Chicken Shoot
- PlataformaWii2
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorZOO Digital Publishing
- Lanzamiento24/09/2007
- TextoEspa?ol
- EditorZOO Digital Publishing
Cacareo silencioso
Disparar a cientos de gallinas y dem¨¢s aves de corral en un continuo sinsentido es posible ahora en Wii gracias a esta nueva versi¨®n de Chicken Shoot. Una alarmante puesta en escena y un control extremadamente sencillo dan como resultado un juego paup¨¦rrimo en todos los sentidos. Mejor no poner huevos como ¨¦ste?
La saga Chicken Shoot es famosa por su sentido del humor y particular presentaci¨®n gr¨¢fica. Hasta hoy, sus juegos hab¨ªan hecho re¨ªr a miles de jugadores de todo el mundo con su alocada propuesta de matar gallinas a escopetazos. Pues bien, hasta hoy. Juegos como esta nueva adaptaci¨®n para Wii ya no tienen gracia. Nos encontramos, posiblemente, con uno de los peores juegos de la m¨¢quina hasta la fecha.
Y es que se pueden pretender ideas innovadoras, fuera de lo com¨²n o hasta rompedoras pero respetando los l¨ªmites de la verg¨¹enza. Chiclen Shoot los sobrepasa y abre al jugador un abanico de posibilidades m¨¢s peque?o que el que pudiera ofrecer cualquier minijuego de cualquier t¨ªtulo de minijuegos. Es todo mini, reducido, obsoleto y sorprendentemente sencillo.
Chicken Shoot es un juego de disparos cl¨¢sico, como Duck Hunt o algunos de los que hemos visto en WiiPlay, en los Rayman Raving Rabbids o en Wario Ware. El escenario, totalmente en 2D, no se mueve y ¨²nicamente aparecen objetos y animales a los que aniquilar de un balazo. Como decimos, es tan simple como lo fuera aquel, entonces v¨¢lido, Duck Hunt de NES. El mando de Wii ser¨¢ nuestra arma, con A recargamos y con B disparamos. ?nicamente presenta una alternativa a tanto disparo, un sencillo minijuego de recoger huevos que caen a izquierda y derecha. Y ya est¨¢, se acab¨® el juego.
Gallinas coloreadas
Uno de los aspectos m¨¢s lamentables de Chicken Shoot es su pobre puesta en escena. Vale que la est¨¦tica perseguida sea precisamente ¨¦sa, escenarios completamente planos, en dos dimensiones y de corte infantil. Pero es que esto ya roza lo inadmisible. Los elementos que aparecen en ese escenario son todos de la misma textura a nivel jugable, es decir, nada se mueve con nuestros disparos, salvo los enemigos, y es imposible disparar a las gallinas a trav¨¦s de lo que tengan delante, aunque sea un arbolito min¨²sculo o una tela.
Esto hace que pronto tengamos la sensaci¨®n de estar jugando a un juego realizado con cart¨®n piedra, en el que ni el dibujo del agua de los r¨ªos se mueve. A veces encontramos excepciones a este aspecto tan negativo, como un molino que gira o una piedra que se cae, pero estos momentos se pueden contar con las manos... Las animaciones de las gallinas y dem¨¢s elementos destruibles son tambi¨¦n muy sosas. La excusa de ser un juego completamente en 2D podr¨ªa haber servido para hacer unas animaciones curiosas, dignas de los tiempos que corren.
No podemos olvidar que todo est¨¢ dibujado con esta misma est¨¦tica, y que la repetici¨®n continua que engloba a su reducid¨ªsima jugabilidad no lo hace apto ni para el p¨²blico al que va dirigido, los m¨¢s peque?os de la casa. Como hemos dicho, su presentaci¨®n y posibilidades de interacci¨®n con los entornos y los enemigos aparentan ser un minijuego soso e inoportuno de cualquier otro t¨ªtulo.
El granjero que dio la vuelta al mundo
Sentado en su sill¨®n, el hombre fornido al que nos toca encarnar decide irse de caza por todo el mundo. Lo curioso es que tanto en Egipto como en los Pa¨ªses Escandinavos encontrar¨¢ siempre a los mismos pollos cambi¨¢ndoles, ¨²nicamente y a veces, un detalle, por ejemplo, unas gafas de sol por un gorro polar. Tambi¨¦n veremos siempre los mismos aviones, las mismas veletas o paracaidistas. Todos ellos son tambi¨¦n dianas para nuestra incansable arma.
Por tanto, a pesar de que el juego cuente con unos pocos escenarios ambientados en lugares de todo el mundo, la sensaci¨®n constante es de estar haciendo todo el rato lo mismo, matando a los mismos enemigos, bajo la misma presi¨®n del tiempo y con las mismas armas y procedimientos. Esto es lo que hace tan pobre e inadmisible a este Chicken Shoot para Wii, es un juego desfasad¨ªsimo temporalmente y que no tiene cabida en una plataforma cargada de shooters extremadamente superiores.
Visitaremos escenarios ambientados en todo el mundo. Empezando por la granja y el bosque, nuestro protagonista ir¨¢ adentr¨¢ndose en el Polo Norte, China, los Desiertos de Nevada, Hawai, etc. No obstante, no son demasiados para lo que podr¨ªamos esperar de un juego tan sencillo como ¨¦ste, por lo que tampoco es un aspecto a valorarle.
Disparar, disparar y disparar
Pues s¨ª, ¨¦stas son las tres acciones que deja hacer el juego a parte del minijuego de recoger huevos. Entre tanto gatillo B, intercalaremos de vez en cuando el bot¨®n A para recargar nuestra arma, que puede ser desde la b¨¢sica pistola de balas infinitas hasta ametralladoras y una escopeta, formando un penoso?total de cuatro. En su actuaci¨®n no hay retroceso con los disparos ni un comportamiento racional, pero tampoco el juego, de corte humor¨ªstico y sencillo, lo requiere. Cada arma tiene distintas ventajas que no tienen?las dem¨¢s y todas son siempre?mejores que la pistola inicial. Atinar a las dianas (animales, personajes, botellas, bombas, etc.) con una u otra arma no cambiar¨¢ sus animaciones de acierto.
Cada gallina o elemento destruible vale puntos, que se ir¨¢n sumando en la parte superior derecha de la pantalla para dejar nuestras mejores marcas guardadas. Los objetivos de las partidas pueden ser dos, dependiendo del modo de juego que elijamos. Por un lado est¨¢ el Cl¨¢sico, en el que tendremos que eliminar un n¨²mero de objetivos desconocido antes de que se acabe el tiempo. Por otro, est¨¢ el Arcade, en el que tendremos que hacer lo mismo salvo que esta vez lo que no conocemos es el tiempo y s¨ª los objetivos. Los niveles y su orden de sucesi¨®n son los mismos, por lo que en realidad no los podremos considerar modos de juego distintos.
Chicken Shoot tambi¨¦n tiene un modo Multijugador con el que, a pantalla partida, podremos retar a cualquier persona que aguante m¨¢s de 10 minutos apuntando a la pantalla y pulsando B continuamente. S¨®lo pueden jugarlo dos jugadores y el corte de la pantalla partida es vertical. La visualizaci¨®n es como la del modo para un jugador, veremos las balas que nos quedan del arma que llevemos, el tiempo, los puntos conseguidos y los punteros, que cambian seg¨²n con qu¨¦ estemos disparando y que, llevados a los bordes de la pantalla, sirven para arrastrar la vista por el escenario.
C¨®mo suena la granja
En lo que respecta a su apartado sonoro, Chicken Shoot es s¨®lo aceptable. Los efectos de sonido se repiten para diferentes acciones, las m¨²sicas encajan en el escenario que estemos jugando en cada momento pero no destacan ni est¨¢n demasiado elaboradas, y las gallinas tienen un cacareo o grito al morir demasiado parecido y repetitivo. Las armas suenan cada una de una forma, incluso a trav¨¦s del altavoz del Wiimote.
No hay vibraci¨®n del mando, ni siquiera cuando nos atacan con sus huevos las diferentes aves que surcan los cielos de todos los escenarios. Tampoco hay implementaci¨®n alguna para el Nunchuk o los dem¨¢s botones, s¨®lo en el minijuego de recoger huevos utilizaremos el sensor de movimientos inclinando el mando a un lado y a otro. Y es que otro de los puntos negativos es su superficial implementaci¨®n al Wiimote. El puntero responde con fidelidad pero de forma algo brusca, principalmente en el arrastre del escenario, que no es tan suave como hemos podido ver en juegos como Metroid Prime 3: Corruption o incluso Red Steel. En la recogida de huevos tambi¨¦n se nota cierta brusquedad y falta de precisi¨®n.
Conclusiones
Chicken Shoot no es un juego recomendable en ning¨²n sentido. Wii tiene mucho cat¨¢logo ya en el g¨¦nero como para tener en cuenta minucias como ¨¦sta, que durar¨¢n una tarde. Parecen?dos minijuegos extra¨ªdos de otro t¨ªtulo, es una idea para los m¨¢s peque?os pero que ni ellos sabr¨¢n valorar. Su p¨¦sima presentaci¨®n, su repetitivo sistema de juego, brusquedad del manejo y una estructura tan simple que roza el insulto hacen de ¨¦l una obra pasajera, olvidable y poco recomendada. El cacareo de estas gallinas es m¨¢s silencioso de lo que podr¨ªa haber sido, no aciertan poniendo huevos y, para colmo, son todas iguales. Como muchos de sus apartados, inadmisible.
- Muy sencillo y apto para ni?os muy peque?os.
Muy Malo
No tenemos paciencia ni para seguir mirando el resto de opciones para no salir m¨¢s defraudados. No te lo compres, es un desprop¨®sito.