
Exit DS
Apolog¨ªa del escapismo
Mr.Esc regresa a la actualidad con un port de su primera aventura en el que el habilidoso h¨¦roe demuestra que a¨²n goza de la destreza suficiente para sorprendernos hasta en Nintendo DS. 100 niveles y mucha gente por rescatar nos aguardan en un divertido cartucho pensado para divertir a toda clase de p¨²blico.
Exit es uno de los mejores ejemplos de c¨®mo un juego sencillo es capaz de entretener hasta la saciedad, de la tremenda inventiva de la que es capaz el ser humano en cuanto a puzles y acertijos se refiere. Ya en su momento el juego se destap¨® como uno de los m¨¢s originales del cat¨¢logo de PSP, y fruto del ¨¦xito vio tambi¨¦n la luz en el Live! de Xbox 360 hace poco m¨¢s de un a?o, convirti¨¦ndose as¨ª en uno de los referentes del g¨¦nero desde que aterriz¨® en el mercado por primera vez en diciembre de 2005. La propuesta de Taito y del que m¨¢s tarde pasar¨ªa a ser conocido como Exit Team es tan simple como sencilla; manejar a un especialista de los rescates de riesgo a modo de puzle y con un aspecto t¨¦cnico propio de los c¨®mics que pululan por las estanter¨ªas de los quioscos.

No es de extra?ar que con el sistema de juego que maneja Exit, Taito haya cre¨ªdo una buena opci¨®n portar el juego a la port¨¢til de Nintendo DS, haciendo acopio de las virtudes de una consola en la que el juego se siente a sus anchas. Es lo que se ha dado por considerar un t¨ªtulo ?t¨ªpico NDS', de jugabilidad f¨¢cil, asequible para todos los p¨²blicos y con aspecto desenfadado. Es un hecho que visualmente nunca ha llamado la atenci¨®n, si bien el control de Mr.Esc y la interactuaci¨®n con el escenario que nos rodea es poco menos que imprescindible de cara a superar en el menor tiempo posible cada una de las fases de las que se compone el cartucho.

It is time to Escape
Mr.Esc representa a la figura del h¨¦roe por definici¨®n, es un habilidoso y enigm¨¢tico personaje que responde a la llamada de auxilio del cl¨¢sico inocente en apuros que se ve atrapado y sin escapatoria. Sus habilidades no han variado a lo largo de los dos a?os que han transcurrido desde que el Exit original llegase al mercado japon¨¦s, como tampoco el lugar en el que transcurren sus aventuras, principalmente edificios y habit¨¢culos de varias plantas en las que activar docenas de interruptores a medida que sorteamos los m¨¢s diversos obst¨¢culos.

Al igual que cualquier otro h¨¦roe, el trabajo de Mr.Esc se basa fundamentalmente en la atenci¨®n al p¨²blico, en rescatar a personas atrapadas que dominadas por el p¨¢nico carecen de las aptitudes necesarias para huir del edificio sin la ayuda de una tercera persona que los gu¨ªe y les muestre el camino hacia el umbral de la vida. Para ello no basta con asistirles desde la distancia, ya que muchos son incapaces de agarrarse a un saliente o de realizar saltos desde cierta altura. Por suerte, la ayuda es rec¨ªproca; nuestros compa?eros de aventuras son capaces de empujar bloques que Mr.Esc jam¨¢s podr¨ªa desplazar por s¨ª solo, e incluso de apagar un fuego o de abrir una puerta.

El mundo de Exit goza de una variedad y riqueza de matices suficiente para que jugar las 100 fases de las que se compone el cartucho no sea una experiencia aburrida y mon¨®tona, sino todo lo contrario. La peculiar aventura de Mr.Esc comienza un d¨ªa cualquiera en la hora del caf¨¦, cuando una llamada da lugar a la primera de tantas aventuras que volvemos a retomar en un port que respeta hasta el m¨¢s m¨ªnimo detalle el esp¨ªritu del Exit que conocimos hace unos a?os en PSP.

Un nuevo concepto de control
Desde la primera hasta la ¨²ltima pantalla, hay pocas diferencias entre Exit DS y sus hom¨®nimos. La m¨¢s llamativa e interesante para el jugador pasa por el modo en el que sus desarrolladores han adaptado el sistema de control, que en esta ocasi¨®n se ha centralizado en el stylus. Todas las acciones las realizamos a trav¨¦s de la pantalla t¨¢ctil, por lo que cada bandera o acci¨®n que solicitamos a Mr.Esc requiere un simple movimiento, sin necesidad de mover un cursor por el escenario. La c¨¢mara pasa a ser manejada a trav¨¦s de la cruceta de un modo r¨¢pido y muy pr¨¢ctico, sin la necesidad de pulsar ning¨²n otro bot¨®n de la consola salvo la L para ordenar varias acciones consecutivas a Mr.Esc.
Nuestro h¨¦roe es capaz de realizar una serie limitada de movimientos que consistes en saltar, descender por escaleras y cuerdas, empujar objetos, etc¨¦tera. Pero por encima de todo destaca su capacidad para dar ¨®rdenes, la potestad de manejar a los ?Compa?eros' -las personas atrapadas que rescatamos en los escenarios- de modo coordinado para afrontar los obst¨¢culos que salen a su paso. Poner en movimiento a Mr.Esc es tan sencillo como pulsar sobre su icono y seleccionar el destino que queramos que siga, exactamente igual que con los Compa?eros, m¨¢s restringidos en lo que a capacidad de acci¨®n respecta pero imprescindibles para salir victoriosos de los escenarios.

En este aspecto el port se mantiene fiel a sus or¨ªgenes, con la limitada Inteligencia Artificial de los personajes rescatados e incluso del propio Mr.Esc a la hora de interpretar determinadas acciones. Es uno de tantos otros posibles ejemplos de que el cartucho arrastra con los mismos h¨¢ndicaps de los originales, por lo que a veces es irremediable tener la sensaci¨®n de que los personajes no siempre responden como deber¨ªan a las acciones que les encomendamos. Se trata de un punto algo parad¨®jico en relaci¨®n a la cantidad de tipos de personajes que tenemos que rescatar, cada uno con sus virtudes y sus taras. La colaboraci¨®n entre varios personajes es esencial para triunfar, y forma parte tambi¨¦n del complejo rompecabezas que representa solventar determinados escenarios.

El precio del port
Siendo la mec¨¢nica pr¨¢cticamente la misma, las novedades de Exit DS pasan por los 50 nuevos escenarios que se han a?adido en exclusiva para esta versi¨®n, a los que s¨®lo podremos acceder a medida que vayamos completamente con ¨¦xito las distintas fases de las que se compone el juego, y sobre todo al cambio gr¨¢fico respecto a las versiones de PSP y 360. Seiji Kawakami, uno de los creadores del juego y supervisor de esta edici¨®n, declaraba recientemente que nunca fue intenci¨®n de Taito cambiar el aspecto gr¨¢fico del juego no adaptarlo dr¨¢sticamente a la port¨¢til, sino m¨¢s bien retocarlo en funci¨®n de la capacidad de la consola.

Los personajes toman un dise?o ligeramente ?superdeformed', son algo m¨¢s peque?os, en la l¨ªnea de los escenarios. En general el juego es menos vistoso en que anteriores ocasiones, y pese a contar con un variado abanico de coloridos fondos y de efectos espor¨¢dicos como el del fuego o del agua, es m¨¢s que evidente que en este sentido el cartucho muestra un aspecto un paso por debajo de sus hom¨®nimos. Para contrastas este efecto negativo se ha colocado un mapa permanente en la pantalla superior de la consola que nos permite poder orientarnos algo mejor en los escenarios.


Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.