero evidentemente, no fue la ¨²ltima. El incre¨ªble ¨¦xito le llev¨® a una segunda entrega, y luego toda una saga que contin¨²a hasta la onceava parte en nuestros d¨ªas. De entre esos 11 juegos, a Europa no empezaron a llegar hasta el s¨¦ptimo; el que marc¨® ¨¦poca, y el que enganch¨® a muchos seguidores. Despu¨¦s, Sony consigui¨® que Square lanzase unos remakes de las entregas anteriores a la s¨¦ptima para su PSOne; conversiones que s¨ª han llegado hasta Europa.

Y es que Nintendo, en su ¨¦poca de 16 bits, cuando ten¨ªa el dominio del mercado (con permiso de Sega y su Mega Drive), pensaba que esa clase de juegos de rol no encajar¨ªan con los gustos europeos. Ello motiv¨® situaciones absurdas, pues llegaban al mercado juegos sin ninguna calidad, mientras que las entregas de la cuarta a la sexta, se quedaban en tierras extranjeras.

Ni siquiera Nintendo Espa?a consigui¨® nada. Tan solo los juegos de rol similares a Zelda llegaban hasta aqu¨ª, tales como Terranigma o Ilusion of Time. Y no es que estuvieran mal, ni mucho menos (adem¨¢s de que ven¨ªan traducidos), pero Final Fantasy segu¨ªa sin ser descubierto, m¨¢s que por aquellos que recurr¨ªan a la importaci¨®n, y a sus desorbitados precios.

Pero claro, las dudas volv¨ªan a estar presentes: ?Lo traer¨ªa Nintendo? Desde luego en los tiempos que corren, todas las respuestas ten¨ªan que ser afirmativas, y desde luego que as¨ª fue. Con el paso del tiempo se confirm¨® no s¨®lo que llegar¨ªa hasta nuestras tiendas, sino que adem¨¢s vendr¨ªa en castellano.

Y desde luego, hay que agradecer mucho a Nintendo ambas cosas. Primero que nos traigan esta obra maestra de la que pasaremos a hablar a continuaci¨®n; y segundo que nos lo traigan en nuestro idioma, como debe ser. Que nadie se f¨ªe de las capturas que acompa?an el an¨¢lisis, pues est¨¢ realizado sobre la versi¨®n americana. El motivo es que Nintendo ha aprovechado al m¨¢ximo el tiempo, y la traducci¨®n al castellano apenas ha sido terminada poco antes de que el juego llegue a las tiendas.

Diferente en ciertas cosas, aunque no en todas. La historia y los personajes son diferentes, pero no el sistema de juego, que es pr¨¢cticamente id¨¦ntico. Aunque como no creo que haya mucha gente que pudiera probar el FF Tactics original, aqu¨ª se explicar¨¢ bien detallado como se juega a este nuevo t¨ªtulo de Square Enix.

Final Fantasy Tactics no es un juego como los dem¨¢s de la saga. Sigue siendo un juego de rol, pero es lo que se llama un Battle RPG. Este estilo de juegos de rol se caracteriza por incluir toda la diversi¨®n en los combates, que son puramente estrat¨¦gicos. La historia es narrada entre las batallas, y es completamente lineal.

Pero hay que a?adir algunas puntualizaciones. En primer lugar, algunas veces, durante los combates se producen eventos que cambian el curso del mismo, creando as¨ª historia en medio de la batalla. Adem¨¢s, en este t¨ªtulo, se ha querido potenciar la labor del jugador a la hora de escoger lo que quiere hacer, y de ese modo, el camino no es tan lineal como en otros t¨ªtulos del mismo g¨¦nero.

Tal y como se dijo antes, Final Fantasy Tactics Advance (en adelante FFTA para abreviar) se compone de dos tipos de juego: las batallas y los momentos intermedios. Estos momentos se producen casi siempre entre batalla y batalla, y simplemente hay que leer los textos que cuentan la historia.

Puede que s¨®lo haya que leer, pero los buenos libros no ofrecen mucho m¨¢s, y no por eso dejan de ser buenos. Aqu¨ª la historia es realmente sobrecogedora, y muy trabajada. Es realmente f¨¢cil dejarse llevar por ella a un mundo de fantas¨ªa donde se pueden pasar las horas sin darse cuenta.

Los combates, por otro lado, son la esencia del juego. Para hacer una comparaci¨®n sencilla, se podr¨ªa decir que se juega como el conocido Advance Wars (salvando las diferencias, claro est¨¢), o como el cl¨¢sico juego de mesa Warhammer.

Es decir: en la batalla se enfrentan dos bandos, cada uno con sus personajes. Cuando le llega el turno al jugador, ¨¦ste puede moverlos a todos sus dentro de los l¨ªmitesde cada uno, y realizar una acci¨®n, dentro de sus posibilidades. Cuando ha movido a todos, le pasa el turno a la IA del juego que mover¨¢ igualmente a los enemigos. Cuando haya acabado, le volver¨¢ a tocar al jugador, y as¨ª hasta que termine el combate.

Lo gracioso del asunto, es que en su mundo real existe un videojuego que se llama Final Fantasy, y que es exactamente id¨¦ntico al mundo fant¨¢stico al que van a parar. A partir de ah¨ª se ir¨¢ desarrollando la trama, que a buen seguro mantendr¨¢ enganchado a todo el que lo pruebe.

Totalmente sobresalientes. Hay muchos aspectos que merece la pena destacar en cuanto al apartado visual de FFTA, y en todos y cada uno de ellos sale ganando sobremanera. Lo primero que se debe hacer, es recomendar pasar por la galer¨ªa de im¨¢genes del juego, para que cada uno lo compruebe por s¨ª mismo.

Entrando en materia, hay que aclarar, aunque salte a la vista, que este es un juego realizado completamente en 2D. Los combates se realizan sobre un tablero tridimensional dividido en casillas imaginarias. Pero esto no es m¨¢s que una ilusi¨®n, pues el mencionado decorado no es m¨¢s que un dibujo en 2D con una sensaci¨®n de profundidad muy bien conseguida.

Pero que nadie se asuste. Vivan las 2D mientras vengan as¨ª. Los dibujos que adornan el juego, desde personajes a escenarios tienen tal cantidad de detalles que parecen estar vivos. Son una aut¨¦ntica delicia.

Los personajes, con un estilo muy ligeramente deformed (es decir, algo desproporcionados) que tanto gusta a los japoneses, quedan de maravilla en la pantalla port¨¢til de GBA. Todos ellos, amigos y enemigos gozan de un acabado de lujo, con dise?os diferentes seg¨²n el traje que lleven, y llenos de detalles.

La animaci¨®n no es tan buena como el dise?¨®, lo que no quiere decir que sea mala. Y en el fondo, a la hora de jugar, no importa en absoluto, pues este es un juego de estrategia, no de acci¨®n.

Los escenarios son realmente impresionantes. Algunos elementos incluso son m¨®viles, aunque como los personajes, tampoco tengan una gran animaci¨®n. Y por si eso fuera poco, est¨¢n llenos de detalles, desde el suelo, hasta los elementos decorativos, paredes, casas? todo est¨¢ tan cuidado que casi parece una pel¨ªcula de animaci¨®n.

A mayores, hay que mencionar las magias. ?stas est¨¢n realizadas con efectos de luces (sobre una imagen en 2D) realmente bien trabajados, y que dan un toque todav¨ªa m¨¢s impresionante a los combates.

A parte de los escenarios y personajes, hay otro tipo de elementos, que principalmente aparecen a la hora de narrar la historia: las im¨¢genes de los protagonistas en barra de texto. Cuando alguien habla, aparecer¨¢ un dibujo de esa persona; y hay que destacar que esos dibujos est¨¢n realmente bien cuidados, con una est¨¦tica manga muy apropiada y que encaja perfectamente con el juego.

Adem¨¢s, tambi¨¦n existen algunas pantallas de men¨²s, donde se puede configurar la formaci¨®n, elegir las profesiones, o ver el mapa a donde dirigirnos. Estas pantallas, aunque s¨ª son est¨¢ticas y algo m¨¢s fr¨ªas, consiguen bien su cometido, que es facilitar las cosas a la hora de configurar todos los par¨¢metros del juego y de nuestro equipo, que no son pocos.

La saga Final Fantasy siempre se ha caracterizado por ofrecer algunos de los mejores temas musicales de la historia de los videojuegos. La mayor¨ªa de ellos, han sido compuestos por el gran maestro Nobuo Uematsu.

En esta ocasi¨®n, el genio musical de Square no est¨¢ presente para componer la m¨²sica de este t¨ªtulo, pero eso no parece haber sido un problema para mantener el nivel de saga. Y es que FFTA tiene un nivel musical que ya quisieran para s¨ª otros t¨ªtulos, con unas composiciones ¨¦picas que podr¨ªan acompa?ar a cualquier gran pel¨ªcula.

Podr¨ªan, si no fuera por la limitada calidad con la que suenan. Y es que GBA no deja de ser una consola port¨¢til, con un sistema de sonido algo escaso en comparaci¨®n con otras consolas de sobremesa. Por ello, aunque estas melod¨ªas son realmente soberbias, suenan algo pobres. Una de cal y otra de arena, pero evidentemente no se puede tener todo, y los o¨ªdos que busquen la calidad en la composici¨®n por encima de todo, aqu¨ª encontrar¨¢n toda la que puedan asimilar.

Los efectos de sonido, al igual que la m¨²sica, suenan un poco pobres a causa del limitado sistema de sonido de GBA, pero ello no impide que haya un gran repertorio para todas las acciones que hay en el juego, que son bastantes y variadas.

Adem¨¢s, los chicos de Square Enix se las han ingeniado para aprovechar algunos sonidos de manera que queden bien a pesar de no sonar grandiosos. Por ejemplo, el sonido que se produce cuando dice algo, acompa?a los textos y produce una impresi¨®n de habla curiosa y agradable.

Los efectos de sonido que acompa?an al cursor cuando se navega por los men¨²s son igualmente buenos, y quedan muy bien. Por el contrario, los efectos de sonido en los combates no salen tan bien parados. El chasquido de espadas, magias y similares puede que parezcan un poco simples por el motivo ya comentado, y porque todos estamos demasiado acostumbrados a una calidad que aqu¨ª no puede ser mostrada.

De todos modos, teniendo en cuenta las posibilidades de GBA, hay que reconocer que el trabajo sonoro es excelente, y superarlo, es algo muy dif¨ªcil en una consola port¨¢til.

?Qu¨¦ se puede decir de un juego de la saga Final Fantasy? La jugabilidad y la diversi¨®n es algo que ya se presupone, porque si no, no saldr¨ªa al mercado con ese nombre. En esta ocasi¨®n, la diversi¨®n es tan alta como siempre, aunque el sistema de control y de juego es algo diferente.

Si alguien est¨¢ esperando un cl¨¢sico juego de Final Fantasy que se vaya olvidando, porque FFTA no es as¨ª. Aqu¨ª el juego, tal y como ya se ha dicho, se basa en las batallas, las cuales son algo diferentes de lo habitual, siendo la estrategia el punto principal de las mismas.

Antes ya se explic¨® un poco que el juego se divide principalmente en dos modos: el modo historia y el modo batalla. El modo historia consiste en ir descubriendo los entresijos del argumento que Square Enix ha preparado para el disfrute de todos aquellos que lo jueguen; y el modo batalla es la esencial del juego.

En las batallas, se enfrentan dos bandos por turnos. Generalmente, el primer turno recae sobre el jugador. Cuando esto sucede, podremos mover a cada uno de los personajes de nuestro bando. Cada personaje puede hacer dos cosas dentro del turno del jugador: desplazarse y actuar, y puede hacer la que quiera primero y luego la otra. Esto quiere decir que podremos acercarnos a un enemigo y golpearlo, o bien golpearlo (si est¨¢ a tiro) y luego intentar huir.

Cada personaje, a la hora de desplazarse, tiene un rango de casillas a las que puede ir. ?stas ser¨¢n m¨¢s o menos en funci¨®n de sus habilidades y de su profesi¨®n. Por ejemplo, un ladr¨®n podr¨¢ desplazarse m¨¢s casillas que un soldado. Adem¨¢s, a medida que vayan subiendo de nivel, sus cualidades ir¨¢n aumentando, incluida su posibilidad de desplazamiento.

Por otro lado, las acciones van desde atacar con el arma principal, hasta usar una habilidad secundaria. Atacar con el arma es especialmente ¨²til en el caso de soldados, arqueros o similares, mientras que los magos depender¨¢n de sus habilidades, sobre todo de las m¨¢gicas. Las habilidades, en cualquier caso, pueden cambiarse en el correspondiente men¨², teniendo cada profesi¨®n las suyas espec¨ªficas (aunque algunas ser¨¢n las mismas para varias profesiones).

Para aclararlo pondremos un ejemplo: s¨®lo un mago negro puede hacer hechizos de ataque, y s¨®lo un mago blanco puede hacer hechizos de curaci¨®n; mientras que todos los oficios dispondr¨¢n de la habilidad de usar objetos.

Cada personaje puede equiparse con varias habilidades, aunque solo podr¨¢ escoger una de cada g¨¦nero. Al principio de la partida, cada personaje apenas tendr¨¢ dos habilidades seleccionables, siendo una de ellas la de usar objetos. Pero a medida que avance la partida y los personajes ganen experiencia, ir¨¢n adquiriendo m¨¢s habilidades.

Por otro lado est¨¢ el tema de los oficios, de los cuales ya se ha comentado algo. En el juego hay muchos oficios: soldado, arquero, mago blanco o negro, ladr¨®n, monje? Cada oficio tiene sus caracter¨ªsticas, sus pros y sus contras,  y por supuesto, sus habilidades exclusivas. En cualquier momento, y desde el men¨² correspondiente, se puede cambiar la profesi¨®n de un personaje; pero hacerlo tiene el inconveniente de que se perder¨¢ toda la experiencia que tenga en el oficio que desarrollara hasta ese momento.

Las batallas no se limitar¨¢n simplemente a acabar con todos los enemigos, aunque ¨¦ste sea el objetivo m¨¢s com¨²n. En ocasiones habr¨¢ que hacer otras cosas, como proteger a alguien en particular, o llegar a un punto concreto del escenario. Las misiones ser¨¢n variadas a lo largo de la partida.

El juego en s¨ª, no es tan lineal como otros del mismo g¨¦nero. Al principio no se puede tomar ninguna decisi¨®n, pero al llegar a cierto momento del juego, seremos nosotros los que podremos escoger lo que deseamos hacer. Gracias a las tabernas que hay en los pueblos, podremos obtener informaci¨®n de las misiones disponibles, aunque habr¨¢ que pagar por esas informaciones. Cuanto m¨¢s cara sea la informaci¨®n, m¨¢s dif¨ªcil ser¨¢ la misi¨®n, y m¨¢s beneficios reportar¨¢ al concluirla.

Al final, casi todas las misiones est¨¢n entrelazadas con el curso de la historia, pero la sensaci¨®n de disfrutar de un poco de libertad es agradable. Adem¨¢s, hay que tener en cuenta algunas cosas, como que las misiones (casi todas) no se pueden cancelar y hay que cumplirlas antes de un plazo, por lo que no se pueden escoger a lo loco. Otra cosa a tener en cuenta es que a veces no conoceremos la ubicaci¨®n en el mapa donde se tiene que desarrollar la misi¨®n, por lo que no podremos ir a ese lugar a cumplirla de momento.

En cierto sentido, podr¨ªa decirse que este juego es como una partida de ajedrez a lo bestia, con infinidad de variantes que son muy importantes. Todo ha de ser tenido muy en cuenta antes de la batalla, desde llevar un equipo equilibrado, hasta escoger las habilidades m¨¢s ¨²tiles.

Despu¨¦s en las batallas, la inteligencia de cada uno decidir¨¢ la victoria o la derrota, y aunque al principio es sencillo ganar (incluso habr¨¢ una ayuda extra en la primera batalla), a medida que avance la partida se ir¨¢n complicando las cosas, obligando al jugador a exprimirse bastante las neuronas.

 c o n c l u s i ¨® n

FFTA es un juego pr¨¢cticamente obligado para cualquier poseedor de Game Boy Advance. Es divertido, es adictivo, requiere de inteligencia, se puede guardar la partida en cualquier momento (lo que facilita jugarlo en cualquier sitio), tiene un apartado gr¨¢fico de lujo, una m¨²sica de pel¨ªcula, una historia sobresaliente? si es que lo tiene todo.

Puede que haya alg¨²n jugador que no disfrute con los juegos de rol, o que no le guste la estrategia, o que sencillamente lo de pensar no sea lo suyo. En esos casos muy particulares, podr¨ªa ser conveniente probar antes este t¨ªtulo. Pero para el resto de los jugadores, sin ninguna duda, ¨¦ste es el juego que deben adquirir.

Gracias Square Enix, gracias Nintendo; y gracias a los dos por hacer las paces y celebrarlo con esta maravilla.