Deep Sky Derelicts, an¨¢lisis

La escultura m¨¢s conocida y visitada del Museo del Prado es el Grupo de San Ildefonso. Este conjunto es una obra que se remonta al siglo I d.C., y est¨¢ formada por dos personajes que celebran un rito religioso mientras uno le echa el brazo por encima de los hombros al otro. Esta creaci¨®n de una belleza inusitada y una gran popularidad en el presente, est¨¢ formada por dos esculturas con origen independiente que son copias de obras m¨¢s antiguas, el Dor¨ªforo de Policletes y el Apolo Saur¨®ctono de Praxiteles. Y para rizar a¨²n m¨¢s el rizo, el pedestal es un a?adido posterior basado en una obra de siglo IV a.C., y uno de los bustos es un a?adido posterior, moderno. Sin embargo esta apropiaci¨®n, reutilizaci¨®n y combinaci¨®n de elementos forma hoy un todo que es admirado y entendido como una pieza ¨²nica con sentido en s¨ª mismo.

Deep Sky Derelicts realiza un acto semejante de apropiaci¨®n y reutilizaci¨®n. Basa sus cimientos en el esqueleto de Darkest Dungeon (2016). La base del t¨ªtulo es la exploraci¨®n de naves perdidas en el espacio profundo en busca de la m¨ªtica nave nodriza. El jugador deber¨¢ gestionar un equipo de tres personajes protagonistas que puede ampliarse a medida que avanza en la trama de la partida. Cada uno de estos tendr¨¢ una serie de habilidades y equipo concreto que le ayudar¨¢ a desempe?ar mejor, o peor, su papel. Para gestionar el equipo, el inventario, las misiones secundarias (basadas en la b¨²squeda y recolecci¨®n), las investigaciones y la compra y venta de materiales dispondremos de un lugar, una base espacial, muy similar al pueblo del t¨ªtulo de Red Hook Studios.

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Sobre el esqueleto del dise?o de juego de Darkest Dungeon el equipo fin¨¦s Snowhound introduce elementos reapropiados de otros t¨ªtulos como Buscaminas (1989) para marcar una diferencia con respecto al primero. La exploraci¨®n de las naves se realizar¨¢ mediante casillas individuales donde no habr¨¢ caminos lineales, como ocurr¨ªa en el t¨ªtulo de Red Hook Studios, sino que deberemos explorar casilla a casilla todas las naves para explorarlas en su totalidad y encontrar en ellas aquello que estamos buscando, la nave nodriza que llev¨® a la humanidad fuera de la Tierra.

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Encima de esta estructura b¨¢sica, Darkest Dungeon y Buscaminas, Deep Sky Derelicts sit¨²a el combate, n¨²cleo del dise?o del juego. Para desarrollar esta faceta del videojuego los integrantes de Snowhound miran alrededor y se fijan en tres t¨ªtulos, el propio Darkest Dungeon, turnos, efectos, armas, combates exigentes, aleatoriedad, etc., The Banner Saga (2014) con la divisi¨®n de la salud de los integrantes del equipo y los enemigos en puntos de vida, rojo, y escudo, azul, que van deterior¨¢ndose de acuerdo al da?o recibido y los ataques especiales y, por ¨²ltimo, para marcar una diferenciaci¨®n m¨¢s clara con respecto a sus modelos, los juegos de cartas. Y este punto es el problem¨¢tico porque arroja al juego al absurdo.

En cada uno de los turnos el jugador dispondr¨¢ de una serie de cartas de acuerdo a dos elementos, sus habilidades innatas y sus habilidades adquiridas mediante la recolecci¨®n de recursos. Todas ellas guardan dos finalidades, ofensivas o defensivas. El problema se genera cuando, durante varios turnos, tan solo tienes cartas de cierto tipo. Para ejemplificar mejor este problema vamos a ilustrarlo con un ejemplo. Nuestro equipo se ha encontrado, en una casilla ya explorada, un conjunto de roedores malignos. Tras mucho sufrir y perder a dos integrantes del equipo el superviviente se enfrenta a dos roedores con muchas probabilidades de morir pero el destino y el azar interfieren. Durante cuatro turnos seguidos la ¨²nica acci¨®n que podemos tomar es ?reiniciar? el estado del personaje, es decir, eliminar cualquier efecto, positivo o negativo, que haya reca¨ªdo sobre el avatar restante. Obviamente las ratas espaciales aprovechan la oportunidad y atacan, con habilidades ofensivas, una y otra vez hasta que acaban con la vida del ¨²nico superviviente. Esta situaci¨®n se repite m¨¢s veces de las deseables y consigue que los combates acaben por desesperar ya que la habilidad y la estrategia se arrojan en el altar de la aleatoriedad.

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Para envolver y cohesionar todas las partes de este monstruo de Frankestein Snowhound ha recurrido a una ambientaci¨®n reapropiada de Warhammer: 40.000 (1987) donde la ciencia ficci¨®n de car¨¢cter barroco y un neofeudalismo se dan la mano para crear, quiz¨¢s, el mejor apartado del t¨ªtulo, su est¨¦tica. Con un dise?o extra¨ªdo del c¨®mic (cada ataque se representa dentro de una vi?eta junto a onomatopeyas y frases cortas) y un dibujo muy similar al de Mike Mignola y Guy Davis han sabido construir un universo que se mantiene por s¨ª mismo.

Deep Sky Derelicts no es el Grupo de San Ildefonso. Sus partes, aunque han logrado brillar por separado en t¨ªtulos independientes, al unirlas no consiguen crear un conjunto pulido que tenga sentido gracias a la suma de todos sus elementos. La reapropiaci¨®n de decisiones de dise?o de otros videojuegos lograr¨¢ atrapar a todos los aficionados al rol y la estrategia t¨¢ctica m¨¢s exigente unida a la ciencia ficci¨®n, pero sin embargo el trabajo de Snowhound, por falta de ambici¨®n, no podr¨¢ aspirar al trono de los soberanos de esta categor¨ªa.