El Magdeburg estropea la fiesta de los Dujsheabev

El Magdeburg alem¨¢n, a fin de cuentas campe¨®n del Mundial de clubes las dos ¨²ltimas temporadas, acab¨® por ganar la Champions League en su primera presencia en la Final Four, porque tiene dos t¨ªtulos, pero que corresponden a la prehistoria de la EHF: hac¨ªa 20 a?os que no conquistaba el premio mayor de Europa, y nunca en el formato actual. Derrot¨® 30-29 al Kielce polaco en la pr¨®rroga tras el 26-26 de los sesenta minutos.

Es complicado con un resultado as¨ª saber si es justo o no el triunfo, pero la realidad es que en el tiempo extra los ¨¢rbitros se?alaron cosas tan raras que acabaron inhibieron por momentos, y tal vez el peor parado fue el Kielce, que a nueve segundos la penetraci¨®n de ?lex Dujshebaev para empatar, con Bejzak bloque¨¢ndole el tiro dentro del ¨¢rea, qued¨® en simple golpe franco, y eso que fueron al video para no se sabe qu¨¦.

Ahora bien, el m¨¦rito de los alemanes fue la constancia, porque cuando el Kielce parec¨ªa que romp¨ªa el encuentro con un espectacular Wolff en la porter¨ªa, y ?lex Dujsheabev llevando el parido donde necesitaba su equipo (sus ocho goles valen menos que sus asistencias en este choque), no perdieron la fe, aguantaron, y tuvieron en Kristjansson a su milagro particular: el central se lesion¨® contra el Bar?a, y el club anunci¨® una recuperaci¨®n larga, pero hoy estaba ah¨ª, fresco como una lechuga para ganar la Champions y estropeando la fiesta de los Dujshebaev, que a¨²n no han ganado alg¨²n t¨ªtulo internacional juntos.

Mientras el Kielce jugaba sin exponer, el Magdeburg lo hac¨ªa a la carrera, y ese su mayor m¨¦rito, que el conjunto polaco nunca pudo enfriarle su ritmo de juego habitual, y a la postre, y tras remontar cuatro tantos, acab¨® ganando por la m¨ªnima, evitando los penaltis porque el Kielce no acert¨® en su ¨²ltimo ataque. Por tanto, el nuevo campe¨®n lo hace tras superar de manera sucesiva a los dos finalistas del a?o anterior, el Bar?a y el Kielce.