SALTOS DE ESQU? | 4 TRAMPOLINES
Hoerl arrasa en Innsbruck y Kobayashi es nuevo l¨ªder del Cuatro Trampolines
El japon¨¦s vuelve a terminar segundo, lo que le sirve para desbancar del liderato a un Wellinger que fue 5?. Primer triunfo de Hoerl en el Cuatro Trampolines.
Estaci¨®n de Bergisel, coraz¨®n del Tirol. La m¨ªstica de Innsbruck llegaba al Cuatro Trampolines. Y lo que en Alemania fueron sonrisas, en Austria fueron l¨¢grimas para la parroquia germana. Nada se perdona en una Tourn¨¦e que vivir¨¢ su cap¨ªtulo final el D¨ªa de Reyes en Bichofshofen con una situaci¨®n de lo m¨¢s emocionante. ?nicamente 4,8 puntos separan al nuevo l¨ªder de la competici¨®n, Ryoyu Kobayashi, de un Andreas Wellinger que se tuvo que conformar con ser quinto en territorio austriaco, donde la afici¨®n local estall¨® de j¨²bilo con la impresionante actuaci¨®n de Jan Hoerl. El de Bichofshofen firm¨® su primer triunfo en el Cuatro Trampolines para, de paso, terminar con once a?os de sequ¨ªa de Austria en Innsbruck (Gregor Schlierenzauer en 2013).
¡°Nunca sabes lo que puede pasar aqu¨ª. Los esqu¨ªes cambian constantemente. Es dif¨ªcil¡±, explicaba Philipp Raimund tras ganar su duelo de la primera manga, unas palabras que ejemplificaban a la perfecci¨®n lo particular de este trampol¨ªn de Innsbruck, el m¨¢s corto y, para mayor¨ªa de los saltadores, el m¨¢s complicado de toda la Tourn¨¦e. Con este delicado panorama, su compatriota y l¨ªder de la competici¨®n, Wellinger, part¨ªa con la presi¨®n de enmendar su discreta clasificaci¨®n del pasado martes (15?). Y el alem¨¢n no se arrug¨®: 132 metrazos. Eso s¨ª, las condiciones del viento eran muy favorables y perdi¨® algo m¨¢s de 10 puntos en la compensaci¨®n.
Las condiciones de vuelo siguieron mejorando y eso acostumbra a traducirse en grandes distancias. Lovro Kos, uno de los j¨®venes saltadores m¨¢s prometedores en la actualidad, consigui¨® aprovecharlo para aterrizar en los 135 metros, a solo tres del r¨¦cord del trampol¨ªn que desde 2015 sigue en poder de Michael Hayboeck. Autom¨¢ticamente, los jueces tomaron cartas en el asunto: se bajaba la puerta de salida (de la 11 a la 10).
Sin embargo, para delirio del p¨²blico local, eso no impidi¨® que Hoerl se fuese a los 134 metros. Tremendo. Con unos discretos Anze Lanisek y Stefan Kraft, que dijo definitivamente adi¨®s a sus opciones de pelear por el ?guila Dorada, quedaba por ver a Kobayashi. El japon¨¦s volvi¨® a ser una roca. Todo lo hizo bien: despegue, vuelo, telemark y distancia (128,5 m). Con mayor bot¨ªn de puntos de compensaci¨®n respecto a Wellinger, Ryoyu pasaba a ser l¨ªder virtual del Cuatro Trampolines por s¨®lo 7 d¨¦cimas de ventaja sobre el alem¨¢n. Quedaba la segunda manga¡
Era el turno de los nueve ¨²ltimos saltadores, y la acci¨®n se detuvo por m¨¢s de veinte minutos. Tras mucha deliberaci¨®n, los jueces decidieron compensar un cambio radical de las condiciones subiendo la salida dos posiciones. Quien mejor lo aprovech¨® fue Hayboeck, que se llev¨® el honor de firmar el salto m¨¢s largo del d¨ªa (135,5 m) y se asegur¨® el podio. Para los cinco ¨²ltimos en liza, se baj¨® una puerta (de la 13 a la 12)¡ y Wellinger ejecut¨® el que probablemente haya sido su salto m¨¢s discreto de la competici¨®n hasta ahora (126,5 m). Kobayashi, imperturbable, le super¨® con creces con 132 metros para rozar los 260 puntos, una barrera que s¨®lo super¨® un estelar Hoerl. Bichofshofen dictar¨¢ sentencia: primer ?guila Dorada para Wellinger o tercera de Kobayashi. Abr¨®chense los cinturones.
General del Cuatro Trampolines (3 de 4 pruebas)
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