Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don't Eat Flamingos
- PlataformaPC7
- G¨¦neroAventura
- DesarrolladorCelery Emblem
- Lanzamiento06/07/2017
- TextoEspa?ol
- EditorZerouno Games
An¨¢lisis, Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos
Una berenjena vampiro agente del FBI, un pueblo extra?o, habitantes extra¨ªdos de la mente de Tim Burton, ciervos mutantes y pollos ovni, ?qu¨¦ puede salir mal en este juego?
An¨¢lisis Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos
El t¨ªtulo que tenemos hoy entre las manos es uno de esos proyectos indies que hacen honor al motivo por el que existieron, el de ofrecer aventuras que ninguna distribuidora se atrever¨ªa a publicar dada su tem¨¢tica o contexto narrativo. A lo largo de los veinte a?os que lleva en activo MeriStation han pasado por nosotros multitud de propuestas jugables que de una u otra manera nos han expuesto su historia desde el principio hasta el final de forma coherente. Hay algunos que hemos tenido que hilar fino para comprender lo que quer¨ªan contarnos mientras que con otros ha sido coser y cantar. Siguiendo con t¨¦rminos de costura, la aventura de la que os vamos a hablar ahora es como si bord¨¢ramos en punto vainica, algo dif¨ªcil de desarrollar en nuestras mentes pero que una vez completado el trabajo el resultado final es fant¨¢stico. Una pueblo lleno de misterios introducido en un videojuego en el que en todo momento no sabemos qu¨¦ puede ocurrir despu¨¦s por lo chocante que resulta todo.
Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos es un videojuego desarrollado por Celery Emblem, concretamente por el madrile?o Jacobo Estevez (Jacob Jazz). Lleg¨® a Steam Greenlight el pasado mes de noviembre y recibi¨® luz verde en tiempo r¨¦cord. El proyecto inicial fue presentado en El Zerouno, un evento mensual donde se re¨²nen profesionales del sector y aficionados a los videojuegos en el que los desarrolladores muestran a los asistentes sus creaciones. Los responsables de estas reuniones se lanzaron al agua para crear el sello Zerouno Games y apadrinaron este videojuego de dif¨ªcil escritura.
Una berenjena vampiro en apuros
Lanzado el pasado seis de julio para PC y Mac (dentro de poco llegar¨¢ tambi¨¦n a ordenadores con sistema operativo Linux), Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos nos cuenta la historia del agente del FBI Watracio Walpurgis, una berenjena vampira que mientras conduce por Albatros Road, fuma y habla por tel¨¦fono al mismo tiempo atropella a un ciervo mutante dejando su coche y m¨®vil maltrechos. No sabe si todo es producto del accidente o del alcohol pero un hombre de dios en el cuerpo de un castor maleducado que se hace llamar Timothy Gloster Jr. le da la bienvenida a Flamingo¡¯s Creek, un pueblo que solo se deja ver el 11 de marzo cada 25 a?os. Un pueblo que solo aparece en nuestras peores pesadillas.
Con este surrealista inicio de juego ya vaticin¨¢bamos que la aventura en cuesti¨®n iba a ser desternillante, loca y abstracta. Y todo esto sin conocer todav¨ªa a los habitantes del extra?o pueblo donde transcurre la historia, personajes con cierto toque a Tim Burton a cada cual m¨¢s bizarro que el anterior. Si a este batiburillo de esperpentos inclu¨ªmos wendigos, pollos ovnis, extraterrestes con cabeza de luna, un filtro VHS de la d¨¦cada de los 90 y un regusto a producci¨®n cinematogr¨¢fica de serie B, tenemos el juego m¨¢s loco que hemos probado en mucho tiempo.
Rompiendo esquemas
El videojuego en su mayor grueso se presenta en perspectiva cenital, como si de un juego de rol de la vieja escuela se tratase. De hecho Jacob Jazz ha declarado en m¨¢s de una ocasi¨®n que juegos como The Legend of Zelda: Link Awakening DX sirvieron como inspiraci¨®n a la hora de dar vida a su reto?o. Para la parte m¨¢s estramb¨®tica (la narrativa) se bas¨® en series televisivas como Twin Peaks (la ¨²ltima fase os sonar¨¢ mucho), Pesadillas de R.L. Stine o Bob Esponja, y creednos que hay un poco de todo entre sus bytes. Mientras que controlamos a Watracio en su labor de arreglar el coche y largarse de esa aldea de chiflados debemos recolectar monedas y descubrir los cinco coleccionables que podemos encontrar a lo largo de los 10 cap¨ªtulos. Hay rompecabezas por el medio, algunos rocambolescos pero todos de sencilla resoluci¨®n. Tambi¨¦n hay algo de plataformeo y de acci¨®n patrocinado por un paquete de tabaco que al fumarlo produce bolas de fuego con la que atacar a nuestros enemigos. Exploraci¨®n, tintes RPG, plataformeo, acci¨®n¡ ?algo m¨¢s? Pues s¨ª, Baobabs Mausoleum en su cap¨ªtulo cuatro altera la aventura para ofrecernos una jugabilidad en primera persona donde controlamos a nuestro morado amigo a trav¨¦s de un cementerio buscando a unos conejos (a la vez que damos caza a un ciervo dorado legendario) en un divertido minijuego. Ojo aquellas personas que sufran de cinetosis puesto que este nivel es bastante peligroso para los que padecen esta singular enfermedad.
La aventura se centra principalmente en escapar de Flamingo¡¯s Creek mientras hablamos con sus desvariados aldeanos pero poco a poco se va torciendo la cosa hasta llegar a un punto que Watracio no sabr¨¢ qu¨¦ hace all¨ª ni qu¨¦ debe hacer. ?Por qu¨¦ la aldea s¨®lo aparece cada 25 a?os? ?Qui¨¦n ese ese chico con cabeza de luna? ?Quienes son esos ciudadanos tan dementes? ?Qu¨¦ dram¨¢tico giro de los acontecimientos tomar¨¢ la historia? Tampoco podemos contar mucho de la misma dada su escasa duraci¨®n de apenas dos horas y la gracia del mismo est¨¢ en sorprender al jugador con cada conversaci¨®n y excentricidad que aparece en pantalla. Lo que s¨ª podemos deciros es que el pueblo cuenta con 64 habitantes y desde el principio se nos hace la pregunta de qui¨¦n ha sido el ¨²ltimo en llegar. Parece ser que el n¨²mero 64 es alguien importante en la historia y hasta aqu¨ª podemos leer. Hay humor a toneladas y cameos como el del director John Carpenter, as¨ª que en ese aspecto no os va a defraudar.
Pixelart noventero
Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos ha sido desarrollado bajo el siempre socorrido estilo visual pixelart. No es ni mucho menos el mejor representante en esta categor¨ªa gr¨¢fica y los personajes, sobre todo, cojean de tener pocos detalles pero el concepto en general es vistoso y entra por los ojos. Los escenarios por otra parte s¨ª est¨¢n repletos de detalles pero recicla bastantes elementos vistos en anteriores decorados, sin embargo y como ya hemos dicho el producto supera el aprobado con creces. Cuenta con una opci¨®n para aplicar al juego un filtro VHS noventero que transformar¨¢ nuestro monitor en una tele CRT que puede llegar a molestar pero como caracter¨ªstica extra no est¨¢ de m¨¢s.
En el apartado sonoro es bastante bueno y prescinde de las melod¨ªas chiptune que suelen acompa?ar a los juegos indie para deleitarnos con otras m¨¢s trabajadas e incluso temas vocales. La masterizaci¨®n de las mismas es exquisita y tienen una calidad tremenda, una l¨¢stima que solo tenga un pu?ado de ellas aunque esperamos que hayan m¨¢s en los vol¨²menes restantes. Lo peor de este apartado, sin duda, es el molesto ¡°cuac¡± habitual en las conversaciones y que proveniene del famoso cliente de chateo IRcap.
Los fallos que le vemos a esta deliciosa locura hecha videojuego se encuentran en su control, en su duraci¨®n y en lo dispersa que parece la historia. El primer punto b¨¢sicamente porque controlarlo con mando obliga a usar los anal¨®gicos y en ciertos momentos su control es algo inestable y r¨¢pido como para solventar los problemas que se nos proponen. Esto se soluciona utilizando el teclado en los momentos m¨¢s delicados. La duraci¨®n ya lo hemos comentado anteriormente, con apenas 2 horas de duraci¨®n (1:45h. nos ha costado a nosotros ver el cartel de continuar¨¢) apenas puedes discernir sobre qu¨¦ ocurre en el pueblo o en qu¨¦ l¨ªo se est¨¢ metiendo Watracio. S¨ª hay escenas donde vemos hacia donde ir¨¢ el t¨ªtulo pero te deja con ganas de m¨¢s. La extra?a forma de ser de los habitantes, el ciudadano 64, los ovnis, los asesinatos que ocurren en Flamingo¡¯s Creek, su particularidad de aparecerse cada 25 a?os y un mont¨®n de cosas m¨¢s conforman la tercera caracter¨ªstica negativa que le hemos visto a Baobabs Mausoleum Ep.1 Ovnifagos Don¡¯t Eat Flamingos. Demasiadas inc¨®gnitas para tan poca duraci¨®n que pueden hacer que el jugador se sienta algo perdido al completarlo.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.