Rahm, sobre Koepka: ¡°Cuando est¨¢s frustrado y cansado dices cosas...¡±
Jon responde con fina iron¨ªa al norteamericano que le acus¨® de actuar ¡°como un ni?o, dando golpes a la pared¡±: ¡°No soy un ejemplo perfecto... ninguno de los dos lo somos¡±.
Jon Rahm atend¨ªa a la Prensa tras sumar un punto m¨¢s en la 44? edici¨®n de la Ryder en su partido de foursomes, junto a Hatton, del s¨¢bado Una ma?ana de nuevo de claro dominio europeo. ¡°Nuevamente fue un buen d¨ªa para nosotros¡±, dec¨ªa el espa?ol que analiza c¨®mo ve esa gran ventaja por el momento en el marcador: ¡°Es dif¨ªcil decir si est¨¢s sorprendido o no. Obviamente salimos tratando de hacer exactamente eso, ?verdad? Cada uno de nosotros est¨¢ tratando de salir y ganar su punto. Sorprendido o no, ha sido hermoso ver al equipo unirse y jugar como lo hemos hecho. Cuando est¨¢s en el campo sientes el apoyo de los once compa?eros. Quiz¨¢s es por eso ves algunas de las cosas que sucedieron hasta ahora y las reacciones que conllevan. Hay todav¨ªa mucho m¨¢s por hacer y debemos mantener la mentalidad que hemos tenido hasta ahora para, con suerte, seguir funcionando de esta manera y cerrarlo en los individuales¡±.
Tras despiezar c¨®mo hab¨ªa sido su partido, el ¡®Le¨®n de Barrika¡¯ no tuvo problemas en responder preguntas sobre el ¡®tema Koepka¡¯ que tras empatar su encuentro de fourballs descarg¨® su ira sobre Rahm al que acus¨® de actuar ¡°como un ni?o, dando golpes a la pared y haciendo pucheros¡±. El espa?ol, muy calmado y educado, explic¨®: ¡°No soy un ejemplo perfecto de qu¨¦ hacer en un campo de golf, pero no creo que ninguno de nosotros dos lo seamos. Yo juego y compito haciendo lo que creo que necesito. No estaba contento de haber dejado un corto de diez pies y al llegar al tee dej¨¦ escapar un poco de frustraci¨®n golpeando la tabla de lado. Segu¨ª caminando y eso fue todo. Si Brooks piensa que eso es infantil, es lo que es. Tiene derecho a pensar lo que quiera. Estoy aqu¨ª para hacer mi trabajo, y cualquier comentario que alguien pueda tener no deber¨ªa cambiar la forma en que lo hago o lo que pienso de m¨ª mismo. En realidad no fue ni bueno ni malo. Simplemente fue, y eso es todo.¡±.
Rahm, que reconoci¨® haber visto las declaraciones de Koepka, ahondaba en su argumentario: ¡°Es dif¨ªcil no ver algo hoy en d¨ªa. Yo no estoy en redes sociales, pero todo el mundo lo est¨¢ y no puedo controlar lo que hacen mis amigos... as¨ª que me lo env¨ªan. Ojal¨¢ no lo hubieran hecho, para ser honesto. Como digo me siento muy c¨®modo con qui¨¦n soy y lo que hago. Necesitaba desahogarme y funcion¨®. Si est¨¢ bien o mal, infantil o no, no lo s¨¦, pero eso es lo que necesitaba en ese momento. Adem¨¢s lo he hecho mucho peor en un campo de golf. Eso ni siquiera se corresponde con un nivel bajo de ira de Jon Rahm¡±.
Y apostillaba: ¡±Cuando est¨¢s frustrado y cansado dices cosas que a lo mejor no dir¨ªas al d¨ªa siguiente. Brooks conmigo siempre ha sido muy majo excepto esta vez. Nunca he tenido ning¨²n problema con Brooks. No lo s¨¦ ahora, pero hasta ayer por la tarde pensaba que ten¨ªamos una relaci¨®n bastante buena. Ambos somos personas sinceras a las que no les gustan las tonter¨ªas intermedias. Siempre ha existido ese respeto mutuo. Y es un gran jugador de golf¡±.