M¨¢s luces que sombras en el retorno de Tiger Woods

Casi diez meses despu¨¦s, el golf se reconcili¨® con una imagen recurrente a lo largo de este siglo: Tiger Woods de rojo y negro en la ¨²ltima jornada de un torneo. El Tigre concluy¨® este domingo el que ha sido su retorno competitivo desde que se retirara tras dos vueltas del Masters el pasado abril (antes, en febrero, s¨ª complet¨® el Genesis), el Hero World Challenge, que reun¨ªa a 20 de los mejores golfistas del mundo en una cita no oficial pero con puntos de ranking. Una reaparici¨®n que concluy¨® 18? al par, tanto en el d¨ªa como en el total, dejando m¨¢s luces que sombras de cara a la campa?a 2024.

Lo principal es que el californiano consigui¨® completar los 72 hoyos, algo que ni mucho menos es una garant¨ªa a estas alturas dado su maltrecho cuerpo. Y lo hizo sin las muecas de dolor constantes a las que acostumbraba hace unos meses (aunque se le vio realizando estiramientos durante la ronda en varias ocasiones). Un gran asidero pensando en ese torneo al mes que ¨¦l mismo se marc¨® como escenario ¡°realista¡± para el pr¨®ximo a?o, objetivo que refrend¨® este domingo: ¡°Ahora mismo estoy dolorido. Necesitar¨¦ un par de semanas para recuperarme. Pero el plan de cara al pr¨®ximo a?o era jugar una vez al mes y lo sigue siendo¡±, asegur¨®.

El resto de conclusiones, tanto positivas como negativas, de esta semana se desprenden de su juego. La parte mala ya la abord¨® ¨¦l mismo tras una primera vuelta de 75 golpes (despu¨¦s tir¨® un 70, un 71 y un 72), tres sobre par, que se torci¨® por los nueve segundos hoyos, cuando la inactividad empez¨® a pasar factura. El problema, dijo, estuvo en el aspecto mental: ¡°Simplemente no me compromet¨ª del todo con lo que estaba haciendo y sintiendo. Supongo que lo das por sentado cuando juegas todo el tiempo. Sab¨ªa que iba a estar bien f¨ªsicamente. Mentalmente, estaba muy oxidado y comet¨ª muchos errores mentales que normalmente no cometo¡±. Al final de esa jornada las c¨¢maras le ¡®cazaron¡¯ respondiendo ¡°yo¡± a un comentario de Justin Thomas preguntando qui¨¦n necesitaba m¨¢s un ba?o de hielo. Es decir que el dolor, aunque pueda ser m¨¢s llevadero y lo exteriorice menos, est¨¢ ah¨ª.

En lo que sigue yendo sobrado Tiger en dos cosas que marcan sustancialmente el golf de hoy en d¨ªa. La distancia y los greenes. Ha sido el octavo pegador m¨¢s largo de la cita, con 305 yardas (279 metros) de media en las salidas, y el cuarto en golpes ganados desde el tee, 3,6. En putts por green (1,67), el duod¨¦cimo. Una buena estad¨ªstica, que mejorar¨ªa si reflejara la capacidad de este jugador para meter los importantes. En eso quiz¨¢ sea en lo que m¨¢s record¨® al mejor Tiger.

Solo este domingo, que arranc¨® con doble bogey al 2 y cerr¨® empatado con el Albany Golf Course tras cosechar despu¨¦s cinco birdies y tres bogeys, rest¨® en el 5 desde 10 metros, desde tres y medio en el 6, salv¨® un par desde tres metros en el 7, otro desde cuatro en el 9... Queda la duda de qu¨¦ ser¨¢ capaz de hacer cuando afine en la estrategia y la precisi¨®n con sus hierros.

Triunfo de Scheffler

La repercusi¨®n del Tigre, a sus 47 a?os y jugando con cuentagotas, opac¨® todo lo dem¨¢s en Albany, donde se entroniz¨®, con -4 para -20, un Scottie Scheffler que parece haber resuelto, al menos parcialmente (fall¨® para birdie desde menos de un metro en el 17) los problemas con el putter, especialmente en distancias cortas, que le acosaron durante la pasada temporada. Es la tercera victoria del a?o, aunque muy por debajo en significado que las de Phoenix y The Players para el tejano, que ha sido 15 veces top-5 y 18 top-10 en un curso, viene al pelo, ¡®tigeriano¡¯. La barbaridad del d¨ªa fue obra de otro que sigue en estado de gracia, el noruego Hovland, que tir¨® un -9 para -9, 63 golpes, y por momentos coquete¨® con un 62, cerca de los 61 que Rickie Fowler estableci¨® como r¨¦cord del evento en 2017.

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