Blacksad: Under The Skin, impresiones; una carta de amor a los c¨®mics

Cuatro premios Esiner (los llamados Oscars del mundo del c¨®mic), varios galardones a Mejor ?lbum, Mejor Autor Revelaci¨®n y Mejor Dibujo en el Sal¨®n del C¨®mic de Barcelona, a¨²n m¨¢s estatuillas y menciones en la Expoc¨®mic de Madrid e incluso importantes victorias en los Premios IVA y los Premios Harvey. A estas alturas es dif¨ªcil descubrirle a nadie el alcance y ¨¦xito de Blacksad. La serie de Juan D¨ªaz Canales y Juanjo Guarnido ha revolucionado el g¨¦nero negro dentro del panorama de la novela gr¨¢fica europea. Lo ha hecho con su mundo de animales antropom¨®rficos y su recreaci¨®n de la Estados Unidos de los cincuenta, un eco continuo de las mejores aventuras de Philip Marlowe y Samuel Spade. La saga recibir¨¢ su primera adaptaci¨®n a videojuego el pr¨®ximo mes de septiembre y, siendo espa?ola, qu¨¦ mejor que hacerlo de la mano de Pendulo Studios, el estudio patrio m¨¢s longevo de nuestra historia, m¨ªticos creadores de Hollywood Monsters, Yesterday Origins y Runaway.

Esta semana en MeriStation tuvimos la oportunidad de hablar con Pendulo y probar por primera vez la adaptaci¨®n, Blacksad: Under The Skin, con la que pasamos cerca de dos horas en su nueva aventura para John, Weekly, Smirnov y compa?¨ªa. Una aventura gr¨¢fica que tiene la dif¨ªcil tarea de estar a la altura de esa innumerable retah¨ªla de premios antes citada. Todo un desaf¨ªo que, a¨²n as¨ª, el estudio coge con ganas y talento demotrado, y que, como veremos, est¨¢ cerca de conseguir. He aqu¨ª nuestras primeras impresiones de Blacksad en su primer alunizaje en consolas y PC.

Nueva York, esa hoguera gigante

Blacksad: Under The Skin parece, ante todo, una carta de amor a la novela gr¨¢fica de la que parte. El juego se antoja una parada imprescindible para todos los que disfrutaran de la obra de D¨ªaz Canales y Guarnido. Un must have, que se dice ahora. Es asombrosa la cantidad de referencias que hace y esconde gui?os y homenajes en cada rinc¨®n de sus escenarios. No solo es que haya lugares y personajes extra¨ªdos del c¨®mic, sino que tambi¨¦n hay l¨ªneas de di¨¢logo id¨¦nticas y tiros de c¨¢mara exactamente iguales a los de sus vi?etas. La ambientaci¨®n y el esp¨ªritu de la novela est¨¢n clavados. En un momento dado nuestro protagonista, John Blacksad, dice que Nueva York es como una hoguera gigante. Siguiendo su estilo para describir las cosas, podr¨ªamos decir que jugar a Blacksad: Under The Skin es como comprar el tomo integral de la serie, abrirlo por la mitad y aspirar el olor de sus p¨¢ginas. Aqu¨ª un v¨ªdeo con varios ejemplos de lo que os decimos:

Un gato al que no le gusta la leche

El guion de Blacksad: Under The Skin propone una historia original que no adapta ninguna de las aventuras en las que hemos visto al detective hasta la fecha. Ha sido escrito por Pendulo Studios, pero cuenta con la aprobaci¨®n de Juan D¨ªaz Canales, uno de los padres del personaje. A¨²n as¨ª, no ser¨¢ canon y su argumento no tiene por qu¨¦ repercutir en los cap¨ªtulos 6 y 7 que se est¨¢n dibujando en estos mismos momentos. El relato se ambienta entre la primera y la segunda parte de la novela gr¨¢fica (en medio de Un lugar entre las sombras y Artic-Nation) y nos sit¨²a en la Nueva York de los a?os cincuenta, bajo la piel (Under The Skin) de John Blacksad, gato e investigador privado que destila todos los rasgos del g¨¦nero.

Joe Dunn, el propietario de un club de boxeo, ha sido encontrado muerto y su pupilo, Bobby Yale, ha desaparecido. Bobby ten¨ªa concertado un combate de gran importancia y en caso de que no aparezca, el gimnasio de Joe Dunn servir¨¢ para sufragar la cancelaci¨®n de la pelea y tendr¨¢ la obligaci¨®n de cerrar. La hija de Joe, Sonia Dunn, acudir¨¢ a John Blacksad para que le ayude a encontrar a Bobby Yale y lo presente al combate antes de que le arrebaten el ¨²nico legado que le ha dejado su padre, ese sucio y maloliente agujero repleto de sacos de boxeo y problemas financieros.

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El caso no resultar¨¢ tan f¨¢cil como Blacksad esperaba y pronto descubrir¨¢ que hay mucha gente implicada y que esta pelea salpica a las m¨¢s altas y bajas esferas. Antes de que nos demos cuenta ya estar¨¢n metidos en el ajo varios nombres y rostros conocidos de la obra original: Weekly, nuestro f¨¦tido amigo del What's News; Smirnov, el jefe de polic¨ªa con el que compartimos favores; Jake Ostiombe, un gorila de ¨¦tica dudosa dedicado al boxeo; e incluso Poli, el due?o del Iguana, un bar solo para reptiles en los suburbios de Nueva York. Adem¨¢s de los que tomen partido en el caso tambi¨¦n nos encontraremos con aquellos que forman parte del pasado y la familia de John, bien sea en fotograf¨ªas, llamadas telef¨®nicas o escenas muy puntuales. Desde su amada Natalia Wildford hasta su hermana Donna, su sobrino y su padre.

Nosotros hemos jugado una hora y media y solo podemos decir que la trama nos ha enganchado y cogido por la pernera. Sus desarrolladores aseguran que durar¨¢ entre 12 y 13 horas, que tendr¨¢ hasta 6 finales diferentes en funci¨®n de las decisiones que tomemos y que ser¨¢ muy rejugable. De hecho, el juego empieza con un marido infiel que acude a nuestro despacho a recriminarnos que hayamos hecho de detective para su esposa y que vayamos a darle ¡°ciertas fotos¡± que destruir¨¢n su familia. Intentar¨¢ sobornarnos y podremos elegir entre aceptar el dinero y olvidar el caso, aceptarlo y a¨²n as¨ª entregar las fotos para conseguir m¨¢s dinero, rechazar el soborno pero destruir las pruebas y ayudar al adultero, o decir que no a los billetes y cumplir con nuestra obligaci¨®n inicial.

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Creando a nuestro propio John Blacksad

En nuestro caso optamos por ser fieles a la primera clienta, a la que avisamos de los cuernos de su esposo. A cambio, m¨¢s adelante y ya en mitad del caso del boxeador, nos encontramos de nuevo con el marido, que nos peg¨® una paliza y nos impidi¨® hacernos con algunas pruebas cruciales para la investigaci¨®n. Adem¨¢s, dado lo que acontec¨ªa en la escena, nos pareci¨® que era muy probable que volvi¨¦ramos a verle. Qui¨¦n sabe, quiz¨¢s haber ayudado a la esposa tambi¨¦n tenga su eco en la posteridad y sirva de algo m¨¢s adelante. Esto es solo un ejemplo de la cantidad de decisiones y variables que manejaremos en Blacksad: Under The Skin.

Adem¨¢s de los diferentes finales, el juego tiene un apartado llamado ¡°Tu propio Blacksad¡± que analiza nuestra manera de jugar y hace un perfil del protagonista en base a las decisiones que tomamos. Un perfil que muestra las siguientes estad¨ªsticas y a?ade en qu¨¦ porcentaje forman parte de nosotros:

Desconocemos si podr¨¢n compararse con las del resto de usuarios (al igual que las decisiones tomadas en las obras de Quantic Dream y Telltale Games), pero estar¨ªa bien. De momento parece que no sirve para nada en especial, siendo una curiosidad m¨¢s que otra cosa.

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Por ¨²ltimo y no por ello menos importante, decir que Blacksad: Under the Skin llegar¨¢ completamente doblado y traducido al castellano. La implicaci¨®n de los autores del c¨®mic es tal que los propios D¨ªaz Canales y Guarnido han dado el visto bueno al elenco de actores de doblaje que encontraremos. En Espa?a, John Blacksad tendr¨¢ detr¨¢s a Claudio Serrano (Batman en la gran pantalla) y personajes como Smirnov a Roberto Encinas (la voz de Nathan Drake, por ejemplo). En cualquier caso, si no nos convencen podremos entrar en el men¨² y elegir en qu¨¦ idioma estar¨¢n los subt¨ªtulos y la voces.

?Y a nivel jugable?

A nivel jugable, Blacksad: Under The Skin recuerda a los t¨ªtulos de Telltale Games (el m¨¢s ic¨®nico, The Walking Dead), aunque va algunos pasos m¨¢s all¨¢. En esencia haremos lo mismo, pasear por distintos escenarios, observar objetos que nos desbloquean l¨ªneas de texto y sortear conversaciones y secuencias de acci¨®n a base de quick time events (QTE). Sin embargo hay varias diferencias que podr¨ªan sintetizarse en la siguiente afirmaci¨®n: somos un detective. Aqu¨ª la exploraci¨®n es mucho m¨¢s importante. Ser¨¢ habitual que podamos elegir qu¨¦ escenarios visitar y recorrer. Dependiendo de lo que descubramos haremos unas deducciones u otras, las cuales apuntaremos en una libreta y podremos tratar de unirlas y conectarlas para avanzar en la historia. Tambi¨¦n hay una especie de ¡°sentido de detective¡± que activar¨¢ un modo bullet time (c¨¢mara lenta) durante las conversaciones, gracias al cual podremos usar nuestros sentidos de gato y observar, oler y escuchar detalles de los interlocutores que desbloquean l¨ªneas de di¨¢logo y nos permiten salirnos con la nuestra.

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El dise?o de escenarios luce brillante. Habr¨¢ m¨¢s de veinte, algunos lugares son enormes (con varias alturas y zona exterior con gente paseando) y est¨¢n repletos de objetos y personas con los que interactuar. Especial atenci¨®n merecen el despacho de Blacksad y, sobre todo,el club de boxeo en el que transcurre el asesinato. Como dec¨ªamos, en ocasiones podremos elegir a cu¨¢les queremos ir y en qu¨¦ orden, cambiando el desarrollo de los acontecimientos. En casi todos habr¨¢ tambi¨¦n un tel¨¦fono de pared que nos permitir¨¢ convocar a terceros en el lugar o intercambiar informaci¨®n que luego nos puede ser de utilidad en el caso. Una muestra de la cantidad de elementos que contienen son los 100 cromos coleccionables que hay escondidos en ellos.

El sentido de detective y la pantalla para relacionar conclusiones son dos mec¨¢nicas muy interesantes, que adem¨¢s aportan variedad y dinamismo, pero a priori resultan demasiado simples. En gran medida porque siempre vienen acompa?adas de un circulito con un n¨²mero dentro que nos indica cu¨¢nto nos queda por ver o descubrir. Es decir que no podemos pasar nada por alto (al menos de forman involuntaria) y basta con insistir hasta dar con lo que nos falte. Demasiado guiado. Tambi¨¦n ocurre con frecuencia que el jugador a los mandos averigua algo pero no puede ponerlo en pr¨¢ctica porque le falta el objeto concreto que desembocaba en esa rama de la investigaci¨®n. Por tanto, aunque resulta mucho m¨¢s abierto y capaz de divergir que los juegos de Telltale, tambi¨¦n hay bastantes ¡°cuellos de botella¡± que nos obligan a realizar ciertas acciones y que si no cumplimos nos tendr¨¢n dando vueltas y m¨¢s vueltas por los escenarios, aburridos y perdidos.

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"La vida es una melod¨ªa desafinada"

En estas primeras horas con el juego lo que menos nos han gustado son los quick time events y los controles, elementos un poco toscos a estas alturas y pendientes de limar. Hay varios tipos de QTE y, por incre¨ªble que parezca, porque al fin y al cabo solo hay que pulsar un bot¨®n, algunos son un poco confusos y dif¨ªciles de entender. En ocasiones es solo pulsar un bot¨®n, en otras machacarlo repetidas veces y por ¨²ltimo, apretarlo en el momento indicado. Es este ¨²ltimo el que no muestra de forma clara cu¨¢ndo es el momento oportuno y nos ha obligado a repetir varias secciones con frecuencia. En cualquier caso, desde el estudio nos aseguran que son conscientes de ello y la versi¨®n final, adem¨¢s de posibles cambios en este apartado, presentar¨¢ un tutorial aclaratorio.

Con lo que respecta a los controles nos referimos al desplazamiento de John, algo torpe y pesado. A menudo se quedar¨¢ atascado entre objetos, le costar¨¢ girar y se topar¨¢ con paredes invisibles. Nada que desquicie ni sea insoportable, ni mucho menos, pero s¨ª que podr¨ªa resultar m¨¢s fluido. Un ejemplo: en una azotea encontraremos una larga tuber¨ªa tirada en mitad del suelo y Blacksad no podr¨¢ pasar por encima de ella, sino que tendr¨¢ que rodearla por completa para seguir su camino. Lo notaremos especialmente cuando tengamos que repetir un escenario en busca de algo que nos hayamos dejado. En esos momentos este tipo de movimiento y ¡°problemillas¡± desgastan bastante.

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Cosas a¨²n por pulir

A nivel audiovisual, Blacksad: Under the Skin luce de esc¨¢ndalo. El salto a las tres dimensiones viene acompa?ada de un tono cartoon que le sienta de maravilla a personajes y escenarios. Echamos en falta algunas animaciones m¨¢s y una mayor expresividad facial, pero nada de eso evita que el t¨ªtulo entre por los ojos. Colorido y llamativo, hereda un dise?o muy inspirado. En lo sonoro la obra acompa?a con melod¨ªas de jazz su continuo homenaje al cine negro de ¨¦poca y las novelas polic¨ªacas. A falta de poner a prueba su cantidad y variedad, es una decisi¨®n acertad¨ªsima. Hemos de reconocer que en nuestras primeras horas con el t¨ªtulo hemos encontrado muchos problemas a nivel t¨¦cnico, con bugs importantes e idas y venidas del audio, pero es normal en este tipo de pruebas y queda tiempo por delante para solucionarlo y corregirlo antes del lanzamiento. Nada que deba preocuparnos... por ahora.

Primeras impresiones

Aunque lleva apuntando maneras desde su presentaci¨®n, cuando se adaptan obras de este calibre uno nunca puede fiarse. Sin embargo, Pendulo Studios ha demostrado que siente m¨¢s respeto y admiraci¨®n que nadie por Blacksad. Lo que hemos podido probar desprende amor por la novela gr¨¢fica y tiene un nivel enfermizo de referencias y detalles. Argumentalmente parece apasionante, otorga m¨¢s libertad y poder de decisi¨®n del que esper¨¢bamos y, qu¨¦ duda cabe, entra por los ojos. Queda por ver hasta d¨®nde llegan sus mec¨¢nicas, c¨®mo evoluciona el juego durante las horas siguientes y si termina de pulir algunos problemas menores a nivel t¨¦cnico y jugable. A pesar de ello y a apenas unos meses de su salida, las impresiones en torno a Blacksad: Under The Skin son muy positivas.

El juego, por cierto, llegar¨¢ el 26 de septiembre a PC, PlayStation 4, Xbox One y Nintendo Switch. Contar¨¢ con su propia edici¨®n especial, que incluir¨¢ una figura de resina de John Blacksad, un libro de arte y, por supuesto, una copia del t¨ªtulo.

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