Deep Rock Galactic
- PlataformaPC8.5XBO8.5PS4
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorGhost Ship Games
- Lanzamiento13/05/2020 (PC, XBO)04/01/2022 (PS4)
- TextoEspa?ol
- VocesIngl¨¦s
- EditorCoffee Stain Studios
Deep Rock Galactic, an¨¢lisis para PC
Deep Rock Galactic es un shooter cooperativo para hasta cuatro jugadores en el que encarnamos a un grupo de enanos y nos aventuramos en el planeta Hoxxas.
Una cerveza para saciar la sed. Una buena conversaci¨®n para aliviar el alma. Charlar del teletrabajo, de nuestros esfuerzos por imitar a Patry Jordan y de la familia a la que hace tanto que no vemos. Re¨ªr en compa?¨ªa y olvidarnos de la rutina y el tedio del confinamiento. Casi toda Espa?a lleva unos d¨ªas, incluso semanas, recuperando cierta normalidad y viviendo escenas como esas en la cafeter¨ªa del barrio. Sin embargo, todav¨ªa hay personas que no han catado ese grado de libertad por la incidencia de la covid-19. Para muchos, e incluso para todos hasta hace escasos d¨ªas, el escenario de socializaci¨®n no est¨¢ en el bar, sino en el sof¨¢. A los mandos.
No son pocos quienes han encontrado consuelo en sus ordenadores, consolas y m¨®viles durante las semanas m¨¢s duras del aislamiento. La tecnolog¨ªa ha facilitado el acceso a la cultura, el ocio y, a¨²n m¨¢s importante, al contacto con otros. En particular, los videojuegos han acaparado el protagonismo que anta?o compart¨ªan con la ca?a de los viernes y el futbito de los s¨¢bados y se han erigido en el entretenimiento social por excelencia. Desde los paseos relajantes en Animal Crossing hasta la exploraci¨®n infinita de Minecraft, pasando por los atracos de GTA V. A veces ni siquiera jugando nosotros mismos, sino viendo c¨®mo lo hacen otros y comentando sus aventuras junto a otros espectadores. Cuando salir a la calle no ha sido posible, los videojuegos han reducido la distancia a un solo bot¨®n.
Quiz¨¢ para ti, querido lector, todo esto ya formara parte de tu vida. Las noches de Halo, World of Warcraft, Destiny y similares son inherentes a nuestro medio. Las sesiones de Twitch, aunque m¨¢s recientes, tambi¨¦n. Eso s¨ª, muchos han descubierto el potencial de la ludoficci¨®n para conectarnos a lo largo de esta cuarentena. Por eso creemos que el videojuego social, aunque lleva d¨¦cadas existiendo, saldr¨¢ reforzado del letargo y vivir¨¢ una nueva ¨¦poca dorada en los pr¨®ximos a?os. Y obras como Deep Rock Galactic lo tienen todo para liderarla.
Soy minero (espacial)
Deep Rock Galactic es un shooter cooperativo con enanos espaciales y cerveza de otro universo ¡ªliteralmente¡ª en el que completar misiones de todo tipo para llenarnos los bolsillos. En la obra de Ghost Ship Games somos unos mercenarios de la miner¨ªa y nos ganamos la vida con incursiones en las profundidades del planeta Hoxxas. No lo hacemos por las aventuras ni los descubrimientos, sino por los garbanzos. A nuestra empresa, como a nosotros, tan solo nos importa llevarnos algo de comer a la boca y perder la menor cantidad de dinero posible en el intento. Tanto es as¨ª que en una de las misiones se nos encarga recuperar el equipamiento de una expedici¨®n que pereci¨® en el intento. Las vidas son prescindibles. La plata, no.
El humor de Deep Rock Galactic funciona muy bien y contribuye a construir un universo cre¨ªble, una di¨¦gesis con la que empatizar y en la que resulta f¨¢cil integrarse. Como para las empresas somos un d¨ªgito ¡ª?en qu¨¦ se habr¨¢ inspirado el estudio?¡ª, nuestros iguales son los compa?eros de equipo. Son ellos con quienes compartimos estatus, objetivos y misiones. No solo estamos solos contra las hordas de enemigos y los inh¨®spitos rincones que nos aguardan, sino tambi¨¦n contra el sistema. Y en tanto que cooperar es la ¨²nica forma de sobrevivir, mejor hacerlo entre iguales.
Con esta l¨®gica, Ghost Ship Games resalta la importancia del trabajo en equipo ya desde la premisa del juego. Se trata de un engranaje en el que todo contribuye a sentirse parte de un todo m¨¢s grande, a compartir los ¨¦xitos y a brindar con enormes jarras de cerveza espacial en alguna taberna perdida en un asteroide. As¨ª todo es m¨¢s f¨¢cil cuando llega el momento de asumir roles, repartir tareas y jugarse el pellejo por el resto. Pensamos en plural antes de arrancar la misi¨®n y eso influye mucho, much¨ªsimo, en su ¨¦xito. Y una vez empieza, las mec¨¢nicas reafirman lo esencial de la colaboraci¨®n.
Colaborar es ganar
Echar un cable al pr¨®jimo es esencial en Deep Rock Galactic. Sobre todo, porque en las profundidades de Hoxxas no se ve un pimiento. Cierto es que contamos con una l¨¢mpara frontal, pero esta apenas ilumina lo que tenemos justo delante y de poco o nada sirve para prevenir ataques. El mapa de cada misi¨®n se dibuja mejor entre todos, informando al compa?ero sobre qu¨¦ hay all¨¢ donde ¨¦l no puede ver. Disponemos de bengalas, s¨ª, pero son limitadas y su uso debe optimizarse al m¨¢ximo. Necesitaremos ver bien cuando empiecen a llegar las hordas de monstruos a los que nuestros aires de Dora la exploradora no les convencen tanto.
En estos hoyos abismales habitan insectoides de todo tipo y condici¨®n. Los hay r¨¢pidos, lentos, grandes, peque?os... El para¨ªso de los entom¨®fobos, vaya. Atacan en hordas heterog¨¦neas, con m¨¢s de un tipo de enemigo en ellas, por lo que la coordinaci¨®n entre los miembros de la expedici¨®n es b¨¢sica. El combate es emocionante y diverso, ya que cada uno de los enanos desempe?a una de las cuatro clases existentes, lo que les concede una movilidad y un combate ¨²nicos.
Los ingenieros pueden construir plataformas escalables para trepar por las empinadas paredes de Hoxxas, as¨ª como disponer torretas para mantener a raya a los enemigos. Los artilleros, armados hasta los dientes, pueden habilitar tirolinas entre dos puntos para salvar grandes distancias. Los excavadores disponen de una perforadora gigante en cada brazo con la que crear t¨²neles en pocos segundos, adem¨¢s de un lanzallamas que los convierte objetivamente en la mejor clase para acabar con los insectoides. Los exploradores gozan de mayor independencia de movimientos gracias a su gancho, pero su ayuda al colectivo es menor.
Todos poseen unas fortalezas y unas debilidades que se complementan muy bien con las del resto de miembros del equipo. Hacerlo, de hecho, es fundamental. Puede que el explorador sea m¨¢s ¨²til para hallar tesoros en lugares rec¨®nditos, pero necesitar¨¢ del artillero para frenar a los monstruos que acechan en lo m¨¢s hondo de Hoxxas. Combinar y coordinar esas funciones es una de las claves para triunfar en Deep Rock Galactic, adem¨¢s de aquello que lo hace tan divertido si se juega con amigos.
Esa mezcla entre momentos de exploraci¨®n tensa y en absoluto silencio con instantes de puro frenes¨ª aniquilando insectoides es una de las grandes virtudes de Deep Rock Galactic. La obra da margen para pausarse y poner informaci¨®n, objetivos y decisiones en com¨²n con los otros compa?eros. Pero tambi¨¦n insufla adrenalina con hordas de dificultad, cantidad y estrategia bien medidas. El dominio del tempo de Ghost Ship Games es digno de admirar. El estudio logra que su mundo se sienta verdaderamente vivo.
Diversi¨®n infinita tambi¨¦n en solitario
Las misiones de Deep Rock Galactic, no obstante, van mucho m¨¢s all¨¢ de combatir bichejos. En cada una se nos encomienda un objetivo que nada tiene que ver con la batalla. Acumular una cantidad determinada de minerales raros o robar cr¨ªas de alien para impedir que se reproduzcan son dos ejemplos comunes y que exhiben el potencial del juego. Mientras el artillero contiene a los alien¨ªgenas, el ingeniero puede crear plataformas para que el explorador, tan ¨¢gil como pobre en combate, se atiborre de loot y cumpla el objetivo de la misi¨®n.
Una vez m¨¢s, todo pasa por la cooperaci¨®n y la comunicaci¨®n entre los integrantes del equipo. Esos ¡°rock and stone!¡± con los que saludas a los de tu condici¨®n antes, durante y despu¨¦s de las misiones generan un v¨ªnculo mucho m¨¢s potente en buena compa?¨ªa. Deep Rock Galactic es un magn¨ªfico generador de vivencias colectivas, una m¨¢quina de crear an¨¦cdotas mientras repetimos las mismas tareas de siempre. Si puedes juntar un grupo de cuatro amigos con el que coordinarte f¨¢cilmente y celebrar los ¨¦xitos birra virtual en mano, Deep Rock Galactic es una compra m¨¢s que segura. Pero, ?y si no? Seguir¨¢s disfrutando como un enano, nunca mejor dicho.
Deep Rock Galactic es perfectamente jugable ¡ªy divertido¡ª en solitario. Cuando no tengas con qui¨¦n juntarte, la empresa para la que trabajas te obsequiar¨¢ con un compa?ero robot de lo m¨¢s apa?ado. De nombre Bosco, este polivalente androide puede disparar a los insectoides, recabar minerales e incluso revivirte alguna que otra vez. Y si quieres jugar en compa?¨ªa, pero no conoces a nadie con el juego, te alegrar¨¢ saber que en torno a la obra de Ghost Ship Games se ha creado una comunidad agradable con la que compartir lobby. Lo ¨®ptimo es convertir a Deep Rock Galactic en ese plan de viernes por la noche con un grupo de conocidos, no te lo podemos negar, pero no te equivocar¨¢s si decides adentrarte en Hoxxas t¨² solo. Quiz¨¢ la ¨²nica excepci¨®n sea hacerlo encarnando a un excavador, puesto que la munici¨®n del lanzallamas es muy limitada y no nos parece una clase capaz de brillar sin el complemento de otros enanos.
En soledad o acompa?ado, esta obra ofrece horas y horas de diversi¨®n. Gran parte de ese m¨¦rito se debe a su sistema de progresi¨®n, que implica tanto los retoques cosm¨¦ticos como la mejora de habilidades. Arrancaremos nuestra aventura como un enano imberbe ¡ªuna barbaridad para los imaginarios de Tolkien o Sapkowski¡ª y ser¨¢n nuestros ¨¦xitos los que nos permitan desbloquear una barba en condiciones, entre otros cosm¨¦ticos. Lo mismo ocurre con nuestras habilidades de combate y recolecci¨®n, mejorables conforme invirtamos los puntos de habilidad que nos otorga cumplir ciertos objetivos en las misiones. Matar una cantidad determinada de enemigos, reunir unas cuantas toneladas de cierto material o completar un buen pu?ado de incursiones nos regalar¨¢n m¨¢s velocidad y ataques especiales. Otro tanto acontece con nuestro equipo, ya que podemos mejorar armas, armadura y cachivaches varios con los materiales que hallemos en lo m¨¢s hondo de Hoxxas.
Si por algo brilla Deep Rock Galactic es por su infinita duraci¨®n. Podemos maximizar cualquiera de las clases y resetearlas para volver a subir de nivel sin perder los objetos y mejoras desbloqueados, una suerte de Nueva Partida + que extiende much¨ªsimo la vida ¨²til de este juego. Junto a la extensa n¨®mina de misiones, a las que quiz¨¢ les pedir¨ªamos un pel¨ªn m¨¢s de variedad en los objetivos, tenemos juego para rato. Y si le sumamos que los mapas de Hoxxas se generan procedimentalmente y que cada visita a las profundidades se siente como la primera, m¨¢s todav¨ªa. En cuanto Ghost Ship Games estabilice los servidores al m¨¢ximo y la conexi¨®n sea tan rocosa como los brazos de un artillero, a Deep Rock Galactic habr¨¢ poco o nada que echarle en cara.
Conclusi¨®n
Deep Rock Galactic es uno de los shooters cooperativos m¨¢s s¨®lidos de los ¨²ltimos a?os. El combate siempre es intenso, divertido y rico gracias a la enorme cantidad de sinergias que se dan entre las cuatro clases del juego. Aprender sus bases es accesible y es perfectamente jugable sin mejora alguna, pero tiene tanta profundidad como Hoxxas y dominar posibilidades de cada clase llevar¨¢ un buen pu?ado de horas. Tanto en solitario como en la compa?¨ªa de otros tres amigos, este indie es garant¨ªa de diversi¨®n infinita. Bien merece una cerveza espacial.
Lo mejor
- Cada clase se siente distinta y todas son importantes para el ¨¦xito
- Combate divertido y profundo, con mucha variedad en funci¨®n de la clase escogida
- Muy rejugable: garant¨ªa de diversi¨®n durante horas y horas
Lo peor
- Algunos problemas de conexi¨®n que pueden frustrar la experiencia
- Falta variedad en los objetivos de las misiones
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g¨¦nero. Est¨¢ bien cuidado a todos los niveles. C¨®mpralo.