Ricardo Ten y Sergio Garrote ti?en de oro Par¨ªs

La vida te quita, pero tambi¨¦n te da. Cuando Ricardo Ten (Valencia, 1975) se cay¨®, como consecuencia de un golpe de calor, yendo tercero en la prueba de contrarreloj en Tokio 2020, no imagin¨® lo que el destino le deparar¨ªa. Se le qued¨® eso clavado como un pu?al, pero este mi¨¦rcoles la herida ha sanado con un oro. ¡°En Tokio pasaron un mont¨®n de circunstancias que se nos escapaban a nosotros. Aqu¨ª hab¨ªa que aprovechar la oportunidad. Esta prueba ha salido a las mil maravillas¡±, admiti¨® feliz en zona mixta, tras amarrar la medalla que le faltaba en el ciclismo.

Este nuevo metal agranda la leyenda de Ricardo Ten, que se ha colgado cuatro oros, dos platas y cinco bronces en siete Juegos. De momento, en Par¨ªs lleva tres. A este oro en contrarreloj C1 le suma un bronce en persecuci¨®n ¡ªla primera espa?ola de esta cita¡ª y una plata como parte del equipo de velocidad. Triplete de color. Es la cuarta presea que consigue subido en una bici, puesto que las siete anteriores se fraguaron en la piscina. Su h¨¢bitat hasta que perdi¨® la motivaci¨®n. Hasta que el ciclismo le devolvi¨® las ganas. ¡°Quer¨ªa tener nuevos retos y cambiar de disciplina me hac¨ªa especial ilusi¨®n. Ha sido una temporada de ensue?o, no se puede pedir m¨¢s. Hay que seguir disfrutando y, en el momento en que eso no pase, habr¨¢ que dejarlo o volver a cambiar¡±, corrobor¨®.

Ricardo Ten, que bien podr¨ªa apellidarse Eleven (11), complet¨® el recorrido en un tiempo de 20:39 y sac¨® 38 segundos al alem¨¢n Michael Teubey en 39 al polaco Zbigniew Maciejewski. ¡°La realidad ha superado, por mucho, las expectativas que ten¨ªa puestas en estos Juegos¡±, confes¨® el valenciano, a quien su celebraci¨®n se le solap¨® con la de su compa?ero Sergio Garrote. Otro hombre de oro.

Sergio Garrote (Barcelona, 1979), por su parte, se impuso en la contrarreloj en handbike H2 al italiano Luca Mazzone y al franc¨¦s Florian Jouanny con un tiempo de 24:33.71 y revalid¨® su corona. Aquella que consigui¨® en esta misma prueba durante su debut en unos Juegos, los de Tokio 2020. No tiene rival. Su hambre le mantiene en la cima. Eso, precisamente, fue lo que le impuls¨® a seguir adelante despu¨¦s de sufrir un accidente laboral, mientras trabajaba en una obra, que le dej¨® una lesi¨®n medular y en silla de ruedas.

¡°La sensaci¨®n es incre¨ªble. Es el premio al trabajo, al sacrificio y al esfuerzo. Llevo desde abril concentrado con mi familia. D¨ªa tras d¨ªa he entrenado bajo nieve y bajo un sol infernal, en altura y a nivel del mar. Lo he hecho todo para llegar aqu¨ª¡±, dijo con la voz rota de la emoci¨®n y las l¨¢grimas asom¨¢ndole por los ojos. Se ha vaciado. ¡°No he bajado los brazos en ning¨²n momento, mi ¨²nico instinto fue pedalear hasta el final como si se tratase de un le¨®n en busca de su presa¡±, cont¨®. En muchos momentos, su gasolina fue escuchar a sus compatriotas gritarle: ¡®Vamos, Garrote¡¯. ¡°Es mi grito de guerra cuando se te acaban las fuerzas y crees que no puedes m¨¢s¡±, solloz¨®.

El catal¨¢n ahora aguarda la ruta, donde consigui¨® un bronce en los pasados Juegos. No est¨¢ saciado y eso que este ciclo se ha dado un buen fest¨ªn. Sac¨® un oro y dos bronces en el Mundial de Baie-Comeau en 2022, por no hablar de 2023, a?o en que se llev¨® una plata en la Copa del Mundo de Maniago y un oro en la de Huntsville, para despu¨¦s ampliar su palmar¨¦s con el primer puesto en la contrarreloj en el Mundial de Glasgow. Adem¨¢s, le ha dado tiempo a formarse y ha cursado Medicina y Criminolog¨ªa. Su ambici¨®n y su talento tambi¨¦n son dignos de estudio.

Eduardo Santas fue plata y Dami¨¢n Ramos, bronce

El ciclismo fue sobre ruedas este mi¨¦rcoles y Espa?a aument¨® su bot¨ªn gracias a la plata de Eduardo Santas en la contrarreloj categor¨ªa C3, en la que el espa?ol se situ¨® s¨®lo por detr¨¢s del franc¨¦s Thomas Peyroton-Dartet, y al bronce de Dami¨¢n Ramos en la categor¨ªa C4, que no pudo superar a los franceses K¨¦vin Le Cunff y Gatien Le Rousseau.

Eduardo Santas (Tarazona, Zaragoza, 1989) forma parte de una saga de ciclistas. Su abuelo, su padre y su hermano le inculcaron esa pasi¨®n por la bici que se tradujo en un bronce en R¨ªo 2016 en la prueba de velocidad por equipos. Eduardo, que sufre una par¨¢lisis cerebral por culpa de una varicela siendo ni?o, se qued¨® a las puertas del podio con un cuarto puesto en persecuci¨®n individual de 3.000 metros y un quinto en la contrarreloj de ciclismo en ruta de Tokio 2020. De ah¨ª que se haya sacado la espina y disfrutado de una plata que le sabe a oro.

Por su parte, Dami¨¢n Ramos (A Coru?a, 1986) tambi¨¦n lleva el deporte en vena. Fue profesional del pirag¨¹ismo, llegando a formar parte de la Selecci¨®n entre 2009 y 2011, con la que roz¨® la participaci¨®n en Londres 2012. Sin embargo, una ca¨ªda desde 30 metros de altura durante una competici¨®n de monta?a en 2014 le oblig¨® a cambiar de planes. Reorient¨® su carrera hacia el ciclismo, donde se ha estrenado en unos Juegos con un bronce.