La ruina de un jugador de rugby por 514 kilos de coca¨ªna por valor de 100 millones
El jugador de la National Rugby League Jamil Hopoate fue condenado a tres a?os y nueve meses de c¨¢rcel, de los que deber¨¢ cumplir dos a?os en prisi¨®n.
La vida le ha dado un giro de 180 grados al ex jugador de rugby league Jamil Hopoate despu¨¦s de que este jueves haya sido condenado a tres a?os y nueve meses de prisi¨®n, de los que deber¨¢ cumplir dos a?os y tres meses encerrado en la c¨¢rcel (el resto de la pena estar¨¢ bajo libertad condicional) por su implicaci¨®n en una trama de importaci¨®n de drogas a gran escala.
Hopoate, hijo del tambi¨¦n exjugador y exboxador John Hopoate, y que confes¨® que ten¨ªa adicci¨®n a las drogas, al alcohol y a los juegos de azar, fue detenido en mayo de 2021 tras subirse a un cami¨®n con cerca de 514 kilos de coca¨ªna valorados en 154 millones de d¨®lares australianos (cerca de 99 millones de euros) despu¨¦s de que la polic¨ªa cambiase varios paquetes de coca¨ªna verdaderos procedentes de Londres por otros falsos para poder perseguir el cargamento completo.
En su declaraci¨®n ante el tribunal Hopoate confes¨® que en ese momento esa oferta era ¡°como un cuento de hadas¡± y que el dinero que sacar¨ªa por ello le permitir¨ªa pagar las deudas que ten¨ªa con familiares y amigos adem¨¢s de seguir gast¨¢ndolo en su adicci¨®n al juego. Sin embargo el juez Sharron Norton destac¨® que la investigaci¨®n revel¨® que la recompensa para Hopoate por ese env¨ªo s¨®lo ser¨ªa de 10.000 d¨®lares australianos y que no habr¨ªa recibido dinero de la potencial venta de esa coca¨ªna.
No es el primer problema de Hopoate con la justicia, ya que en 2021 el exjugador de rugby estuvo cerca de ir a la c¨¢rcel por un delito de violencia dom¨¦stica contra su esposa de los que se declar¨® culpable y por los que fue castigado con 12 meses de servicio a la comunidad, una pena que incumpli¨® y por lo que ingres¨® en prisi¨®n durante tres meses. Una prisi¨®n que Hopoate visitar¨¢ de nuevo despu¨¦s de que un negocio de ¡®cuento de hadas¡¯ se terminase convirtiendo en pesadilla.