Nakamura roza la haza?a frente a Nepomniachtchi

Budapest acogi¨® en 1950 la primera edici¨®n del Torneo de Candidatos. Por aquel entonces, Manuel ?lvarez Escudero daba sus primeros pasos en el mundo del ajedrez. Hoy, 72 a?os despu¨¦s, el centenario jugador madrile?o fue el encargado de hacer el saque de honor en una jornada con cuatro tablas.

La historia del deporte ciencia es mucho m¨¢s antigua que Manuel. Incluso en el Chaturanga, el que para muchos es el padre del ajedrez, cualquier cosa pod¨ªa pasar en los 64 escaques. Una lecci¨®n que Manuel aprendi¨® hace d¨¦cadas y que Nakamura ha estado cerca de recordar a Nepomniachtchi en la quinta ronda del Candidatos.

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Asentado en el liderazgo de la competici¨®n y mostrando un nivel brillante, Nepomniachtchi emple¨® con negras su habitual Defensa Petrov. Nakamura sigui¨® la l¨ªnea que le dio la victoria en 2016 ante Akobian hasta que, en la jugada 14, el Gran Maestro ruso sorprendi¨® con la correcta Af8 (alfil f8).

¡°Cre¨ªa que la maniobra De4-g4 estaba cerca de la igualdad, pero quiz¨¢ la torre blanca de a2 cambia la valoraci¨®n¡±, expres¨® el ¨²ltimo retador en rueda de prensa. Nakamura alcanz¨® una posici¨®n muy superior, pero el apuro de tiempo no le permiti¨® profundizar en la variante vencedora. ¡°Ha sido un d¨ªa de suerte¡±, finaliz¨® Nepomniachtchi.

La partida m¨¢s s¨®lida del d¨ªa enfrent¨® a Firouzja y a Duda. El polaco, al igual que Nepo, jug¨® tambi¨¦n la Defensa Petrov. ¡°Buscaba una posici¨®n s¨®lida y tambi¨¦n que Alireza se sintiera algo presionado¡±, indic¨® el todav¨ªa invicto ajedrecista. No arriesg¨® m¨¢s de la cuenta el franc¨¦s, que ¡°necesitaba recuperar sensaciones tras la derrota del d¨ªa anterior¡±. Las tablas contentaron a ambos.

Los que s¨ª prendieron fuego al tablero fueron Caruana y Rapport. Desde la sexta jugada, el jugador afincado en Majadahonda se lanz¨® al cuello de su rival con una l¨ªnea solo utilizada 16 veces. Eso s¨ª, entre ellos estaba Magnus Carlsen. El h¨²ngaro, siempre atrevido con sus elecciones en las aperturas, no se achant¨® ante la elecci¨®n de su rival y prosigui¨® con su ataque en el flanco de dama. No obstante, en el momento en el que la partida comenzaba a coger tintes ¨¦picos, Fabiano forz¨® a su rival a repetir tres veces la misma posici¨®n y sellar el empate.

Los ¨²ltimos en finalizar fueron Radjabov y Ding. El chino, por tercera vez en todo el torneo, perdi¨® la oportunidad de reengancharse al grupo de jugadores con el 50% de los puntos. Cuando las piezas negras dirigidas por el segundo mejor ajedrecista del planeta encontraron una armon¨ªa casi perfecta, un simple movimiento de pe¨®n ech¨® por tierra todo el trabajo hecho hasta entonces. Las tablas entre dos de los tres colistas no les permiten recortar distancia con la cabeza.