
Cross Edge
- PlataformaPS36
- G¨¦neroRPG
- DesarrolladorCompile Heart
- Lanzamiento24/09/2009
- TextoIngl¨¦s
- VocesIngl¨¦s, Japon¨¦s
- EditorNIS America
Choque de universos
Cinco grandes compa?¨ªas a¨²nan fuerzas en un crossover ¨²nico. Los personajes de varios de los t¨ªtulos m¨¢s famosos en el pa¨ªs nip¨®n se re¨²nen en un nuevo escenario para intentar regresar a sus universos propios. Cross Edge es un juego entretenido, aunque muy complejo y demasiado simple.
La mayor virtud de Cross Edge es, sin lugar a dudas, que ha conseguido reunir a cinco grandes desarrolladoras para crear un t¨ªtulo conjunto que fusiona varios de los universos m¨¢s conocidos dentro del mundo de los JRPG. Hablamos de Nippon Ichi, Gust, Idea Factory, Namco Bandai y Capcom; en gran medida, este plantel de estrellas podr¨ªa hacernos pensar en una gran superproducci¨®n, pero parece que se ha optado por un estilo sencillo y directo, al que est¨¢n acostumbrados los conocedores de los juegos originales que inspiraron este t¨ªtulo. Posiblemente, el mayor defecto de Cross Edge sea esa colaboraci¨®n entre tantos, ya que el resultado final se queda un poco perdido entre ideas que no terminan de funcionar o elecciones de dise?o que distan de ser las ideales.

M¨¢s que ning¨²n otro juego, Cross Edge es un t¨ªtulo para los m¨¢s fervientes seguidores de los JRPG, para aquellos que conocen la mayor¨ªa de las franquicias involucradas en este macro crossover y que buscan retos jugables que vayan m¨¢s all¨¢ de la belleza t¨¦cnica. Estos usuarios se encontrar¨¢n con un t¨ªtulo que satisfar¨¢ sus exigencias, con abundantes virtudes y complejidad en su desarrollo como para saciar sus ansias de men¨²s, opciones y mejoras. Son los mismos que celebran el lanzamiento europeo de un juego de marcado estilo japon¨¦s, que llega a nuestro pa¨ªs un a?o despu¨¦s de su estreno nip¨®n para engrosar el cat¨¢logo de RPG de PlayStation 3, bastante escaso hasta el momento. Los usuarios de Xbox 360 nipones recibir¨¢n el mes que viene su versi¨®n de este juego, que esperamos llegue tambi¨¦n a los dem¨¢s aficionados del mundo.

C¨®ctel de estrellas
Si por algo se caracterizan las compa?¨ªas involucradas es por saber contar grandes historias, pese a las limitaciones que puedan tener por motivos de presupuesto. Es por eso que el plantel de personajes que hacen acto de presencia tiene un trasfondo importante, con un car¨¢cter ya desarrollado en sus t¨ªtulos de origen, y que con s¨®lo verles en pantalla el jugador se prepara para lo que sabe que debe esperarse. Cross Edge juega mucho con esto, y en parte es una pena porque se auto-impone limitaciones de cara a nuestro mercado, donde varios de los juegos no han llegado a ver la luz. El fondo de armario es importante, ya que son muchos los personajes que reaparecen de otros t¨ªtulos, adem¨¢s de la gran cantidad de nuevos llegados para contarnos la historia propia de esta aventura.

De por s¨ª, se nos dan a conocer 19 personajes b¨¢sicos. Creados para el juego est¨¢ el protagonista principal de la historia, York, acompa?ado de Miko y May. Desde el universo de Mana Khemia 2: The Fall of Alchemy, un t¨ªtulo in¨¦dito en nuestro territorio, tenemos a Raze, Lily y Whim. Otra gran desconocida es Marie, de Atelier Marie, la entrega para la primera PlayStation con la que se inici¨® la franquicia Atelier, cuyos t¨ªtulos m¨¢s conocidos son Atelier Iris. Otro t¨ªtulo desconocido es Spectral Souls: Resurrection of the Ethereal Empires, del que salen Zelos y Meu. Ya en terreno m¨¢s conocido, tenemos a Lyner, Aurica, Misha y Shurelia, de Ar Tonelico: Melody of Elemia. Desde el reino demon¨ªaco de Disgaea nos llegan Etna y Prinny. Por ¨²ltimo, de la franquicia de lucha Darkstalkers, los ¨²nicos personajes que no provienen de un RPG, se nos presenta a Morrigan, Demitri, Felicia y Lilith.

Pero hay m¨¢s personajes, incluso de estas propias franquicias, y un extenso plantel de nombres creados espec¨ªficamente para esta ocasi¨®n. El motivo de que todos se hayan reunido para compartir esta aventura es, precisamente, uno de los misterios que deberemos investigar. Por causas desconocidas, varios mundo est¨¢n colisionando y junt¨¢ndose; las distintas capas de la existencia se entremezclan, causando que varios habitantes de las mismas se vean arrastrados a una nueva capa perdiendo parte de sus recuerdos, o incluso toda su memoria. Con la ayuda de May, el grupo protagonista comenzar¨¢ a liberar las almas que hay en el mundo para ayudarlas a volver a su plano de existencia propio. Sin embargo, unas fuerzas peligrosas son conscientes de que hay unos infiltrados que se est¨¢n dedicando a liberar las almas errantes, y no est¨¢n dispuestos a consentirlo.

Explorando el mundo
La b¨²squeda de almas para liberarlas es mucho m¨¢s literal de lo que pueda parecer en un principio. No se trata de una b¨²squeda argumental, sino que la deberemos realizar por nuestra cuenta para poder avanzar y, lo que es m¨¢s importante, llegar a conseguir el final bueno del juego. El planteamiento de Cross Edge es complicado, exigente y, por momentos, enrevesado. No nos pone las cosas f¨¢ciles en ning¨²n momento, dando por sentado que debemos investigar, entrenar y mejorar por nuestra cuenta. De un momento para otro, todo cuanto hayamos hecho puede no valer para nada, debiendo volver a vagar por nuestra cuenta de cara a alcanzar el nivel o los objetivos que se esperan de nosotros y, as¨ª, poder avanzar en la historia.
En gran medida, el juego se desarrolla en el mapa del mundo. Se trata de un gran escenario en el que pasaremos m¨¢s del 90% del juego, intentando descubrir c¨®mo abrir el camino, por defecto cerrado, hacia la siguiente zona. No es f¨¢cil saber hacia d¨®nde deberemos ir, o qu¨¦ debemos conseguir, ya que de por s¨ª no hay nada sobre el mapa. La idea es que pulsemos Cuadrado para realizar una b¨²squeda a nuestro alrededor; as¨ª, desvelaremos los distintos elementos que pueden estar ocultos en la zona, como las almas (liberarlas no supone nada importante, simplemente las encontramos, las devolvemos a su mundo y recibimos objetos, como si de un cofre se tratase), los puntos de evento, o las bases de nuestro equipo.

Las bases har¨¢n las veces de ciudades: podremos comprar, vender, desarrollar personajes, sintetizar o potenciar armas, o incluso invertir en realizar b¨²squedas en la zona pr¨®xima a la base. Su presentaci¨®n es bastante sencilla, con una imagen est¨¢tica de fondo y los personajes involucrados en un arte en primer plano. Esta est¨¦tica se mantiene a lo largo de todo el t¨ªtulo, e incluso los eventos se presentan con este aspecto. Los que est¨¦n acostumbrados a los juegos originales de los personajes sabr¨¢n a qu¨¦ atenerse; hasta cierto punto, la sencillez es todav¨ªa mayor en Cross Edge, ya que en muchas ocasiones ni siquiera se nos muestran las sencillas im¨¢genes de los sprites de los personajes en el fondo, tan s¨®lo las im¨¢genes est¨¢ticas y extensos cuadros de texto.

Para poder avanzar en la historia, el objetivo es localizar estos eventos; pueden ser s¨®lo una situaci¨®n presentada a trav¨¦s de di¨¢logos, o bien obligarnos a combatir en enfrentamientos obligados por el argumento. No bastar¨¢ con avanzar, ya que siguiendo estos eventos podemos llegar hasta lo que parece un l¨ªmite del escenario, pero es muy posible que tengamos que volver sobre nuestros pasos para encontrar nuevos eventos ocultos que est¨¢n disponibles y son imperativos para avanzar. En cierta medida, esta din¨¢mica es un tanto agobiante y requiere dar muchas vueltas por un entorno que no est¨¢ precisamente cargado de detalles ni resulta demasiado original; b¨¢sicamente, extensiones de hierba/tierra/piedra con algunas monta?as, lagos o r¨ªos adorn¨¢ndolos.

Si hay algo que llama la atenci¨®n al estar en el mapa del mundo son unas grandes estructuras que unen distintas zonas del entorno entre s¨ª. Al acceder a ellas descubrimos que se tratan del elemento m¨¢s original de la producci¨®n: son una especie de mazmorra, de scroll horizontal, en las que deberemos superar plataformas con nuestro doble salto, hasta encontrar la salida. Como es l¨®gico, todo cuanto hemos dicho est¨¢ condicionado por el elemento m¨¢s importante de todo JRPG que se precie: los combates. Los enfrentamientos son numerosos y constantes, pero no tanto por su frecuencia como porque nos veremos obligados a vivirlos una y otra vez, hasta el punto de que tenemos un bot¨®n (R1) para acceder directamente a un combate.

De pasar mucho tiempo sin combatir, el juego nos empujar¨¢ a hacerlo, indic¨¢ndonos el momento con un medidor que va cambiando de color en una esquina de la pantalla. El motivo de que sea tan necesario combatir es para conseguir estar al nivel de los rivales de argumento, que a la m¨ªnima que nos distraigamos nos superan y debemos mejorar nuestras estad¨ªsticas de forma sustancial. El problema es que la experiencia recibida es muy escasa, por lo que los combates se multiplican de forma exponencial a medida que avanzamos. Los enfrentamientos tienen un toque estrat¨¦gico a la par que nos ofrecen un sistema de turnos bastante peculiar; una parte esencial es el tener creado un esquema tipo desde el men¨² principal de juego.

Ese esquema implica tener seleccionados a 4 personajes (dentro del total que tenemos, esto puede ser una tarea demasiado ardua; m¨¢s cuando lo que no participan en combate reciben menos experiencia y se quedan muy rezagados con respecto a los principales) para que formen nuestro equipo de ataque, y situarlos en las cuadr¨ªculas dentro de un peque?o campo de 3x4. Seg¨²n el personaje y los ataques que utilice la colocaci¨®n ser¨¢ b¨¢sica para determinar su alcance en la zona del enemigo, algo que afortunadamente podremos experimentar en el men¨² antes de saltar al campo de batalla. Los turnos no se acaban hasta que nosotros lo decidamos, d¨¢ndonos tiempo de sobra para determinar nuestros movimientos y ataques.
Cada personaje tiene un determinado n¨²mero de AP (puntos de acci¨®n), y cada ataque, objeto utilizado, cambio de lugar, o cambio de personaje durante la batalla requiere un X de esos APs. He aqu¨ª el elemento estrat¨¦gico, ya que adem¨¢s de la posici¨®n en el terreno deberemos determinar c¨®mo queremos invertir nuestros APs. Por ejemplo, puede ser conveniente reservarlos (se van regenerando y aumentando tras cada turno) para realizar ataques m¨¢s poderosos (los llamados EX, para los cuales adem¨¢s necesitamos haber eliminado algunos enemigos antes de poder utilizarlos, represent¨¢ndose los usos posibles en una barra en la parte superior de la pantalla), o bien es mejor invertirlos para acabar con alg¨²n enemigos potencialmente poderoso en esos momentos.

Algunos personajes pueden realizar cadenas de ataques conjuntos, como por ejemplo Miko y Morrigan; dos ataques de la primera y uno de la segunda (dentro del l¨ªmite de tiempo marcado por un inexorable reloj que inicia su cuenta atr¨¢s tras cada ataque) suponen un golpe combinado m¨¢s poderoso, de los cuales hay abundantes en el juego. Desgraciadamente, deberemos descubrirlos por nuestra cuenta, y las combinaciones son tan numerosas (podremos asignar distintos ataques a cada uno de los cuatro botones frontales del mando) que es una tarea innecesariamente compleja. Adem¨¢s, habr¨¢ factores como el vestuario de los personajes que modificar¨¢n las habilidades de los mismos. Y por supuesto, todo el abanico de roturas de guardia, overkills y dem¨¢s ataques finales que aumentan nuestra puntuaci¨®n en ese combate. El sistema puede parecer complejo dicho en fr¨ªa letra, pero en la pr¨¢ctica es bastante m¨¢s sencillo, y no tardaremos en descubrir cu¨¢les son nuestras mejores t¨¢cticas contra los enemigos.

Es dif¨ªcil llegar a comprender c¨®mo piensa el juego, pero no imposible. Todo es cuesti¨®n de darle tiempo y acostumbrarse a su sistema de exploraci¨®n, un tanto tedioso por momentos al deber dar vueltas por todo el mapa constantemente. La sencillez es lo m¨¢s dif¨ªcil de llegar a aceptar, ya que m¨¢s all¨¢ de su peculiar y complejo sistema de combate, poco m¨¢s hay en Cross Edge por ver. El gran encanto del t¨ªtulo son los combates y el carisma de sus personajes, y eso es algo que no apasiona a todos los usuarios. En cierto modo, se pod¨ªa esperar m¨¢s de este quinteto de compa?¨ªas, que parecen haberse ido por la v¨ªa f¨¢cil a la hora de crear este juego, cuando tienen potencial y ya han demostrado en muchas ocasiones que son capaces de crear algo mucho m¨¢s elaborado, intenso e impactante.

Apartado t¨¦cnico
Sin lugar a dudas, Cross Edge est¨¢ lejos de explotar el potencial de PlayStation 3. Ya desde un primer vistazo se puede ver que el juego podr¨ªa funcionar perfectamente en cualquier m¨¢quina de los ¨²ltimos 10-15 a?os sin sacrificar mucho. La sencillez es total, con un gran escenario (el mapa del mundo), que es muy simple en su presentaci¨®n y carece de muchos elementos, y unos personajes representados siempre como sencillos sprites durante el juego. En las escenas, nos solemos encontrar con im¨¢genes est¨¢ticas de fondo y artes de los personajes en primer plano, con el inevitable cuadro de texto; cierto es que estos artes est¨¢n muy cuidados y resultan muy bellos a la vista, mostrando diferentes expresiones seg¨²n la situaci¨®n.

De vez en cuando, nos encontramos con escenarios tridimensionales, sobre todo en los combates, que tampoco son especialmente complejos, pero s¨ª se agradecen. No ser¨¢n muy habituales, pero transmiten algo de profundidad al juego; de no ser por esos elementos 3D, llegar¨ªamos a dudar de que se tratase de un juego incluso. Lo mismo va por el apartado sonoro, que m¨¢s all¨¢ del buen y abundante trabajo de doblaje para los personajes (en ingl¨¦s o japon¨¦s), no tiene grandes alardes. Hay algunas melod¨ªas interesantes, pero otras que se llegan a hacer muy repetitivas y cansan demasiado pronto. En ocasiones, da la sensaci¨®n de que el n¨²mero de pistas sonoras es muy escaso y que siempre estamos escuchando las mismas, una impresi¨®n no muy satisfactoria.

Pero toda esta sencillez t¨¦cnica se podr¨ªa perdonar, tal y como ocurre siempre con los JRPG, si el producto es de calidad y ofrece un buen argumento y una jugabilidad satisfactoria. Desgraciadamente, Cross Edge se antoja como un experimento que no ha sabido entenderse a s¨ª mismo. La mezcla de personajes funciona, ya que incluso los personajes de Darkstalkers parecen haber nacido para compartir universo con todos los dem¨¢s, pero el argumento no siempre es coherente, y parece m¨¢s bien una d¨¦bil excusa para unificar los juegos originales, sin grandes pretensiones. El planteamiento tampoco sorprende, utilizando f¨®rmulas manidas e ideas que funcionaban en los inicios del g¨¦nero, pero que se han ido quedando anticuadas con el paso del tiempo.
Tal vez, si se hubiese afrontado el mapa del mundo de otra manera y se hubiesen ofrecido ciudades y lugares para investigar m¨¢s all¨¢ de figuras geom¨¦tricas que aparecen en el mapa directamente, el resultado hubiese sido otro muy distinto. Pese a todo, una vez aceptada su sencillez t¨¦cnica y su poco original propuesta jugable, Cross Edge tiene un encanto especial (claro sello de identidad de los personajes involucrados y de las compa?¨ªas que los han creado) que anima a seguir jugando, por muy dif¨ªciles que nos ponga las cosas el juego. Dif¨ªcil, denso, complejo en su sistema de juego y, sobre todo, con una gran cantidad de men¨²s de todos tipos y estad¨ªsticas, Cross Edge es un juego para los m¨¢s fervientes amantes del g¨¦nero de los JRPG.




Correcto
No es lo ¨²ltimo ni lo m¨¢s original, tampoco cuenta con la mejor ejecuci¨®n, pero puede divertir si te gusta el g¨¦nero. Bien, pero mejorable. C¨®mpralo si te gusta el g¨¦nero y te gusta tenerlos todos.