Uruguay planta cara y asusta a una Francia expeditiva
Los sudamericanos amenazan con la sorpresa ante los anfitriones, que s¨®lo resolvieron el partido en los minutos finales. Francia consolida el liderato del grupo.

Por momentos, Uruguay sembr¨® el p¨¢nico en Lille. Los Teros, un equipo que crece a pasos agigantados en los ¨²ltimos a?os, metieron el miedo en el cuerpo a Francia en el partido que abri¨® la segunda jornada del Mundial. Los anfitriones, impacientes y frustrados por momentos, acabaron por hacer valer su condici¨®n de favoritos para imponerse por 27-12, aunque los elogios fueron a parar al combinado sudamericano.
Por primera vez en sus cinco participaciones mundialistas, Uruguay present¨® una plantilla compuesta en su totalidad por jugadores profesionales, que consiguieron poner en apuros a una de las grandes candidatas al t¨ªtulo. Los de Esteban Meneses aterrizaron en Francia so?ando en grande, con el objetivo de pelear con Italia el tercer puesto del grupo A y as¨ª conseguir billete autom¨¢tico al pr¨®ximo Mundial. Este jueves, demostraron tener rugby de sobra para lograrlo, y eso que en la previa el seleccionador uruguayo explic¨® que se tomaban este duelo como una preparaci¨®n para el que es su objetivo real.
Sin ning¨²n tipo de complejo, los Teros se plantaron en el Pierre-Mauroy con una propuesta valiente. Nunca se hab¨ªan enfrentado al primer equipo franc¨¦s, y apenas necesitaron seis minutos para anotar su primer ensayo a trav¨¦s de Freitas, que aprovech¨® un desajuste defensivo franc¨¦s. Lille, enmudecida. Aunque solo dur¨® unos minutos, porque Antoine Hastoy, una de las 12 novedades en la alineaci¨®n de Fabien Galthi¨¦ (dio descanso, entre otros, a Antoine Dupont), anot¨® la primera marca de su carrera con el XV del Gallo. La sorpresa, r¨¢pidamente tumbada.
RESUMEN
Ensayos: Hastoy (11¡¯), Mauvaka (54¡¯), Bielle-Biarrey (72¡¯)
Conversiones: Jaminet (12¡¯, 55¡¯, 73¡¯)
Golpes: Jaminet (3¡¯, 14¡¯)
URUGUAY (5+7): Sanguinetti, Pujadas, Peculo, Aliaga, Leindekar, Ardao, Civetta, Diana, Arata, Etcheverry, Freitas, Vilaseca, Inciarte, Basso y Amaya ¡ª Tambi¨¦n jugaron¡ª Gattas, Dotti, Deus, Bianchi, Ben¨ªtez, Ormaechea, Piussi y Berchesi.
Ensayos: Freitas (6¡¯), Amaya (52¡¯)
Conversiones: Etcheverry (53¡¯)
Estadio: Pierre-Mauroy de Lille. Lleno.
?rbitro: Ben O¡¯Keefe, neozeland¨¦s. Sac¨® tarjeta amarilla a Taofifenua (28').
Uruguay no renunci¨® a la batalla f¨ªsica, aunque ese fue el aspecto en el que se evidenci¨® la diferencia de nivel entre ambos equipos. Los locales consiguieron poner algo de tierra de por medio gracias a los pies de Jaminet, aunque Uruguay nunca se descolg¨®. De hecho, s¨®lo una dudosa decisi¨®n del TMO (el videoarbitraje), que vio obstrucci¨®n en un se?uelo de Inciarte, impidi¨® a los sudamericanos adelantarse de nuevo. Y, minutos antes, Taofifenua se libr¨® de la tarjeta roja por un duro placaje con el hombro sobre la cabeza de Arata.
La valent¨ªa de Uruguay durante todo el partido, con un atrevido juego a las manos (que en ocasiones fue su condena por los numerosos errores) descentr¨® a Francia, que, como ya sucedi¨® ante Nueva Zelanda, mostr¨® una versi¨®n a medias. El ensayo de Amaya tras el descanso, en el que esta vez s¨ª funcion¨® un se?uelo, volvi¨® a hacer temblar a los 50.000 espectadores que abarrotaban el estadio de Lille, ciudad a la que regres¨® un partido mundialista por primera vez desde 1991. Aunque la historia de la primera mitad se repiti¨®, y el Gallo respondi¨® de inmediato: Mauvaka aprovech¨® un desafortunado pateo de Etcheverry, que rebot¨® en un compa?ero y le dej¨® el ensayo en bandeja.
Pese a la ventaja, Francia no pudo respirar tranquila hasta el minuto 73, cuando Bielle-Biarrey sentenci¨® con otro ensayo. Antes, el Gallo estaba cometiendo demasiadas imprecisiones, seguramente por la tensi¨®n que les hab¨ªa causado Uruguay. Los Teros se quedaron a las puertas de su cuarta victoria en un Mundial, pero reciben todos los honores y salen muy reforzados de cara a su objetivo, el tercer puesto de un grupo A en el que Francia se consolida como l¨ªder. Dos de dos victorias para los anfitriones, aunque demasiadas sombras y pocas luces en un torneo en el que tienen deberes con la historia.