La Copa Ib¨¦rica se le hace poca cosa al Bar?a

Pese a las tres bajas por lesi¨®n grave (Ari?o y Langaro ya intervenidos, y Tin N?Guessan con un tratamiento conservador pero con seis semanas de recuperaci¨®n), m¨¢s la de Wanne con molestias y G¨®mez intermitente por sus problemas en el tend¨®n de Aquiles, Carlos Ortega se las arregl¨® para que no se notase el d¨¦ficit en el lado izquierdo de su ataque, anular al Oporto con la versatilidad de su plantel, dejar el torneo decidido antes del ¨²ltimo cuarto del partido, para convertir al Bar?a en el club que estrena el palmar¨¦s de esta Copa Ib¨¦rica que nace con vocaci¨®n de perdurar. Adem¨¢s, aunque lo llevase en silencio, Ortega estaba ilusionado con ganar en M¨¢laga, su ciudad, donde naci¨® y estudi¨® antes de que lo fichase Valero Rivera para el llamado Dream Team.

El Oporto, secci¨®n de balonmano del club de f¨²tbol, como el Bar?a, s¨®lo fue competitivo una parte de la primera mitad, porque luego se fue cayendo con parsimonia, como si no tuviese fuerza. Enfrente ten¨ªa, claro, al campe¨®n de la Champions, al que este torneo se hace casi dom¨¦stico.

Hoy el ataque azulgrana, cojo por un lateral, busc¨® a sus pivotes y a sus zurdos, con Mem y Richardson juntos en la primera l¨ªnea, y con Janc de chico para todo. Lo que no le funcion¨® fue la pareja Makuc y Cindric juntos, quiz¨¢ por el cansancio que acumula el croata, que dur¨® poco en la pista.

Por otra parte, Gonzalo P¨¦rez jug¨® todo el partido, y como el portero internacional atraviesa una racha de inspiraci¨®n, la moral portuguesa acab¨® desgastada ante los felinos reflejos del toledano. No hab¨ªa nada qu¨¦ hacer para cambiar los acontecimientos, e incluso el Oporto prob¨® sin fortuna el ataque con siete.

Ortega acab¨® con Mart¨ª Soler (jug¨® todo el partido) y Cikusa en la pista, jugadores del segundo equipo, m¨¢s el pivote Parera, primera temporada en el conjunto profesional.

Antes de la final se jug¨® la consolaci¨®n que se llev¨® el Granollers ante el Sporting de Lisboa para sorpresa general: empate a 36, y en los penaltis, con Marc Guardia inspirado, 4-2 para los vallesanos con lo que vencen 40-38, inyecci¨®n de moral tras el atropello del s¨¢bado ante el Oporto.