Marta Franc¨¦s: ¡°La medalla ser¨ªa un premio a la vida¡±
La triatleta ha encontrado en el deporte esa medicina para sanar de todos los golpes que ha recibido: el bullying, el c¨¢ncer, una agresi¨®n machista... Ninguno ha podido con esta hero¨ªna.
Su vida ha sido una continua carrera de obst¨¢culos, pero las ca¨ªdas la han hecho m¨¢s fuerte. Marta Franc¨¦s (Puertollano, Ciudad Real, 1995) tuvo que madurar a pasos agigantados por la adversidad y siempre encontr¨® en la familia a su refugio. Martita, como la llaman en casa, vio en el deporte la oportunidad de evadirse de los problemas y de curar sus heridas. El bullying, el c¨¢ncer, una discapacidad f¨ªsica derivada, una agresi¨®n machista, la depresi¨®n... son ya cicatrices. Por eso, se ve reflejada en algunas de las estrofas de Yo lo so?¨¦. Ella sue?a con una medalla, pero sobre todo con disfrutar de cada instante. De estos primeros Juegos de Par¨ªs. De la mujer que sigue de pie, pese a los golpes de la vida, como Ilia Topuria, que inspir¨® esta canci¨®n. El domingo 1 de septiembre, la triatleta tiene el suyo, pero ni las lluvias ni las condiciones del Sena le asustan porque ella ya ha vencido a la oscuridad en muchas ocasiones...
¡ªSu historia es de superaci¨®n a todos los niveles. Ya de ni?a vivi¨® una mudanza, un cambio de ciudad y de cole y la pesadilla del bullying.
¡ªCuando yo ten¨ªa tres a?os nos trasladamos de Puertollano a Cartagena por el trabajo de mi padre. Nada m¨¢s llegar sufr¨ª bullying. Algo bastante com¨²n. Me tuvieron que cambiar de instituto porque me amenazaban, me pegaban, tiraban mis cosas al ba?o... En el segundo centro se corri¨® la voz, porque es una ciudad muy peque?a, y tambi¨¦n me dejaron de lado. A los 16 a?os me detectaron un tumor en el cerebelo y me dio un respiro salir de all¨ª un a?o...
¡ªEs duro sentir alivio por algo as¨ª, ?qu¨¦ consejo le dar¨ªa a quienes est¨¢n pasando por lo mismo?
¡ªTodos en clase tuvimos a alguien con quien se met¨ªan, pero nadie pens¨® en que esa persona lo pas¨® fatal. Esa persona era yo. Debemos hablar del tema. La soluci¨®n es que el chico o la chica que lo sufra no se calle y sus compa?eros, tampoco.
¡ª?Qu¨¦ sinti¨® cuando le comunicaron que ten¨ªa c¨¢ncer?
¡ªMe lo detectaron con 16 a?os y, como me crec¨ªa, me tuvieron que operar de urgencia. La primera vez no sali¨® bien porque no pudieron limpiar, as¨ª que hubo que esperar para volverme a abrir. La segunda vez sali¨® bien, pero me dej¨® una discapacidad. No sab¨ªa el grado, porque no pod¨ªa mover mi cuerpo. S¨®lo la boca y los ojos. El lado izquierdo no me respond¨ªa para nada. A los veinte d¨ªas de estar ingresada, el m¨¦dico me dijo que mejor saliera del hospital para no pillar una bacteria. Ped¨ª a mis padres ponerme de pie y no pod¨ªa. No ten¨ªa equilibrio. No sab¨ªa caminar y ah¨ª me di cuenta de la gravedad. Mi objetivo a partir de ah¨ª fue volver a ser aut¨®noma. Todos los d¨ªas me pon¨ªa a dar paseos por el pasillo de casa con la ayuda de mis padres y, a los dos meses, logr¨¦ caminar sola. A los seis, trotar. El cirujano dijo literalmente que era un milagro, porque nunca hab¨ªa visto una recuperaci¨®n as¨ª.
¡ª?Qu¨¦ explicaci¨®n le encuentra?
¡ªMe lo plante¨¦ como un reto para el d¨ªa a d¨ªa. No me esperaba que fuera tan bien. Gracias al deporte tuve la mentalidad de superaci¨®n, trabajo y esfuerzo y comprob¨¦ que el cuerpo siempre pod¨ªa m¨¢s. Los palos me ayudaron. Soy fuerte mentalmente desde ni?a, madur¨¦ muy pronto y mis padres siempre estuvieron a mi lado. Al 101%.
¡ªTambi¨¦n le toc¨® vivir un episodio de violencia machista...
¡ªFue en 2018. Igual que sucede con el bullying hay que contarlo para erradicarlo. Estaba en tercero de carrera (Ciencias de la Actividad F¨ªsica y el Deporte) y nos fuimos de fiesta para celebrar el final del curso. Yo no bebo, as¨ª que compr¨¦ en un chino Aquarius o Coca Cola. S¨®lo recuerdo que amanec¨ª en otro piso distinto y ten¨ªa heridas y dolor. Fue una violaci¨®n m¨²ltiple de dos hombres que me hab¨ªan drogado. A ra¨ªz de eso, ca¨ª en una depresi¨®n. Lo denunci¨¦ y se archiv¨® el caso al a?o. Me lo comunicaron en una carta certificada. Es algo que me ha dejado muy marcada. De hecho, sigo en tratamiento.
¡ªSu vida se par¨®. El deporte se acab¨®...
¡ªMi vida era el deporte. Yo era nadadora y entrenaba en el CAR con la Selecci¨®n espa?ola. Ten¨ªa que ir al Europeo, pero no fui a entrenar dos meses. Me pasaba los d¨ªas encerrada en el ba?o llorando. Cuando decido dar el paso me hab¨ªan quitado la licencia. Me recomendaron denunciar y dije que no. En comparaci¨®n, este problema con el otro era una tonter¨ªa. Me fui a una piscina p¨²blica por mi cuenta y nadaba sola. Fueron mis compa?eros y mi ex quienes me propusieron el triatl¨®n para que mi cabeza estuviera ocupada. Me ense?aron a montar en bici desde cero y aprend¨ª a pedalear con unos ruedines, como los ni?os peque?os. De peque?a s¨ª sab¨ªa, pero tras la operaci¨®n me daba miedo por mi falta de equilibrio. Despu¨¦s, trot¨¦ como pude y acab¨¦ mi primer triatl¨®n (una Copa del Mundo) con un bronce. Ah¨ª me dije, he descubierto mi deporte.
¡ª?Qu¨¦ papel jugaron sus padres, Fernando y Marta, en todo esto?
¡ªCon lo del bullying me un¨ª mucho a ellos. Les cuento todo. No me cuesta decirles las cosas, pero con la agresi¨®n estaba en shock y, cuando me di cuenta, me dio un ataque de ansiedad. No pod¨ªa hablar. A mi madre le ense?¨¦ el cuerpo en el ba?o y me dijo que me hab¨ªan violado. Era domingo. Ella llam¨® a mi padre y recuerdo su imagen caminando por el pasillo. Pasillo para delante. Pasillo para atr¨¢s. No hablaba, estaba como perdido. Me dijo que me vistiese para irnos al hospital. Estuve en tres diferentes porque no sab¨ªan qu¨¦ ten¨ªan que hacer. Ya en La Paz me comentaron el protocolo. No pod¨ªan examinarme hasta que hubiera una denuncia, dado que es obligatoria la presencia policial. Fue un m¨¦dico el que me anim¨® a denunciar, por m¨ª y por otras mujeres. Me pas¨¦ cuatro horas en comisar¨ªa y luego fui al hospital para que me examinara un forense para tomar muestras. Ahora lo tengo bastante superado, pero mi pilar fueron mis padres. Ellos son los que m¨¢s me han aguantado... Una depresi¨®n no se sabe lo que es hasta que se tiene. Es no querer vivir, no encontrar sentido en nada... Y quien m¨¢s lo sufre es quien m¨¢s te quiere. Me encerraba llorando en el ba?o. No quer¨ªa hablar. Ahora que estoy en Par¨ªs tengo claro que si gano se lo dedicar¨ªa a ellos...
¡ª?Qu¨¦ ha aprendido de todo lo que le ha pasado?
¡ªHe aprendido a vivir y a disfrutar de lo que tenemos hoy porque no sabemos lo que ocurrir¨¢ ma?ana. Soy m¨¢s emp¨¢tica y tengo claro que hay que quererse y nunca hacer da?o a nadie.
¡ª?Ser¨ªa una medalla un regalo de la vida despu¨¦s de tanto dolor?
¡ªLo he pensado... Es como la canci¨®n de Omar Montes y Saiko, la de Yo lo so?¨¦, que tiene una letra preciosa. Me la tat¨²o como gane (risas). La medalla ser¨ªa un premio a la vida, aunque ya s¨®lo estar aqu¨ª lo es. Estoy muy orgullosa de mi historia.