Un hurac¨¢n de cambios en el Masters: ¡°Algunos hoyos intimidan menos¡±
El tif¨®n Helene, que azot¨® Georgia en septiembre, deja la vegetaci¨®n del Augusta National mermada, una de las comidillas en la previa del torneo.
No amenaz¨® en ning¨²n momento la viabilidad del Masters, porque por alguna extra?a raz¨®n, como si le diera apuro estropear semejante lienzo, el tif¨®n Helene, que azot¨® el sur de los Estados Unidos el pasado septiembre, no se ceb¨® especialmente con el Augusta National. S¨ª con la comunidad en la que se enclava el campo, que sufri¨® la p¨¦rdida de decenas de vecinos y da?os por valor de muchos miles de d¨®lares.
Pero lo cierto es que el paso de la tormenta se hace notar de alguna forma en la configuraci¨®n del campo, que ha perdido vegetaci¨®n. Se nota particularmente en salidas como la del hoyo 10, cuyo flanco izquierdo ha quedado desprovisto de varios de los pinos que lo poblaban, ofreciendo nuevas oportunidades de riesgo/recompensa a quienes quieran jug¨¢rsela. Esta es una de las comidillas en las horas previas al inicio del torneo. Del tema han hablado muchos jugadores, entre ellos Rory McIlroy, Chema Olaz¨¢bal, Fred Couples o Jon Rahm. La sensaci¨®n generalizada es que no va a cambiar significativamente la forma en que se juega el campo, pero s¨ª alguna estrategia puntual.
¡°Desde una perspectiva de los tees, hay un par que son menos intimidantes visualmente. Por ejemplo el del 10 (en la fotograf¨ªa que ilustra esta pieza), con algunos ¨¢rboles menos en la parte izquierda de la calle . Ah¨ª el objetivo siempre es la torre de televisi¨®n que hay bajando la colina. Normalmente no se ve, y ahora s¨ª. En principio parece que no hay que mover la bola tanto como antes¡±, contaba Rory durante su rueda de prensa previa. ¡°En el 3, ahora hay algo m¨¢s de espacio por la derecha si quieres jugar el driver. Antes molestaban un par de ¨¢rboles que ya no est¨¢n¡±, completaba.
¡°Sinceramente no s¨¦ por qu¨¦, pero creo que el campo se ve mejor ahora. Se ve mucho m¨¢s espacio en la salida del 9 y creo que es guay. Puedes ver c¨®mo pega la gente ah¨ª desde el 1. Faltan muchos ¨¢rboles. Pueden que hayan perdido una cantidad importante de ¨¢rboles en unas diez zonas. Y aun as¨ª sigue habiendo un mont¨®n, por el amor de Dios¡±, apuntaba Couples, alguien que a sus 65 a?os conoce aquello como la palma de su mano.
¡°Donde m¨¢s lo he notado es en Magnolia Lane (la famosa entrada a la casa club)¡±, aseguraba Rahm en su rueda de prensa el martes, antes de salir a jugar los nueve segundos con el resto de espa?oles. ¡°No pude jugar el lunes por la lluvia, pero me dijeron que ahora puedes intentar una bola abierta alta por la izquierda en el tee del 10. La verdad que no me lo creo (risas). Y lo cierto es que seguramente por decir esto ma?ana haya un ¨¢rbol nuevo a la izquierda del tee¡±, a?ad¨ªa entre las risas de los presentes.
Nuevos greenes
¡°Creo que no va a afectar mucho a c¨®mo se juega el campo. Obviamente algunas de las vistas son diferentes. El campo est¨¢ m¨¢s abierto en algunas partes. Pero no creo que afecte demasiado¡±, terciaba Olaz¨¢bal, que aportaba algunos descubrimientos propios en las ca¨ªdas de los greenes: ¡°El del 16 es nuevo. Las ca¨ªdas son algo distintas, especialmente en la parte trasera y en la delantera derecha, que ya no tienen pendientes tan severas. Cuando la bandera est¨¦ corta por la izquierda, si te pasas, antes ten¨ªas un putt bastante recto, y ahora cae un poco de izquierda a derecha¡±. Aunque sea de forma imperceptible, y en este caso un tanto involuntaria, Augusta siempre cambia.
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