Combat Mission: Shock Force

Las partidas por primera vez podr¨¢n enfrentar a miembros del mismo equipo, es decir, sirios contra sirios o americanos contra americanos. Sin embargo, la historia del conflicto seguir¨¢ los pasos de los miembros de la OTAN y ser¨¢ esta la que deber¨¢ ser resuelta. S¨®lo en el editor de misiones ser¨¢ posible ejecutar partidas del tipo "equipo rojo contra equipo rojo".

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Adem¨¢s, si dispones de conexi¨®n a internet podr¨¢s visitar la p¨¢gina oficial del juego y descargarte el ¨²ltimo parche disponible, la versi¨®n 1.07, que mejora ostensiblemente las sombras y aprovecha un poco mejor el nuevo hardware, ya que estamos hablando de un motor 3D que sali¨® a la calle en verano de 2007, con todo lo que ello supone a nivel tecnol¨®gico.

Hay que destacar que el juego sali¨® inicialmente en algunos pa¨ªses y recibi¨® fuertes cr¨ªticas de la prensa especializada por presentar lagunas en la inteligencia artificial, errores gr¨¢ficos y un interfaz difuso y complicado. Friendware decidi¨® no publicar el juego en nuestro pa¨ªs, a la espera de las revisiones y la traducci¨®n de sus textos. Ahora, con los parches incluidos en la versi¨®n espa?ola y la ¨²ltima actualizaci¨®n, estamos ante un juego bastante mejor en todos los aspectos que el que inicialmente lleg¨® al mercado. Por una vez, y sin que sirva de precedente, podemos comprar un producto superior que los americanos, aunque sea con meses de retraso.

El apartado sonoro quiz¨¢ se quede un poco por detr¨¢s, si el gr¨¢fico cumple sobradamente la m¨²sica y los efectos son meramente testimoniales. Habr¨¢ quien disfrute con las melod¨ªas, son una variante m¨¢s de tantos y tantos juegos de guerra. Nada que destacar.

En esta ocasi¨®n las instrucciones a nuestros soldados ya no ser¨¢n solamente mediante los cl¨¢sicos turnos sino que existir¨¢ la posibilidad de jugar la partida en tiempo real, impartiendo la t¨¢ctica al tiempo que reacciona el contrincante. En realidad es el aspecto m¨¢s destacado y en el que Battlefront asegura se ha invertido m¨¢s tiempo e ideas, dado que este es el pretendido nuevo modo por defecto de los jugadores experimentados. Seg¨²n sus propias declaraciones, el motor del juego se ha reprogramado para tomar como base el modo en tiempo real y a continuaci¨®n simular el cl¨¢sico por turnos.

Cada unidad cuenta con un men¨² contextual de instrucciones, de forma que por ejemplo a un tanque se le puede ordenar que se mueva pero adem¨¢s que lo haga con sigilo, r¨¢pidamente o manteniendo una posici¨®n. Lo mismo si la orden es que dispare, puede hacerlo a discreci¨®n, sobre una zona concreta o para realizar una cobertura, o sobre un objetivo estipulado. De esta forma se tiene un control m¨¢s acentuado pero a su vez es necesaria bastante pr¨¢ctica y rapidez asignando funciones.

Por suerte, jugando en un bando o en otro la dificultad es similar ya que el programa tiene en cuenta el bando escogido y balancea los objetivos de la misi¨®n. Es decir, es mucho m¨¢s punible fallar en algo cuando se tiene todo un arsenal que cuando se lucha con lo justo. Desgraciadamente no hay soporte para crear MODs, un gran pero que se echa en falta desde las primeras partidas y que hubiese enriquecido el producto.

De los anteriores "Combat Mission" hereda virtudes y defectos. No es un juego f¨¢cil, requiere de mucha paciencia y leer un manual bastante grueso. Hasta la fecha "Combat Mission" se hab¨ªa ganado un puesto entre los mejores, el grupo Battlefront ha reunido varios premios por la labor estrat¨¦gica de su juego. Con el giro a la estrategia en tiempo real se rompe en cierta forma la din¨¢mica de juego, resultando ahora algo m¨¢s confuso para jugadores noveles.

Una de las cosas m¨¢s dif¨ªciles de remediar ha sido el posicionamiento de la c¨¢mara. Con el juego en pausa a¨²n es f¨¢cil tomarse un tiempo para buscar tropas, ver la ubicaci¨®n del enemigo y decidir por d¨®nde y con qu¨¦ atacar. Pero paran el desaf¨ªo en tiempo real es necesario saberse todos los atajos de teclado para controlar r¨¢pidamente una unidad, orientar la c¨¢mara o mover el zoom y la perspectiva de la vista. Por ello es muy recomendable jugar sin reloj s¨®lo despu¨¦s de haber cogido cierta experiencia.

El dise?o de las misiones no es todo lo retador que debiera. Dan una sensaci¨®n de no ir demasiado all¨¢ y jugar un poco con objetivos repetitivos. Por suerte cuenta con un potente editor que ya se ha convertido en el verdadero epicentro de la comunidad. L¨¢stima que no se puedan recrear otras escaramuzas creadas por los usuarios a trav¨¦s de MODs, algo que se echa en falta una vez dominado este juego y su mec¨¢nica.

En el grueso de las operaciones el jugador podr¨¢ adquirir el rol de ambas, aunque tambi¨¦n aparecer¨¢n otras fuerzas desestabilizadoras como terroristas, suicidas que se inmolan y esp¨ªas. El principal atractivo del juego es que ofrecer¨¢ la posibilidad de jugar "OTAN contra OTAN" o "Siria contra Siria", algo nunca visto previamente.

Esto tiene su lado positivo, ahora es incluso m¨¢s riguroso y no podremos disparar sin raz¨®n a cualquier elemento del escenario, pues seremos penalizados. Pero este sistema de juego limita tambi¨¦n el p¨²blico el cual va a poder acceder a ¨¦l. La fidelidad tiene un precio y "Shock Force" parece dispuesto a pagarlo, olvidad de juegos como "Ghost Recon" o "Call of Duty", aqu¨ª se juega en otra liga, la de los productos realistas al m¨¢ximo.