After Us, an¨¢lisis de un plataformas muy personal

Son muchos los videojuegos que tratan de apelar directamente a las emociones del jugador, ya sea a trav¨¦s del guion, de la apuesta audiovisual o de las mec¨¢nicas de juego, aunque no son pocos los que fracasan en el intento o se quedan a medio camino de aquello que intentan transmitir. T¨ªtulos como los reconocidos Limbo o Inside de Playdead u otras apuestas como Spiritfarer, That Dragon, Cancer, What Remains of Edith Finch o Gris son solo algunos ejemplos exitosos de aquello que pretenden: apelar a las emociones. Y de ello saben un poco los barceloneses Piccolo Studio, que tras su emotivo Arise: A Simple Story, vuelven a la actualidad de la industria del videojuego con su nuevo lanzamiento, After Us -ahora de la mano de Private Division-, una aventura de exploraci¨®n y plataformas para PC, PS5 y Xbox Series X|S que, desde luego, no nos dejar¨¢ indiferentes tras terminar su conmovedora historia, un viaje lleno de matices y descubrimiento que nos llevar¨¢ a preguntarnos si vale la pena otorgar una segunda oportunidad a la humanidad.

Un viaje a trav¨¦s de lo que una vez fuimos

En After Us jugamos como el esp¨ªritu de la vida, Gaia, que adquiere la forma de una joven de larga melena blanca y gr¨¢ciles movimientos. Todo ello para desplazarnos a trav¨¦s de los recuerdos que lo que una vez fue la humanidad, un mundo abstracto y surrealista hecho con retazos de una ¨¦poca anterior, ya extinta, que quiz¨¢ merece una segunda oportunidad. O eso es lo que se pregunta Madre, que pretende recuperar la energ¨ªa vital a trav¨¦s de las almas de los animales que una vez poblaron la Tierra y que ahora no son m¨¢s que et¨¦reas formas de luz, un recuerdo de lo que en su d¨ªa fueron. Nuestra misi¨®n ser¨¢ ir descubriendo los diferentes recept¨¢culos para liberar sus almas y devolverlas al Arca de Madre. Y como no pod¨ªa ser de otra manera, nuestro viaje no ser¨¢ sencillo, aunque ni mucho menos imposible.

Y es que After Us se presenta como una aventura atmosf¨¦rica que basa su desarrollo en la exploraci¨®n y las plataformas, con ligeras concesiones al combate y a los rompecabezas, aunque muy en segundo plano. El coraz¨®n del juego es la forma en la que nosotros, como jugadores, nos relacionamos con el entorno y vamos descubriendo todos sus secretos mientras liberamos las almas de los seres vivos que tiempo atr¨¢s perecieron ante la voracidad de una humanidad sin frenos ni control, marcada por su relaci¨®n destructiva con la naturaleza. O eso es lo que interpretamos, ya que desde Piccolo Studio han aludido durante el desarrollo del juego a que cada jugador puede vivir y percibir After Us a su libre interpretaci¨®n.

Ante nosotros se nos plantear¨¢ una suerte de constelaci¨®n representada por los diferentes recept¨¢culos de animales que tendremos que ir liberando mientras viajamos por los diferentes mundos abstractos, en los que el crudo y los llamados Devoradores -representaci¨®n de lo peor de la humanidad- se han hecho con el control. Para combatir todas estas adversidades nos valdremos de las habilidades de nuestra ¨¢gil protagonista; y es que con el objetivo de ofrecer una experiencia de juego opuesta a Arise -su anterior trabajo, mucho m¨¢s pausado y contemplativo-, desde Piccolo han apostado por un personaje mucho m¨¢s ligero y din¨¢mico, con grandes capacidades de salto, capaz de alcanzar grandes velocidades a lo largo y ancho de los enormes mundos que se abrir¨¢n ante nuestros ojos.

Como decimos, el mensaje de After Us se hace con todo el protagonismo de la historia; y a pesar de que queda a interpretaci¨®n de cada uno, s¨ª se esfuerza en mostrar lo que podemos dejar como civilizaci¨®n si no cambiamos de rumbo. Todo ello potenciado con un fuerte componente animalista que nos sacar¨¢ los colores en determinadas secciones, fases que nos ponen bajo el foco de nuestros propios pecados. Pero volviendo a su propuesta jugable, Piccolo Studio apuesta por una aventura de exploraci¨®n y plataformas 3D con algunos toques de rompecabezas y combates aqu¨ª y all¨¢, aunque de forma t¨ªmida. El eje del juego reside en el avance a trav¨¦s de mundos de lo m¨¢s peculiares, unos m¨¢s pasilleros, otros verdaderamente amplios, en los que cumplir con diferentes tareas, siempre opcionales, a excepci¨®n de alcanzar el recept¨¢culo final de cada uno de ellos.

Dichas tareas extra residen en la b¨²squeda de otras almas de animales m¨¢s o menos escondidas y memorias encerradas en figuras humanas que encontraremos a lo largo y ancho de todos los niveles, oscura representaci¨®n de lo que fue una vez el ser humano. Para dar con ambos elementos, Gaia puede cantar para liberar unas mariposas et¨¦reas que nos indicar¨¢n la direcci¨®n de cada uno de estos elementos, blancas para unos y amarillas para otros. Otras acciones que podemos llevar a cabo son la posibilidad de liberar la naturaleza contenida en peque?as ra¨ªces amarillas o acariciar las almas de toda clase de animales que encontremos en nuestro camino. Aunque todo ello es opcional y no influye en el desarrollo de la aventura; eso s¨ª, los m¨¢s completistas querr¨¢n desenmara?ar todos sus secretos.

A nivel de jugabilidad, Gaia es capaz de moverse a gran velocidad, realizar saltos de dos alturas, caer despacio o realizar un dash, adem¨¢s de correr por paredes que lo permitan, deslizarse por cables o lanzar una esfera de energ¨ªa, ya sea para interactuar con los extras anteriormente descritos o deshacernos de los Devoradores que traten de darnos caza, como si fueran zombis hambrientos controlados por la oscuridad. M¨¢s all¨¢ de una dificultad que en ning¨²n momento nos pondr¨¢ contra las cuerdas, el reto de After Us recae en saber jugar con las habilidades de Gaia y aprender a controlar sus saltos, mucho m¨¢s ligeros de lo que podemos esperar. Adem¨¢s, contamos con la asistencia de un peque?o c¨ªrculo que nos marcar¨¢ la ca¨ªda del personaje antes de tocar suelo, aunque si caemos de grandes alturas, pereceremos, para regresar al punto de control inmediatamente anterior.

Uno de los aciertos del t¨ªtulo es que nos deja total libertad para afrontar la aventura como queramos, tomando un camino u otro, presentando bifurcaciones que nos dejan vivir el viaje a nuestro propio albedr¨ªo. Como peque?a cr¨ªtica, en algunos momentos no queda muy clara la direcci¨®n a tomar para alcanzar otros caminos de la constelaci¨®n, por lo que podemos estar dando vueltas sin ton ni son hasta dar con el camino adecuado. Otro elemento a tener en cuenta es que dicha libertad, en ocasiones, no deja muy claro el rumbo a mantener en ciertos niveles, lo que puede provocar cierta frustraci¨®n. Aunque con un poco de paciencia y sacando provecho de la movilidad de Gaia -y ciertos indicadores- podremos superar todos estos obst¨¢culos.

Surrealismo y reflexi¨®n

Si bien no destaca en t¨¦rminos de acci¨®n o plataformas, el juego se esfuerza por sorprendernos una y otra vez a trav¨¦s del dise?o de los escenarios y una imaginaci¨®n desbordante en todos y cada uno de ellos. En ciertos momentos, After Us nos deja estampas absolutamente arrolladoras en lo visual, sin ser en ning¨²n momento un prodigio t¨¦cnico. A mejorar, ciertos problemas de rendimiento que incluso pueden resultar molestos, puesto que alguna que otra bajada de framerate -incluso con congelaciones de entre uno y dos segundos- perjudican la experiencia; aunque a decir verdad, ocurre en momentos muy puntuales; no vendr¨ªa mal contar con algo m¨¢s de optimizaci¨®n, seguramente, a trav¨¦s de futuras actualizaciones. En este sentido, tenemos dos opciones gr¨¢ficas, una a 4K y 30 fps y otra a 2K y 60 fps. La c¨¢mara, situada en una posici¨®n m¨¢s bien elevada aunque totalmente libre, en ocasiones puede jugarnos tambi¨¦n malas pasadas.

Aunque donde m¨¢s destaca After Us es en su direcci¨®n art¨ªstica, con mundos donde el surrealismo, la originalidad y la cr¨ªtica como especie van de la mano para sorprender, una y otra vez, al jugador. Adem¨¢s, no se escatima en toda clase de efectos lum¨ªnicos y de part¨ªculas, con la explosi¨®n de naturaleza de Gaia que inunda la pantalla de vegetaci¨®n con un aspecto visual totalmente absorbente. Sobre su banda sonora, se apuesta por un estilo atmosf¨¦rico con melod¨ªas a base de sintetizadores, que juega con los altibajos de la acci¨®n mostrada en pantalla, dando un toque muy especial al conjunto, casi melanc¨®lico. Para completar el juego necesitaremos entre 8 y 10 horas, aunque si queremos encontrar todos sus coleccionables necesitaremos algo m¨¢s de tiempo.