La campeona ol¨ªmpica ya no es rival para Carolina Mar¨ªn
La espa?ola supera a Chen Yu Fei, oro en Tokio, por tercera vez seguida y alcanza las semifinales en el All England Open, este s¨¢bado contra Tai Tzu Ying.
La Copa de Maestras, celebrada en diciembre, supuso un punto de inflexi¨®n para Carolina Mar¨ªn. La espa?ola, que echaba el cierre a su primera temporada completa tras destrozarse la rodilla izquierda (rotura del ligamento cruzado y los meniscos interno y externo), super¨® una de las barreras mentales que ten¨ªa pendientes desde su vuelta a la competici¨®n. Antes de caer en la final, contra una Tai Tzu Ying (3? del mundo) con la que se medir¨¢ este s¨¢bado en semifinales (sobre las 19:00, por BWF TV), la campeona ol¨ªmpica gan¨® en d¨ªas seguidos a Chen Yu Fei, actual n¨²mero 2 y oro en Tokio. Este viernes, en el All England Open, uno de los torneos m¨¢s prestigiosos del circuito (como un Grand Slam de tenis), Carolina sum¨® su tercera victoria consecutiva contra la jugadora china (21-17 y 21-15 en 55 minutos), con la que hab¨ªa perdido en sus primeros cuatro duelos tras la lesi¨®n. Ya es cosa del pasado. Y el futuro, con los Juegos de Par¨ªs a cuatro meses, se ti?e de ilusi¨®n.
En el presente, eso s¨ª, siempre hay que sudar. Desde bien temprano, su entrenador, Fernando Rivas, empez¨® a dar indicaciones a una Carolina despistada por las corrientes de aire, que en el primer parcial empujaban los volantes sutilmente hacia la derecha de la espa?ola. Sus golpes, muy ajustados, se marchaban por mil¨ªmetros. O entraban por los mismos. Prueba de ello fue el challenge que pidi¨® y gan¨® para poner el 3-4, un impulso para liderar por primera vez el marcador, con un 5-4 que lleg¨® a trav¨¦s de una escena poco habitual: a Chen, que se estir¨® para salvar un punto a ras de suelo, se le escap¨® la raqueta. Fue, seguramente, el ¨²nico error, si es que as¨ª se le puede llamar, en unos primeros minutos de igualdad absoluta. Mar¨ªn, un punto por delante al llegar al primer par¨®n (11-10), atacaba con algo m¨¢s de colmillo y la jugadora china, de desplazamientos vertiginosos, parec¨ªa capaz de tapar todos los agujeros. S¨®lo lo parec¨ªa.
Con doce enfrentamientos directos en la mochila (ahora, el cara a cara, est¨¢ igualado), el factor sorpresa cotizaba alto. Carolina y Chen, que se midieron por primera vez en 2018, cuando la espa?ola a¨²n no hab¨ªa pasado por ninguno de sus dos calvarios (la otra rotura de cruzado, en la rodilla derecha, fue en 2019), se conoc¨ªan y se reconoc¨ªan en un primer set que ¡®Caro¡¯ dinamit¨® con un parcial de cuatro puntos seguidos con el que pas¨® del 15-15, el en¨¦simo empate en la manga, al 19-15. El tir¨®n, que fue celebrando con gritos de decibelios crecientes, lleg¨® gracias a un gran dominio en la red y a base de golpes cruzados en posiciones avanzadas. Fue la f¨®rmula para ganar, aunque con susto por el camino.
Un despiste y grandes sensaciones
La segunda manga, que Carolina empez¨® a toda m¨¢quina, con un parcial de 10-1, fue un choque de emociones. De ese inicio arrollador a un 12-12 inquietante. La familia de la onubense, animando en las gradas, volv¨ªa a sufrir. Fernando Rivas, tras ella, le recordaba que no pod¨ªa bajar la intensidad. Y Carolina, obediente como es, le hac¨ªa caso. Volv¨ªa a derribar el muro. Adem¨¢s, para terminar con unas buenas sensaciones en aumento, dando continuidad al d¨ªa anterior. ¡°Ha sido muy importante demostrarle a Chen Yu Fei desde el principio que iba a tener un partido muy duro. Despu¨¦s de despistarme un poco y perder esa ventaja en el segundo set, ha sido importante mantener la calma y confiar en que pod¨ªa¡±, analiz¨® la espa?ola tras el partido. Con un parcial de tres puntos seguidos y a base de remates muy profundos y a la l¨ªnea, se volvi¨® a erigir sobre la vigente campeona ol¨ªmpica, a la que quiere destronar en Par¨ªs.