Driver: San Francisco
Cambio de volante
Ahora s赤. Tanner vuelve a ponerse al volante para recuperar sus abandonadas esencia y posici車n de liderazgo en la conducci車n de persecuciones urbanas. Driver San Francisco es la mejor entrega tras las dos primeras, una obra entretenida firmada por el equipo tradicional de Reflections.
Dos tropiezos acabaron siendo los dos desali?ados acercamientos de la saga Driver a la mec芍nica de Grand Theft Auto, mezcla de acci車n en tercera persona, sandbox y conducci車n con cambios de coche. A cargo entonces de Atari, Driv3r y Parallel Lines intentaron buscar un hueco en la pasada generaci車n en este terreno, dejando atr芍s su mec芍nica central de persecuciones y huidas m芍s fren谷ticas y de IA enemiga asombrosa. Cuando Reflections Interactve, ya bajo el sello de Ubisoft, anunci車 este nuevo Driver San Francisco, no fueron pocos los que auguraron un nuevo juego solo correcto, entretenido pero que no lograr赤a en ning迆n momento la notable calidad de los primeros. Adem芍s, poco despu谷s de mostrarse ingame no le tard車 en caer una avalancha de cr赤ticas, especialmente centradas en un nuevo sistema que nos permit赤a cambiar de coche sobrevolando toda la ciudad y escogiendo cualquier autom車vil libremente. ?Qu谷 estaba pasando con Driver, qu谷 loca y arriesgada idea hab赤an tenido ahora sus creadores? Cuando se ense?車 hace un a?o, Driver SF no ten赤a buena pinta?
Ahora que el juego ha llegado a las tiendas y hemos podido analizarlo con pausa y al completo, no cabemos en nuestro asombro de la notable propuesta, innovadora y entretenid赤sima, que han logrado sus creadores en un juego m芍s que correcto, grande, cuidado y, lo mejor de todo, que recuerda en cada volantazo a los dos primeros Driver de PlayStation, aquellos de los que todo el mundo hablaba en su d赤a y marcaron bastante a otros tantos t赤tulos. Driver San Francisco deja atr芍s el err車neo camino que llevaban sus dos anteriores y reencauza la saga hasta tal punto que, sin duda, ha logrado ser una de las primeras sorpresas de este oto?o. Con alguna que otra lamentable deficiencia que no le termina de dejar brillar como podr赤a haberlo hecho, lo nuevo de Reflections s赤 que es un ejemplo a seguir en cuanto a entrega recuperadora de la identidad de su saga, sin entrar en discusiones de si esta mec芍nica funciona a迆n como anta?o o no. Que, por desgracia para los que no nos olvidamos de los primeros juegos, no lo hace. Las persecuciones ya no divierten tanto.
Para que siga funcionando medianamente bien, Driver SF incorpora todas las exigencias que cabr赤a pedir a un producto de hoy, como uno de los modos multijugador online m芍s extensos y variados que hemos visto en ning迆n t赤tulo de conducci車n arcade, as赤 como algunos extras, modo Director de Cine y m芍s de 25 horas de juego en solitario si queremos lograr todos los coches y mejoras. La ciudad que sirve de mapa abierto donde acercarnos a los puntos que arrancan unas y otras misiones es inmensa, con una ambientaci車n fant芍stica y elementos y zonas bien diferenciadas. Todos los coches y hasta las canciones de la banda sonora son de nombres propios reales, lo que otorga mayor verosimilitud y un aspecto muy serio al juego, que demuestra el valor de superproducci車n que trae consigo. Es un Driver hecho con mimo y ambici車n.
Junto al regreso de la jugabilidad tradicional aderezada de important赤simas y eficaces innovaciones, otra recuperaci車n esencial era la de los personajes, John Tanner -el poli bueno y entregado al que encarnaremos- y el amenazante Charles Jericho, quienes ahora tendr芍n m芍s carisma que nunca y protagonizan una historia enfrentada bien expuesta. Pese a que con el mando en las manos no bajaremos de los coches, las cinem芍ticas del juego, los di芍logos y los objetivos de las misiones nos ir芍n narrando esta especie de serie televisiva de polic赤as y ladrones, dividida en 16 actos centrales pero aderezada de m芍s de 170 objetivos secundarios, muchos de ellos de obligada ejecuci車n. Driver San Francisco presenta un esquema muy funcional, que desbloquea la trama principal a base de conseguir puntos en la ampl赤sima oferta de tareas secundarias, que argumentalmente tambi谷n apoyan al hilo central y posibilitan el acceso a m芍s y m芍s contenido.
La San Francisco abierta de Tanner
El esquema central del juego nos coloca en una fielmente recreada San Francisco, enorme y bulliciosa, llena de tr芍fico, variedad de calles, veh赤culos, tiendas? pero no tan cre赤ble como otras urbes vistas en otros juegos. Aunque a medida que avancemos iremos abriendo nuevas zonas, la ciudad al completo es colosal, casi tanto como la Nueva York de GTA IV, por poner un ejemplo. Tanner circula con su camarada Jones al principio de la aventura cuando reciben el aviso de que Charles Jericho, ese robusto y temible delincuente icono de la saga, ha vuelto a escaparse. El fugado logra causar un estrepitoso accidente que acaba con la consciencia de nuestro protagonista, que queda en coma y r芍pidamente ingresado. Sin dejar clara si ha habido una recuperaci車n total o no, el t赤tulo nos vuelve a poner en las calles, con John Tanner completamente enfadado y obsesionado con encerrar de nuevo a su archienemigo. Incansable, el polic赤a partir芍 de un mapa conceptual que ir芍 creando y conectando entre sus partes poco a poco, con m芍s personajes que le pueden llevar hasta Jericho entrando en escena y un descubrimiento que lo deja tan perplejo como al jugador cuando se le presenta: el Shift.
Como si de un poder sobrenatural se tratase, Tanner en Driver San Francisco tiene la capacidad de introducirse en la mente y cuerpo de pr芍cticamente cualquier conductor de la ciudad, una locura. Su compa?ero acabar芍 crey谷ndolo cuando llevemos a cabo una de las primeras denominadas Misiones de Tanner, basada en demostrarle este fen車meno paranormal que iremos dominando cada vez m芍s. Esto, en t谷rminos jugables, abre un abanico hasta ahora nunca explorado en otros juegos, ya que llegar芍 a poner toda la ciudad a nuestros pies para que desde la mente del personaje podamos meternos en la piel de quien queramos, conduciendo su coche, cami車n o todoterreno y ayudando as赤 a la poblaci車n mientras nos acercamos m芍s a nuestro criminal. Los cambios se pueden producir en pr芍cticamente cualquier momento, lo que nos permite facilitar persecuciones, boicotear secuestros, llevar ambulancias y camiones de bomberos, provocar polic赤as para seguidamente introducirnos en ellos, conducir simult芍neamente veh赤culos en diversos puntos de la ciudad para mantener a raya a varios delincuentes estando en dos sitios casi a la vez, participar en carreras clandestinas, frenarlas, desactivar bombas, hacer de taxista? Son much赤simas las posibilidades y este Driver, sin abandonar la esencia que decimos que retoma, expone todas las que nos imaginamos y varias decenas m芍s. Totalmente sorprendente en este sentido.
Un gran poder desde un bot車n
Driver San Francisco es un juego r芍pido, para nada interrumpido por el uso del Shift, bastante frecuente en la mayor赤a de las misiones. El juego nos ense?a y mejora poco a poco este poder aunque su mec芍nica base consiste en pulsar el bot車n X accediendo as赤 a una vista cenital de la ciudad desde diversas distancias, mover con el joystick el plano, y volver a pulsar X sobre el coche en el que queramos introducirnos, pudiendo comprobar antes sus caracter赤sticas b芍sicas, como velocidad y fuerza. Eso s赤, obviamente y para no romper la jugabilidad, nunca nos podremos meter en un adversario que nos persigue o al que perseguimos. Mientras permanecemos en este letargo de salto de un coche a otro, la vida de San Francisco no se detiene por completo, sino que se ralentiza, como si fuera en 'tiempo bala', por lo que a veces tendremos que elegir autom車vil r芍pido. Nada de tiempos de carga o transiciones. Toda la ciudad bajo nuestro poder para teletransportarnos de forma instant芍nea y seguir con las fren谷ticas persecuciones, carreras y diversos objetivos.
A medida que avancemos, tendremos m芍s ciudad disponible y diversas t谷cnicas de salto de veh赤culos. Pronto aprendemos, por ejemplo, que con el gatillo secundario derecho (R1 en un DualShock 3) podremos cambiarnos a un autom車vil de la misma categor赤a cercano, un compa?ero polic赤a en las misiones de persecuci車n, el caso m芍s habitual. As赤, cuando varios coches-patrulla sigan a un delincuente a toda velocidad, si 谷ste cambia de calle o nos estrellamos por el intenso tr芍fico en contra, podremos pulsar este bot車n r芍pido y cambiar al veh赤culo disponible mejor posicionado. Esto permite hacer estrategias conjuntas con varios coches y camiones, con una ambulancia que dejemos atravesada en la carretera o una rampa concreta. La mec芍nica es bastante fren谷tica, y el Shift no hace m芍s que intensificar ese frenetismo, curiosamente.
'?R芍pido, por esa calle!'
Todo el juego fluye rapid赤simo, las misiones ponen cada coche al m芍ximo y nuestra pericia al volante debe ser demostrada, sobre todo en los momentos de tr芍fico en contra o cuando tenemos que despistar a la polic赤a en objetivos que lo requieren. En esto recuerda, por supuesto, a Burnout ya que tambi谷n incluye algunos puntitos arcade, como una barra de turbo que podremos ir mejorando o una habilidad de embestida, compartiendo nivel con la barra de turbo, denominada aqu赤 'Barra de Habilidad' y que con los puntos de experiencia -aqu赤 llamados Voluntad- tendremos que ampliar. El manejo es totalmente sencillo, sin realismo pero divertido y directo, con poco peso para la mayor赤a de los veh赤culos para que salten y derrapen con facilidad. Todo el juego busca el espect芍culo, quiz芍 en exceso, desde que seleccionamos una misi車n posicion芍ndonos en el coche concreto hasta que la vamos llevando a cabo, siempre bien explicada y con indicaciones en el mapa superior, desplegable con uno de los botones del pad, otra idea magn赤fica y vital en este t赤tulo con una jugabilidad que nos exigir芍 mirar el mapa muchas veces para buscar la ruta m芍s r芍pida hasta el objetivo.
Explorar San Francisco desde la vista de p芍jaro nos llevar芍 tambi谷n a talleres, puntos de arranque de carreras, comisar赤as u hospitales, donde suele haber misiones secundarias esperando a que las cumplamos para ganar Voluntad y desbloquear m芍s misiones de Tanner, levemente relacionadas y las que gu赤an el argumento central plenamente. Tambi谷n tendremos los retos, divertidos desaf赤os r芍pidos que nos pedir芍n un n迆mero de derrapes en u tiempo l赤mite, alcanzar una velocidad determinada o unos metros de salto en el vac赤o concretos aprovechando cualquiera de las vertiginosas cuestas de San Francisco o incluso las gr迆as del muelle. Los garajes son vitales para los que quieran coleccionar b車lidos y mejorarlos en manejo, aceleraci車n o habilidad de embiste y turbo. Al poderse destruir los coches, ser芍 importante tambi谷n repararlos y avanzar a trav谷s de los diversos modelos que nos ofrece el juego, m芍s de 120, todos ellos licenciados.
Pero pese a todo, a Driver San Francisco se le echan de menos algunos extras y una trama principal m芍s larga en su modo para un jugador, pues si nos centramos en ella, no llegaremos a las 9 o 10 horas de juego. Su argumento no destaca especialmente y recuerda, como dec赤amos, al de las series norteamericanas de televisi車n de los 70, con giros medianamente predecibles y personajes clich谷. Eso s赤, toda la ambientaci車n es sublime y esta San Francisco mezcladora de 谷pocas funciona como marco sensacional, pues incluye veh赤culos de las 迆ltimas cuatro d谷cadas, entre ellos grandes leyendas, y tambi谷n emisoras de radio con temas de todos los tiempos y estilos. Disco de Jamiroquai hasta electro de The Prodigy o agrupaciones m赤ticas como, The Black Keys, Queens of the Stone Age, Beastie Boys, The Cure, Aretha Franklin? Una gozada musical que podremos sintonizar en todo momento a nuestro gusto.
El sentido del humor no falta en esta nueva obra de Reflections aunque es relativamente b芍sico. Los cambios de Tanner de un coche a otro har芍n que los copilotos, casi siempre charlando, no se percaten de la suplantaci車n de identidad y se sorprendan de nuestras haza?as al volante, la locura de conducci車n que gusta al protagonista o los comentarios de 谷ste. Se crean varias situaciones muy ingeniosas y el doblaje m芍s que adecuado que se ha impuesto al t赤tulo en castellano nos ha brindado grandes momentazos. Por supuesto, al volver a nuestro cuerpo junto a Jones, 谷ste no tardar芍 en bromear sobre si hemos estado dentro del cuerpo de una chica sensual o si tenemos m芍s informaci車n de traspasos de drogas. Hay un tono general desenfadado en el juego que quiz芍 hubiera sido conveniente rebajar, pero este aspecto tambi谷n le da m芍s variedad en las situaciones y lenguaje, y un toque referencial a las series de televisi車n. La locura que parece atormentar a Tanner, que hasta ve en las vallas publicitarias mensajes hacia 谷l, enreda un poco m芍s un argumento que de por s赤 tampoco es ninguna obra maestra aunque logra comportarse como cabr赤a esperar.
La inmensidad de la ciudad y la velocidad de todo el juego hac赤a imprescindible sacrificar ciertos aspectos gr芍ficos, ya lo dijeron sus desarrolladores al presentarlo y ante las primeras cr赤ticas en este sentido. A estables 60 fotogramas por segundo, Driver San Francisco no presenta el nivel de detalle, brillos y texturas que GTA IV, por ejemplo, ni por supuesto que otras obras de escenarios m芍s reducidos. Sin embargo, hay que contemplar su conjunto para valorar su apartado t谷cnico, que tampoco es ning迆n despunte. Las animaciones de los personajes principales est芍n bastante cuidadas en las animaciones pero no tanto en los v赤deos ingame, lo que se nota tambi谷n en los habitantes an車nimos que deambulan por la ciudad, u otros elementos animados que no infunden demasiado fotorrealismo, como el agua o los p芍jaros. Y sobre los reflejos y juegos de luces, las carrocer赤as brillan como deber赤an pero alcanzan ni de lejos los niveles de Forza 4, Gran Turismo 5 o F1 2011, claros abanderados en esto.
Lo importante en Driver, a lo que se homenajea, es a los coches, y su modelado no est芍 nada mal teniendo en cuenta la gran cantidad de 谷stos que hay en todas las calles de la ciudad. Todos ellos destructibles, aunque siempre ser芍n menos da?ados los que manejemos en cada momento que el resto pilotados por la CPU, su identidad visual es absoluta, siendo reconocibles todos los modelos. Esto no se transfiere al manejo, bastante arcade y b芍sico y que no distingue en exceso unos autom車viles de otros, aunque obviamente no es lo mismo manejar un autob迆s o un cami車n cisterna que un 4x4 o un deportivo descapotable. Pero no hay un trabajo de f赤sicas muy exquisito en este sentido, todo se rinde en pos del espect芍culo y la diversi車n directa, sin simulaci車n por ning迆n lado, lo que se agradece en una jugabilidad as赤. Cada coche, de diversas marcas completamente conocidas como Ford, Audi o Chrevrolet, tiene no obstante sus propias caracter赤sticas y mejoras. La ciudad, por su parte, es f芍cilmente destruible, con todos sus elementos salvo los edificios muy poco pesados.
La Inteligencia Artificial s赤 llama la atenci車n por s赤 misma. El comportamiento de nuestros aliados, indiferentes y enemigos en las misiones es asombroso. En las carreras, los rivales intentar芍n empotrarnos contra una fachada u otros coches en cada cruce. Las persecuciones son bastante exigentes ya que la polic赤a no se pierde f芍cilmente y, en el caso contrario, los perseguidos son bastante r芍pidos y embestirlos requiere hacerlo justo en los momentos oportunos. No obstante, como se?al芍bamos antes, no es un juego dif赤cil, el Shift al fin y al cabo es una ayuda en este tipo de objetivos, pudi谷ndonos poner en un coche que venga en direcci車n contraria, por ejemplo, y chocando de frente contra nuestro fugitivo determinado. A una IA poderosa como 谷sta se le saca su mejor partido en los retos secundarios y el modo multijugador, que pasamos a comentar ahora.
Driver entre varios
A pantalla dividida con otro amigo u online con otros siete jugadores, Driver San Francisco es uno de los t赤tulos m芍s variados y divertidos de conducci車n arcade que existe hoy. Sus casi 20 modos de juego cooperativo y competitivo son un mero ejercicio de entretenimiento porque s赤, sin hacer partidas demasiado largas ni profundas. Esto es un todos contra todos o por equipos en diversas mec芍nicas. Aunque eso s赤, podremos ir mejorando y ganar experiencia para acceder a m芍s coches y ventajas concretas. Carreras b芍sicas, destrucci車n, competici車n de salto, derrape y choque, capturar la bandera y llevarla a nuestra zona de la ciudad, persecuciones conjuntas para ver qui谷n se acerca m芍s al objetivo durante m芍s tiempo, huidas de la polic赤a, modo Polic赤as y Ladrones con cambio de bando para todos los jugadores, paseo libre por San Francisco?. 19 modalidades en concreto para prolongar bastante m芍s la experiencia de juego en solitario.
Y si por si todo esto pareciera poco, este quinto Driver adem芍s de estrenar y a lo grande su faceta online, incorpora tambi谷n un modo Director de Cine, donde podremos editar v赤deos con nuestros 迆ltimos minutos de partida, en cualquier momento, y adem芍s -otra grata sorpresa- compartirlos con toda la comunidad e jugadores. Driver Club es la comunidad online que han confeccionado sus desarrolladores para que todos los usuarios puedan sincronizarla con Facebook y Twitter, y comparar estad赤sticas, tiempos, estado de los veh赤culos? Por supuesto, tambi谷n se podr芍n subir a este servicio los v赤deos editados con la modalidad Director de Cine o repeticiones de las mejores haza?as. Parece ser que esta moda de las comunidades online est芍 calando hondo, tambi谷n porque sirve para reactivar los Online Pass -aqu赤 llamado UPlay- y Driver San Francisco la ha implementado verdaderamente bien. Funcionar芍 y mantendr芍 con vida el juego bastantes meses.
Conclusiones
Tras Driv3r, Parallel Lines y Driver 76 de PSP, sinceramente no esper芍bamos que Reflections supiera realzar una de sus licencias fetiche hasta este notable nivel. Driver San Francisco se encuentra con que su mec芍nica base de persecuciones sin m芍s se ha quedado algo anticuada y para ello remodela por completo la jugabilidad introduci谷ndole el Shift, uno de los elementos m芍s frescos que hemos visto en los juegos de conducci車n del 迆ltimo lustro. Adem芍s, para hacerse menos repetitivo y arcaico, esta quinta entrega de sobremesa se adapta a todas las exigencias de variedad y multijugador de un t赤tulo de calidad de hoy, con hasta su comunidad Driver Club correctamente integrada con las redes sociales y decenas de herramientas que har芍n a los m芍s picados no querer despegarse de ella en meses, sobre todo porque la trama principal se queda en una dificultad algo suave y no incita a la rejugabilidad.
Tanner ha vuelto muy bien, con una nueva historia que se comporta, un apartado sonoro excepcional y jugabilidad directa de las que hacen que no notemos el tiempo que llevamos jugando y poco a poco van regalando al jugador m芍s libertad y amplitud, incentivando las exigencias de 谷ste al querer desbloquear todo, obtener todos los puntos de Voluntad y los m芍s de 120 coches disponibles, con todas sus mejoras aunque poca diferenciaci車n en los comportamientos. Fren谷tico y avispado en cuanto a saber con qu谷 mec芍nica arriesgar, Driver San Francisco es una de las primeras sorpresas agradables que nos depara este 迆ltimo cuatrimestre, cargad赤simo de Triples A que no le dejar芍n brillar como quiz芍 deber赤a. Una apuesta sobre seguro para los que a迆n recuerden con nostalgia los primeros dos sobresalientes juegos de PSX y crean que su mec芍nica puede funcionar hoy en d赤a. Un lavado de cara necesario que finalmente ha logrado resultados bastante mejores de lo que todo el mundo esperaba.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr赤an haberlo llevado a cotas m芍s altas. C車mpralo sin miedo.