Jon Rahm y el ¡°siguiente nivel¡± que el golf sigue esperando
El vasco, que vuelve a la acci¨®n el viernes en la bacanal australiana del LIV, analiza de nuevo el estado actual de su deporte.
Dos semanas despu¨¦s del sinsabor del Masters de Augusta, Jon Rahm vuelve a la acci¨®n este viernes (3:45, Movistar Golf) en Adelaida (Australia), que es al LIV lo que el Phoenix Open al PGA: una bacanal que desaf¨ªa los centenarios c¨®digos de este deporte, una semana en la que el golf se suelta la melena, en este caso a mayor gloria de la exaltada parroquia de las ant¨ªpodas, que por defecto de torneos (que este, por mucho que la log¨ªstica de jugar all¨ª sea complicada, es un pa¨ªs infraexplotado por los grandes circuitos es asunto escasamente debatible) se emplea con exceso de fervor, especialmente en ese hoyo 12 de The Grange que se configura como r¨¦plica del 16 de Scottsdale, con un anfiteatro rodeando todo su per¨ªmetro.
El jolgorio que se arm¨® el a?o pasado cuando emboc¨® all¨ª un hoyo en uno Chase Koepka, el herman¨ªsimo de Brooks, fue una f¨¢brica de titulares para la superliga saud¨ª, que encontr¨® en la lluvia de cervezas una fuente de legitimidad contra los que predican la ausencia de ambiente en sus torneos. ¡°Definitivamente es una de esas semanas que ten¨ªa subrayadas en el calendario por lo bien que me han hablado de este torneo. Es una gran ciudad, un gran campo y una gran afici¨®n. Y enfatizo lo de gran afici¨®n por lo del hoyo 12. Pensaba que era mucho m¨¢s corto y cuando lo he visto en persona me he dado cuenta de que honestamente es mucho m¨¢s dif¨ªcil de lo que pensaba. Igual para montar un estadio podr¨ªan elegir un hoyo m¨¢s corto, m¨¢s que nada para que haya m¨¢s opciones de ver hoyos en uno. Pero a¨²n as¨ª es absolutamente incre¨ªble, algo digno de ver¡±, valor¨® la joya Jon Rahm en su rueda de prensa previa flanqueado por Greg Norman, el CEO del LIV. Como el presidente de un club de f¨²tbol presumiendo a su ¨²ltimo fichaje gal¨¢ctico.
Luego el espa?ol se adentr¨® de nuevo en un an¨¢lisis del panorama golf¨ªstico actual, en ese ¡°siguiente nivel¡± al que el golf cree que puede llegar aprovechando la disrupci¨®n que supuso el nacimiento de su actual ¡®casa¡¯ si todos sus actores acaban poni¨¦ndose de acuerdo, algo que estaba previsto para diciembre y cinco meses despu¨¦s sigue sin estar claro. ¡°No s¨¦ nada. Creo que es la misma situaci¨®n en la que est¨¢n muchos otros. La gente que est¨¢ detr¨¢s de esto, que es gente muy inteligente, sigue tratando de determinar qu¨¦ es lo mejor para el golf. No he hablado con suficientes jugadores del PGA para saber cu¨¢l es su postura, honestamente. Creo que hay una falta de informaci¨®n generalizada¡±, afirm¨® el vizca¨ªno sobre el posible resultado de unas negociaciones cuya dilataci¨®n en el tiempo ya erosiona las audiencias (la de la ¨²ltima vuelta del Masters fue un 20% menor que el a?o pasado, de 12 millones a 9,59, y la tercera m¨¢s pobre de su historia tras las ediciones de 2020 y 2021, en plena pandemia).
¡°Creo que todos queremos ver esto resuelto. Lo he dicho muchas veces. Tenemos la oportunidad de llevar el golf a otro nivel en los mercados globales, y si lo hacemos como es debido podemos conseguir un producto mejor para todo el mundo y dejar a este deporte en mejor posici¨®n, como un deporte global¡±, a?adi¨® un Rahmbo que todav¨ªa tiene su palmar¨¦s en el circuito por el que fich¨® a finales del a?o pasado sin estrenar, con un bagaje de cinco top-10. Y lo cierto es que esta no es la mejor plaza para abrir las vitrinas por la pol¨ªtica fiscal australiana, que obliga a entregar un 47% de las ganancias, dejando los cuatro millones de d¨®lares (3,7 de euros) reservados al ganador en unos 2,2 (en euros, algo m¨¢s de 2).
Torneos a 72 hoyos, una opci¨®n valorada
¡°Me encantar¨ªa aportar perspectiva, pero no tengo. El LIV est¨¢ totalmente separado de esa negociaci¨®n (el peso lo lleva su principal inversor, el fondo p¨²blico de inversi¨®n saud¨ª, y su presidente, Yassir Al-Rumayyan). Nuestro inversor quiso poner su dinero en el LIV porque le gustaba la idea de un modelo de franquicias y lo que podr¨ªamos hacer con ello. No s¨¦ lo que est¨¢ ocurriendo, estamos muy ocupados tratando de desarrollar nuestro circuito y preparando el calendario de 2025 y 2026. Nuestra responsabilidad es mirar por nuestros jugadores, nuestra gente y a d¨®nde queremos ir¡±, le secund¨® Greg Norman, que se mostr¨® abierto a cambiar el formato a 72 hoyos, uno de los motivos por los que la junta que dirige el ranking mundial se niega a incluir al LIV en su engranaje.
¡°Somos receptivos con esa idea, pero hay que entender que hay condicionantes econ¨®micos y en lo que a la televisi¨®n se refiere. Es un gran tema de debate y lo seguiremos estudiando. Constantemente valoramos cosas que podr¨ªan hacer mejores nuestros torneos, y jugar a 72 hoyos es parte de la discusi¨®n¡±, apunt¨® el australiano sobre una idea en la que Rahm ya ha incidido en el pasado. ¡°Creo que ayudar¨ªa de cara a los aficionados porque es una de las quejas que recibo siempre. En el f¨²tbol europeo, tanto la Premier League como la Serie A, la liga espa?ola o la alemana juegan todas bajo las mismas reglas. Nosotros tambi¨¦n lo hacemos salvo por eso. Pero al final el LIV es un negocio y si no encaja en su producto, no encaja. Yo solo soy un jugador y hay gente mucho m¨¢s lista que yo dedicada a saber por qu¨¦ 54 hoyos pueden ser un sistema mejor¡±, abund¨® en la cuesti¨®n. En ese think tank participar¨¢n ahora David Philipps, Ross Hallett, Katie O¡¯Reilly, Tim Taylor y Pam Sacree, la nueva hornada de ¡®fichajes¡¯ para las oficinas del circuito, que pesca talento con antecedentes en organizaciones de la talla de Endeavor, los Philadelphia 76ers o Equinox.
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