Del metro a Roland Garros: ¡°?ramos dos colgados que poco a poco...¡±

Presenciar una sesi¨®n de fotos a Xak y Grazy es un m¨¢ster en breaking. Se escuchan palabras como freeze (mantener una posici¨®n est¨¢tica) o footwork (movimientos con los pies) constantemente. Se les puede ver totalmente bocabajo, manteniendo el cuerpo en horizontal sin tocar el suelo o compenetr¨¢ndose para que la c¨¢mara les congele en el aire. Y uno se empapa de todo lo que la disciplina implica, desde su vertiente deportiva a la cultural. ¡°Cuando pase el tiempo, nos abrazaremos y nos diremos: ¡®Con dos cojones, amigo¡¯. Estamos viviendo un camino muy bonito¡±, dice Graciel Stenio, Grazy como b-boy (as¨ª se conoce a los bailarines de breaking), mirando a Juan de la Torre, Xak, tras elegir las mejores fotos de la tarde. Para cualquier ciudadano de a pie, todas son impresionantes. Ellos, sin embargo, descartan la mayor¨ªa. ¡°Ese codo no me convence¡±, dice Xak, que recae en detalles t¨¦cnicos imperceptibles para los ne¨®fitos.

Cuidan el breaking con mimo. Llevan mucho tiempo haci¨¦ndolo. Xak tiene 36 a?os y Grazy, 35. Son j¨®venes empedernidos. ¡°Estoy m¨¢s fuerte que nunca. Me siento m¨¢s fuerte que nunca. Y nadie entrena como Xak. Ni los chavales de 18 a?os. Le veo d¨ªa a d¨ªa y digo: ¡®?Guau!¡¯. Adem¨¢s, en el breaking no todo es f¨ªsico. Esto no va de eso. Aqu¨ª tambi¨¦n cuenta lo que transmites, la experiencia que has ido acumulando y todo lo que has vivido¡±, explica Graciel, campe¨®n nacional de la Red Bull BC One. El pr¨®ximo s¨¢bado, podr¨ªa estar en la final mundial (tiene que pasar una previa, el Last Chance Cypher). El evento, de cuatro d¨ªas (empieza este mi¨¦rcoles), se celebra en Par¨ªs, con Roland Garros como epicentro. Acompa?¨¢ndole, siendo una de las caras m¨¢s reconocibles de Red Bull dentro de la disciplina, tambi¨¦n estar¨¢ Xak. Su en¨¦sima aventura juntos. De las calles y el metro, donde entrenaban en sus inicios, a una de las mayores mecas deportivas del mundo. ¡°?Guau!¡±, reitera Grazy.

Empezaron como rivales. Xak forma parte de la crew Arcopom y Grazy creci¨® en los Fusion Rockers. Fueron grandes responsables de importar esa cultura que, en la d¨¦cada de los 60, naci¨® en el Bronx neoyorquino. ¡°Est¨¢bamos en los grupos m¨¢s fuertes del momento y siempre nos ve¨ªamos en las finales. Quer¨ªa contestarle bien, pero no s¨®lo para ganarle. Cuando compet¨ªamos, pensaba: ¡®Quiero ser como ¨¦l¡¯. Creo que eso es lo que con los a?os ha hecho que despu¨¦s podamos tener una amistad, un respeto como rivales y lo que nos ha llevado hasta aqu¨ª¡±, recuerda Xak en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Madrid, donde entrenan desde que se anunciara el breaking como deporte ol¨ªmpico para los Juegos de Par¨ªs 2024 (en Los ?ngeles 2028, como se anunci¨® este lunes, no estar¨¢).

Desde entonces, el d¨ªa a d¨ªa de Grazy y Xak ha cambiado mucho. ¡°La adaptaci¨®n ha sido muy dif¨ªcil. Venimos de un mundo art¨ªstico, cultural, en el que todo es improvisado. Ahora, vivimos en un mundo muy poco flexible. Hay unos horarios, unas formas y tienes que adaptarte a unos profesionales y a una metodolog¨ªa. No solo es la parte t¨¦cnica, sino que tambi¨¦n la f¨ªsica, el mantenimiento del cuerpo, etc.¡±, detalla el segundo de ellos, bronce europeo este a?o. ¡°Tambi¨¦n han aparecido obst¨¢culos mentales y nuevas frustraciones que han requerido ayuda externa de los psic¨®logos. Antes, bajaba a entrenar cuando me apetec¨ªa y, si estaba cansado, al d¨ªa siguiente no lo hac¨ªa. Ahora, tienes un compromiso contigo mismo y tambi¨¦n con la meta que te has impuesto, que hace que te exijas mucho m¨¢s¡±, a?ade.

Lords Of The Floor y el CAR

En sus primeros compases, el breaking era una especie de receta secreta que s¨®lo se pod¨ªa transmitir en persona o a trav¨¦s de unos VHS escasos y dif¨ªciles de conseguir. Ese es el contexto en el que Grazy y Xak empezaron a forjarse. Lords Of The Floor (se?ores del suelo, en espa?ol), uno de los primeros eventos competitivos organizados por Red Bull, en 2001, lo cambi¨® todo. Sus batallas se empezaron a transmitir a una velocidad y una calidad nunca vistas. El breaking, de repente, se volvi¨® accesible desde casi cualquier punto del globo. ¡°Para la escena fue muy importante. Yo aprend¨ª con esos v¨ªdeos¡±, recuerda Grazy, muy agradecido con Red Bull. ¡°Mira d¨®nde estamos ahora. Flipo con su capacidad de proyecci¨®n hacia el futuro. No tuvieron miedo. Pusieron su logo cuando part¨ªamos de la nada y no nos han abandonado desde entonces¡±, destaca.

Una aut¨¦ntica revoluci¨®n para una disciplina cada vez mejor acogida tanto por el p¨²blico general, que antes la asociaba con el lado oscuro de la calle, como por la ¨¦lite deportiva. De ese 2001 al primer d¨ªa de Xak en el CAR, 20 a?os despu¨¦s, rodeado de atletas ol¨ªmpicos y facilidades de todo topo. El jefe de instalaciones del centro, Juan Jos¨¦ Yepes, le pregunt¨® al b-boy qu¨¦ necesitaba para entrenar. ¡°No pude ni contestar, porque jam¨¢s me lo hab¨ªa planteado¡±, dice Xak. ¡°Yo ven¨ªa aqu¨ª con dudas, por ver qu¨¦ nos ¨ªbamos a encontrar y c¨®mo nos iban a tratar, pero ese d¨ªa se me fueron todas. Me dijo que a ¨¦l le daba igual que jug¨¢ramos al baloncesto, fu¨¦ramos gimnastas, bailarines o tenistas. Su ¨²nica preocupaci¨®n era facilitarnos lo que necesit¨¢ramos para entrenar en las mejores condiciones¡±, sigue. Su primera respuesta fue sencilla: ¡°M¨²sica y un suelo¡±. Lords Of The Floor.

La llegada al deporte de alto rendimiento es el en¨¦simo giro dentro de dos historias de pel¨ªcula. Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada, Xak ejerci¨® como abogado hasta los 29 a?os, cuando rompi¨® con todo para dedicarse de lleno al breaking. Grazy, por su parte, ha trabajado en el Cirque du Soleil -?hasta escupiendo fuego!-, ha aparecido en videoclips de Melendi o El Canto del Loco e incluso ha tenido tiempo para escribir su propio libro, Manos Sucias. Antes de todo ello, ambos empezaron ¡°desde la nada¡±, como repiten una y otra vez. Sus primeros movimientos de breaking los aprendieron sin YouTube ni apenas internet. ¡°?Alguien ser¨ªa capaz de aprender sirtaki griego (un tipo de danza) con un solo v¨ªdeo y dedicar toda su vida a eso? Eso ¨¦ramos nosotros. Dos chavales, dos colgados que, poco a poco, hemos ido abriendo camino¡±, enfatiza Grazy. Un camino que va del metro a Roland Garros.

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