Capitalismo al pie de la letra

Muchas han sido las compa?¨ªas que han intentado exportar al mundo de los videojuegos el esp¨ªritu y ambiente del mundo de los negocios real. Sin embargo, hasta que naci¨® la serie Capitalism nunca se hab¨ªa conseguido con tanto realismo, ni con tanta claridad para el jugador interpretar a un magnate de los negocios.

Antes de que empec¨¦is a leer este an¨¢lisis tengo que indicar que la nota del juego no es correcta, no es correcta porque es un juego de mayor puntuaci¨®n bajo los criterios que encontrar¨¦is expuesto en este an¨¢lisis. Sin embargo la falta de traducci¨®n del conjunto sumada a la ya dificultad de aprendizaje que supone esta clase de t¨ªtulos para el jugador medio, me ha obligado a valorar el juego con un aprobado alto en lugar del notable que se merecer¨ªa, si no hiciera falta un abrumador dominio del ingles.

Volviendo al juego. Realismo, realismo de esto no podemos hablar realmente puesto que traer a un videojuego todo lo que leemos d¨ªa a d¨ªa en cualquier diario financiero resulta cuanto menos inoperativo. Inoperativo porque mezclar el realismo de este complicado mundo de los negocios en el que vivimos, resultar¨ªa m¨¢s acertado catalogarlo como un simulador social que como un videojuego que enganche y divierta.

Cuando hace unos a?os naci¨® la serie Capitalism, sus creadores se encontraron ya con este dilema, pero sacrificando un poco de aqu¨ª y all¨ª consiguieron un videojuego equilibrado que hasta la aparici¨®n de esta segunda parte, se ha consolidado por sus ventas y sus cr¨ªticas como el juego de negocios definitivo. Este an¨¢lisis puede parecer algo tedioso, pero no menos que abrir nuestro diario habitual por la secci¨®n de negocios.

?Pero que nos ofrece realmente Capitalism II? La verdad es que todo. Debemos pensar que el programa nos pide que le demos los datos personales para crear una empresa, cuya finalidad no ser¨¢ otra que convertirla en una multinacional. Para daros cuenta del poder parametrizado que engloba este videojuego os paso a detallar qu¨¦ aspectos podemos manejar en el videojuego. Centrarnos en uno solo no nos permitir¨¢ ser los amos de los negocios, es la mezcla de todos ellos los que nos proporcionar¨¢n los mejores resultados financieros.

Para empezar el control del suelo es fundamental, podemos dedicarnos a la compra/venta de solares como una forma de hacer negocio, adem¨¢s de ser claves para acelerar la prosperidad de seg¨²n que negocios. Una vez tenemos los solares debemos pensar a qu¨¦ productos vamos a dedicarnos, para ello deberemos pensar si adquirimos una f¨¢brica que los construya o los compraremos externamente, si los distribuiremos nosotros mismos o los distribuir¨¢n otros e, incluso, si somos nosotros los que los venderemos o si ser¨¢n otros quien lo haga.

Buff, menudo p¨¢rrafo pero es as¨ª realmente Capitalism II, podemos optar por hacer y deshacer como nosotros queramos. Si en un momento dado por ejemplo deseamos almacenar stock porque este se paga muy mal, podemos hacerlo parando la distribuci¨®n del producto para revalorizarlo m¨¢s tarde en el mercado. El punto d¨¦bil del programa, me refiero a que lo ha sido en otros videojuegos, es el n¨²mero de productos disponibles para invertir. En Capitalism II hay cerca de 60 productos diferentes que pertenecen a segmentos de la industria de lo m¨¢s variopinto, es decir, no tendremos problemas para dedicarnos a lo que m¨¢s nos gusta.

As¨ª, en resumen, la clave de todo el proceso pasa por realizar una cadena desde la creaci¨®n del producto hasta su desaparici¨®n. Para ello el juego nos permite nueve casillas de enlace con las que poder dibujar el circuito que queremos hacer con el producto mientras este bajo nuestro control. Luego nos queda establecer la calidad de desarrollo y tecnolog¨ªa que tendr¨¢ nuestro producto respecto al de la competencia, llegando hasta el punto de controlar la calidad t¨¦cnica de nuestros trabajadores en f¨¢bricas y tiendas.

A todo esto e intentado que no abandon¨¦is de leer este an¨¢lisis, hay que a?adir el hecho que el programa dispone de una elegante cantidad de herramientas para crear un estudio de mercado sobre la evoluci¨®n de un producto determinado en el mercado. As¨ª podemos saber los gustos, satisfacci¨®n y demanda del producto entre el p¨²blico. Todo ello sin olvidar que afecta de forma directa al prestigio de la marca que hemos creado y que puede perjudicar/beneficiar a otros productos que estemos fabricando con nuestro sello.

Para lanzar o publicitar nuestros productos en el mercado, podemos adquirir empresas de televisi¨®n y radio p¨²blicas. Estas aunque muchas veces no resulten rentables directamente proporcionan una base de marketing fundamental con la que aumentar la venta de los productos m¨¢s d¨¦biles que tratemos. La otra es adquirir las f¨¢bricas o tiendas de distribuci¨®n de la competencia, que puede resultar una mala inversi¨®n pero que pueden convertirnos en los amos de un determinado producto.

Los productos no son la ¨²nica forma de ganar dinero en el juego, la inversi¨®n en bolsa tambi¨¦n est¨¢ a la orden del d¨ªa. Para ayudarnos a elegir nuestra inversi¨®n el programa nos ofrece en todo momento la posibilidad de visualizar las noticias pol¨ªticas-financieras m¨¢s importantes que est¨¦n sucediendo en ese momento en el mundo. Al fin y al cabo nuestra empresa deber¨ªa ser a largo plazo una multinacional, a la que le afecta cualquier suceso mundial que pueda propiciar un altibajo en un segmento de mercado determinado.

Hasta aqu¨ª la descripci¨®n de la idea de Capitalism II, os puedo asegurar que han sido unas peque?as pinceladas de lo que os permitir¨¢ el juego. Adquisici¨®n de tecnolog¨ªa externa, control de materias primas o inversiones en la venta/compra de pisos son ejemplos que dejo para la investigaci¨®n del jugador. Si os preocupa la duraci¨®n de la partida para conseguir vuestros objetivos o controlar las decisiones de vuestra empresa, pod¨¦is estar tranquilos ya que el juego permite un absoluto control de la velocidad de acci¨®n para ajustarla a las necesidades de cada instante.

El juego para ayudaros a digerir, controlar y asimilar toda la informaci¨®n que dispondr¨¢ en pantalla a lo largo de Capitalism II, presenta la posibilidad de seguir un completo y f¨¢cil tutorial. Aunque de nuevo el hecho que se encuentre en ingl¨¦s vuelve a dificultar su seguimiento para los no aficionados al idioma extranjero. Sin embargo, si este no es vuestro caso, os asegura que a diferencia de otros tutoriales en ¨¦ste resulta realmente dif¨ªcil perderse no realizando las acciones que nos va demandando el juego.

El apartado multijugador del juego se realiza mediante los servicios de Ubi, a trav¨¦s de una aplicaci¨®n externa que se encuentra incluida en el CD. Mediante este programa podemos localizar a otros adversarios disponibles en la red, que est¨¦n dispuestos a desafiarnos como magnates de los negocios. Ni que decir que la tem¨¢tica del juego convierte la b¨²squeda de adversarios en una dura tarea.

Adem¨¢s de no ser muchos los interesados en unirse a una partida humanizada, es dif¨ªcil encontrar los adversarios id¨®neos para el control que tenemos sobre el programa. Aunque como siempre resulta la forma m¨¢s r¨¢pida de aprender a jugarlo, y m¨¢s entretenido al convertirlo en un verdadero monopoly gigante. Est¨¢ programado en la justa medida para satisfacer la necesidad de jugar contra oponentes humanos, con la ventaja de que el conocido 'lag' no afectar¨¢ mucho al desarrollo de la partida.

Si no os va el tema multijugador, y ya hab¨¦is completado el tutorial el juego os ofrece dos formas de introducirnos en las partidas monojugador. Una es la campa?a empresario, recomendada para despu¨¦s del tutorial, en la que deberemos desarrollar la empresa m¨¢s poderosa que podamos. La campa?a capitalista est¨¢ pensada para los expertos en el capitalismo, como el nombre indica, al proponernos verdaderos retos a conseguir con una compa?¨ªa dada.

Si ya sois capaces de conseguir elevados dividendos en peque?os periodos de tiempo, si sois capaces de salvar a la empresa m¨¢s desastrosa de la banca rota, tranquilos, Capitalism II ofrece tambi¨¦n la posibilidad de realizar una partida a nuestro gusto configurando todos los par¨¢metros de la misma: oponentes, objetivos, condiciones de mercado. Se pod¨ªa catalogar esta ¨²ltima opci¨®n como el modo escaramuza de los juegos de estrategia en tiempo real. Como veis hay capitalismo para rato.

Audio y Video

Si algo puede confundir a este juego como un proyecto fallido de traer el mundo de los negocios al PC, son sus gr¨¢ficos. A pesar de la elegancia publicitaria con que la caja nos cataloga los gr¨¢ficos, estos acaban siendo mon¨®tonos pasada la primera hora de juego.

Y es que si bien resultan llenos de colorido y detallistas, tambi¨¦n resultan muy repetitivos para el jugador. Si nos movemos un poco a la izquierda, otro a la derecha en el mapa, el jugador acaba creyendo que no se ha movido de ubicaci¨®n. Casi todas las ciudades son iguales y es m¨¢s los edificios tambi¨¦n son semejantes. Solamente utilizando el zoom de tres niveles que permite el programa, podemos llegar a encontrar diferencias significativas dentro de la ciudad

Por si fuera poco, las animaciones que ofrece el juego est¨¢n descompensadas en velocidad e incluso las mejores son totalmente innecesarias. Lo cierto es que no veo que inter¨¦s puede tener para el jugador, presenciar la circulaci¨®n de peatones y veh¨ªculos  por la ciudad. Dado que todas las calles urbanizadas tienen la misma densidad de tr¨¢fico, o lo que es lo mismo no es dif¨ªcil observar a los veh¨ªculos dar vueltas sin cesar a la misma manzana hasta que se deciden por un trayecto diferente.

Los gr¨¢ficos en los men¨²s de juego son tambi¨¦n normalitos, aqu¨ª se pod¨ªa pedir mucho m¨¢s pero la elevada resoluci¨®n de los men¨²s supongo que para facilitar la lectura de los innumerables textos de pantalla no lo han permitido. As¨ª, las fotos de los productos, las gr¨¢ficas de los men¨²s y como ya digo las letras de los mismos me recuerdan a los juegos antiguos de Windows 95 que funcionaban bajo MS-Dos.

Lo dicho, si bien el apartado gr¨¢fico es totalmente correcto, tambi¨¦n lo es afirmar que no se han esmerado mucho en este aspecto. Es como si la simulaci¨®n econ¨®mica les hubiera gastado todo los recursos a los programadores. Por otro lado si lo pensamos fr¨ªamente, quien busque una buena IA y un buen programa de negocios no encontrar¨¢ peros en este aspecto.

El apartado musical esta al mismo nivel que el gr¨¢fico, sonidos por aqu¨ª y por all¨¢ sin nada relevante aunque de nuevo el juego no es que lo necesite realmente. En cuanto a la m¨²sica si bien es correcta, le sucede lo mismo que a la mayor¨ªa de Sims: a la media hora te parece estar escuchando un disco rayado.

Gui¨®n

Si a estas alturas no hab¨¦is comprendido que nuestra misi¨®n es crear una empresa que dirija absolutamente todo producto que circule por la ciudad, est¨¢ claro que este no es vuestro t¨ªtulo. Mientras tanto y como aperitivo ten¨¦is el entretenimiento de intentar arruinar a las empresas de la competencia que se encuentran en vuestra misma poblaci¨®n.

Recordar que para conseguir financiar nuestro proyecto a largo plazo no es necesario seguir la establecida rutina de otros videojuegos. No hace falta crear, manipular y vender para ganar dinero con nuestros productos. Ahora bien, esta secuencia funcionar¨¢ tambi¨¦n a la perfecci¨®n en el juego porque lo hace en nuestra vida real.

Jugabilidad

Las opciones que ofrece el Capitalism II son realmente colosales, para hacernos revivir cada aspecto del duro mundo de los negocios. Que si informes de venta, estudios de mercado, encuestas de calidad, control de productividad?. Opciones muy variadas y dispares que deben estar disponibles con relativa intuici¨®n y facilidad al usuario.

Lo cierto es que la informaci¨®n en pantalla, es decir la interfaz de juego, esta realmente bien catalogada llena de accesos r¨¢pidos con mini men¨²s. Pero por otro lado, el acceso inmediato a seg¨²n que elementos resulta algo complicado sobre todo en los inicios del juego. As¨ª hasta que no llegamos a familiarizarnos con el men¨² resulta dif¨ªcil llegar a la opci¨®n que sabemos el juego nos permite, que hemos visto y que deber¨ªa estar al lado de la anterior porque siempre la usamos junto a otra opci¨®n. Con el tiempo el mal se minimiza llegando a ser incluso c¨®modo, pero se puede decir que la curva de aprendizaje es un poco pendiente.

El hecho de que los adversarios controlados por la m¨¢quina conozcan plenamente el funcionamiento del juego, los convierte en unos dignos adversarios. No queda claro si juegan con informaci¨®n privilegiada o no, pero esta tampoco servir¨ªa de mucha ayuda ante las continuas fluctuaciones de mercado que suceden repentinamente.

En conclusi¨®n la jugabilidad es elevada si te gustan los negocios. El poder hacer y deshacer a tu gusto, sin limitaciones de que o no est¨¢ permitido. Sin entrar en la complicaci¨®n de realizar acciones ilegales, lo convierten en, como indiqu¨¦ al inicio de este an¨¢lisis, el videojuego definitivo de los negocios.

Estrategia y Trucos

Poca estrategia os puedo adelantar para un juego con tan innumerable ¨ªndice de variables internas. Nada es predecible, ni es segura una inversi¨®n determinada para asegurarse el ¨¦xito. Todo pasa por estudiar una y otra vez, las noticias externas, el mercado interno y sobre todo la satisfacci¨®n de la gente con nuestra marca.

Esto y unas oportunas inversiones en empresas externas, inmobiliarias e incluso adquisiciones de edificios p¨²blicos son la base clara del ¨¦xito. La caracter¨ªstica de convertir cada partida en aleatorias seg¨²n los pasos que vayamos dando en el mercado, le proporcionan la verdadera riqueza del t¨ªtulo.

El truco de oro en todos los juegos done hay que arriesgar para obtener beneficios, es no abarcar m¨¢s de lo que se puede. En Capitalism II es totalmente funcional.

Compar¨¢ndolo con...

Si tuviera que igualarlo a la anterior entrega no dudar¨ªa en afirmar, como se ve a simple vista, que el juego ha madurado much¨ªsimo y es clar¨ªsimamente superior a su predecesor. Es justamente el detalle gr¨¢fico el que menos ha evolucionado, junto a una interfaz que todav¨ªa le quedan pendientes algunas correcciones.

A pesar de que las capturas de pantalla os puedan inducir a que se trata de una variante de SimCity, ser¨ªa un grave error. Son juegos totalmente diferentes y como ¨²nico punto en com¨²n, si es que lo tienen, ser¨ªa la similitud de algunos edificios y la posibilidad de ubicar nosotros mismos nuestras edificaciones.

Juegos como Industry Giant son m¨¢s similares a Capitalism II, sin embargo el significado de la palabra dinero no es llevado a puntos tan extremos como en este juego cuyo t¨ªtulo ya lo anuncia a bombo y platillo. Adem¨¢s las posibilidades de edificaci¨®n en el caso de Capitalism II son mucho menores, al limitarse a elegir un edificio entre la lista seg¨²n nuestras posibilidades y ubicarlo donde tengamos espacio disponible.

Lo que est¨¢ bien

La similitud con los negocios reales que inspira el videojuego. Sencillamente te parece que estas realizando adquisiciones por la red con tu propio capital, sino fuera porque est¨¢ en d¨®lares y tiene muchos ceros a la derecha.

El imprescindible manual que acompa?a el juego y que est¨¢ repleto de capturas de pantalla y detalladas explicaciones como mandan los c¨¢nones. El tutorial le superar¨ªa en valoraci¨®n si hubiera estado traducido.

La avalancha de productos disponibles y las enormes posibilidades de hacer negocios disponibles, consiguen que los objetivos de cada partida se puedan conseguir sin tener un trayecto trazado.

Lo que no est¨¢ tan bien

Se echa de menos como nunca encontrar alguna frase en espa?ol en el juego. Sobre todo si tenemos en cuenta que las indicaciones que nos hace el videojuego, resultan tan importantes como los di¨¢logos en las aventuras gr¨¢ficas.

El llegar a algunas opciones de men¨² resulta realmente engorroso. Convierte la interfaz en un juego de memoria para el jugador, m¨¢s que en una herramienta para realizar nuestras operaciones.

Los gr¨¢ficos a pesar de ser detallistas, impregnan repetici¨®n y las pocas animaciones que incorpora el juego est¨¢n realizadas en aquellos lugares que no aportan ning¨²n valor a?adido al t¨ªtulo.