Platos fuertes sin sabor
Los principales partidos de la primera jornada del Mundial de rugby en Francia se resuelven con una gran desigualdad y poca emoci¨®n.
La primera semana de competici¨®n en el Mundial de rugby en Francia se present¨® con un men¨² degustaci¨®n plagado de partidos entre selecciones muy potentes. Promet¨ªa mucho la primera jornada, y es que en los cuatro grupos hubo un duelo que enfrent¨® a dos potencias planetarias. Sin embargo, los platos fuertes estuvieron poco aderezados, y la emoci¨®n anticipada se qued¨® a medias. Los aspirantes a levantar la Copa Webb Ellis que perdieron lo hicieron dando una imagen muy negra, y los que se anotaron el triunfo lo hicieron, por lo general, sin un brillo excesivo.
Esta m¨¢xima la ejemplific¨® a la perfecci¨®n el partido inaugural del torneo, que enfrent¨® a la anfitriona, Francia, y a la todopoderosa Nueva Zelanda. Dos selecciones que bien podr¨ªan cruzarse en la final del Mundial, pero que acabaron por entregar un partido insulso, falto de emoci¨®n y con un resultado que acab¨® por ser abultado. Los All Blacks, irreconocibles, no fueron el dolor de muelas habitual, y el Gallo se acab¨® imponiendo con lo justo. Ni siquiera apareci¨® su faro, Antoine Dupont, en un espect¨¢culo incompleto.
Similar fue lo vivido en el Vel¨®dromo de Marsella con los dos grandes partidos del fin de semana. En el encuentro entre Argentina e Inglaterra, los Pumas no comparecieron y cayeron en la trampa de los ingleses, que se bastaron de los pies para ganar a pesar de jugar con uno menos desde el minuto 3. Tampoco dio la talla Escocia en su duelo frente a Sud¨¢frica, muy atenazados ante unos vigentes campeones que fueron una roca.
La emoci¨®n la puso el ajustado final entre Gales y Fiyi, con los oce¨¢nicos desperdiciando una oportunidad de oro. Otras candidatas, como Irlanda o Australia, vencieron con solvencia, aunque los segundos, el equipo m¨¢s joven del torneo, sufrieron por momentos ante la delantera georgiana. Queda Mundial para que todo mejore.