Lydia Valent¨ªn (Camponaraya, Le¨®n, 38 a?os) abre a AS las puertas de la sala de halterofilia del Centro de Alto Rendimiento de Madrid. Un lugar que se resiste a dejar, y al que sigue acudiendo para entrenar aunque su tarima ya no sea la de competici¨®n. Cuatro Juegos. Oro en Londres 2012, plata en Pek¨ªn 2008 y bronce en R¨ªo 2016, aunque las dos primeras medallas no pudo recibirlas sobre el podio y llegaron mucho despu¨¦s, cuando se prob¨® que sus rivales estaban dopadas. Cuatro medallas mundiales en total ol¨ªmpico (dos de oro). Campeona de Europa. Y, sobre todo, ejemplo de limpieza.

 -?Cu¨¢ntas horas ha podido echar en esta sala?

-?Ufff! Much¨ªsimas detr¨¢s de un sue?o, porque todo se gest¨® aqu¨ª. Proyectos, objetivos, entrenamientos dur¨ªsimos¡­

-?C¨®mo era la primera vez que entr¨®?

-Cuando llegu¨¦ al CAR entren¨¢bamos en otro pabell¨®n, pero alucin¨¦. Estaban todos los referentes, como Estefan¨ªa Juan o Santiago Mart¨ªnez, que yo ve¨ªa en los campeonatos de Espa?a. Gente que levantaba much¨ªsimo y que ya hab¨ªa estado en Juegos Ol¨ªmpicos. ?Flipaba!

-Creo que le dijo a su madre con 13 a?os 'compra una maleta grande que me voy a Madrid'. Lo ten¨ªa bastante claro...

-S¨ª, comenc¨¦ con 11 y a los 13 ya estaba pidi¨¦ndoselo. ¡®?A Madrid a qu¨¦, a 400 kil¨®metros? Tienes muchos p¨¢jaros en la cabeza¡¯, me respondi¨®. Pero yo lo ten¨ªa ya muy claro. Mi entrenador, Isaac ?lvarez, siempre me insist¨ªa en que siguiera entrenando, que era muy buena, que llegar¨ªa a los campeonatos de Espa?a. Y todo lo que me dec¨ªa, me lo cre¨ªa. As¨ª que a por mi madre que fui (sonr¨ªe).

-Hab¨ªa vivido los Juegos de Barcelona por la tele y aquello de los cinco aros le deslumbr¨®. Vio el sitio al que quer¨ªa llegar.

-Era peque?a, pero recuerdo verlos y el ambiente ol¨ªmpico general. Cobi (la mascota), quedadas para ver los deportes¡­ Me gust¨® tanto que me propuse estar en unos.

-?Qu¨¦ halterofilia se encontr¨® cuando empez¨®?

-Un deporte peque?o, pero en el que hab¨ªa referentes. Estefan¨ªa (Juan), M¨®nica Carri¨® y Josefa P¨¦rez que fueron a S¨ªdney 2000, Gema Peris que hab¨ªa competido en Atenas 2004, campeonas del mundo j¨²nior¡­ No hab¨ªa, eso s¨ª, el escaparate que he podido ofrecer yo. Era menos medi¨¢tica. Ahora, tambi¨¦n se conoce m¨¢s por el crossfit.

-?Recuerda su primera salida internacional?

-?Claro! Al campeonato de Europa Sub-16 en Austria. Llegu¨¦ de Camponaraya a Madrid para subirme por primera vez a un avi¨®n. Estaba supernerviosa, m¨¢s por el viaje que por la competici¨®n. Pero fue un ¨¦xito porque gan¨¦ el oro, aunque llegaba como quinta o sexta por marca.

-Siendo un deporte tradicional en los pa¨ªses del Este, habr¨¢ visitado sitios muy extra?os...

-S¨ª, s¨ª, pero no he podido hacer turismo. Al final ves el polideportivo y el hotel. Te de igual, porque vas a lo que vas. ?En 2011 los Mundiales fueron en Disneyland Par¨ªs y no sal¨ª!

-?Cu¨¢ndo apareci¨® en su cintur¨®n la imagen de Hello Kitty y la cinta rosa en el pelo?

-Me cri¨¦ con dos hermanas y mi madre nos compraba cosas de Hello Kitty y el parche que me puse en el cintur¨®n me lo regal¨® una de ellas y lo pegu¨¦ para que me diera suerte, de mascota. Y ah¨ª se qued¨® pegad¨ªsimo, acompa?¨¢ndome a?os. Y las mu?equeras y la cinta rosa fueron un poco por casualidad, pero al final cre¨¦ una imagen en un deporte, entre comillas, tan bruto, de fuerza.

-?Usted sab¨ªa que compet¨ªa contra rivales que estaban dopadas?

-S¨ª rotundo.

-?Y c¨®mo se puede seguir compitiendo con eso?

-Sab¨ªa que nunca iba a ser campeona del mundo. Para eso, deb¨ªa hacer las mismas trampas. Y yo ven¨ªa de un pa¨ªs donde la halterofilia no mueve masas y se hac¨ªa de forma limpia. Estaban Rusia, Bielorrusia¡­ que jugaban a otra liga. Pa¨ªses, deportistas, federaciones enteras que ca¨ªan. Y al final, hasta la Federaci¨®n Internacional ten¨ªa un presidente corrupto.

-Todo el sistema estaba podrido¡­

-Pero no pod¨ªa hacer nada. De Londres 2012 me march¨¦ llorando (fue cuarta y los rean¨¢lisis posteriores descubrieron que la kazaja Pobodebova, la rusa Zabolotnaya y la bielorrusa Kulesha se doparon) cuando vi a las que estaban en el podio. S¨®lo pod¨ªa cruzar los dedos para que cayeran. ?Pero irme yo del deporte? ?Que se fueran ellas!

-Quiso recibir unas medallas nuevas, no las que deb¨ªan devolver las que las ganaron ilegalmente...

-?Es que tampoco las quer¨ªan devolver! Pero s¨ª, prefer¨ª que no estuviesen manoseadas, con la ¡®vibra¡¯ de un deporte sucio.

-?Y cu¨¢nto dinero le habr¨¢n hecho perder las tramposas?

-Gracias a Alejandro Blanco, presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol, pude recibir despu¨¦s todo el dinero que me correspond¨ªa en premios y la beca consiguiente. S¨ª que es verdad que pudieron escaparse patrocinios y la manera de entrenar con menos recursos no fue la misma durante dos ciclos ol¨ªmpicos. Pero as¨ª consegu¨ª llegar a R¨ªo y ganar una medalla, y esta s¨ª recibirla en el podio.

-Como hizo David Cal en pirag¨¹ismo, usted ha quitado el miedo a sus colegas a competir sin complejos. ?Lo ve as¨ª?

-Una de las cosas que m¨¢s me gusta sentir es que, gracias a mi ejemplo, ahora en Espa?a halteras que son cracks como Marcos Ruiz, Josu¨¦ Brachi o David S¨¢nchez han visto que se puede. Aparte de que sus entrenamientos sean muy ¡®heavies¡¯, claro.

-Alguna ni?a se le habr¨¢ acercado a decirle que quiere ser como usted...

-?Claro, claro! Y las madres, que me dicen que vi¨¦ndome a m¨ª se quedan tranquilas. ?Mi madre cre¨ªa que me iba a convertir en un chico!

-Ha estado luchando contra una lesi¨®n de cadera desde los Juegos de Tokio, en los que ya compiti¨® mermada en 2021. ?C¨®mo ha sido ese proceso?

-Complicado. Sobre todo 2021, porque me lesion¨¦ en marzo y los Juegos eran en verano. Y todo porque iba en una categor¨ªa diferente, que no era la m¨ªa porque no pude asistir a los Europeos. Sub¨ª de peso y la cadera hizo crack. Pruebas, infiltraciones¡­ En junio no sab¨ªa si podr¨ªa acudir cuando ven¨ªa de mi mejor ciclo ol¨ªmpico. Hab¨ªa sido campeona del mundo, de Europa y de los Juegos Mediterr¨¢neos. En Tokio me tuvieron que infiltrar simplemente para salir a la tarima y decir que hab¨ªa estado en mis cuartos Juegos. Pero no sirve arrepentirse, aunque eso hizo que empeorara m¨¢s y que a d¨ªa de hoy siga recuper¨¢ndome.

-Pero quer¨ªa competir en Par¨ªs 2024, ?no?

-S¨ª, el a?o pasado ve¨ªa factible clasificarme. Pero sent¨ªa que la cadera no estaba como quer¨ªa. Me costaba mucho hacer los gestos. Me convenc¨ª de que no estaba bien y de que no deb¨ªa sufrir lo que sufr¨ª en Tokio. As¨ª que decid¨ª despedirme del alto rendimiento. Me levantaba de la cama, pisaba y sent¨ªa dolor. Iba coja. Hubo momentos en que estaba impedida.

-Pod¨ªa haber sido la abanderada all¨ª...

-Seguramente, pero no me gusta pensar en ello. No pasa nada. Otro lo har¨¢ superbi¨¦n.

-El d¨ªa de su despedida, el 21 de septiembre en el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol, usted era la m¨¢s tranquila.

-S¨ª. Se public¨® que no competir¨ªa en los Mundiales y la gente me escrib¨ªa apenada. No estaban sintiendo lo que yo sent¨ªa. Y quise que fuese un acto peque?o, cuatro personas para irme dando las gracias y haciendo una reflexi¨®n: ¡®?Me voy a ir triste por no haber competido en unos quintos Juegos?¡¯. Hay que poner las cosas en perspectiva. Ya lo ten¨ªa todo en mi deporte. S¨®lo quiero disfrutar de la vida y recuperarme. Despu¨¦s de lo que he sufrido, me voy feliz.

-?Hacia d¨®nde encamina Lydia sus pasos?

-Creo que tengo mucho que aportar a la halterofilia y hay un proyecto encaminado a ofrecer seminarios y ¡®master class¡¯ en una gira.

-?No se ve como entrenadora en esta sala del CAR?

-?No, no! Ser¨ªa como el d¨ªa de la marmota. Llevo aqu¨ª desde los 15 a?os, y adem¨¢s no tengo vocaci¨®n.

-?Y el crossfit le motiva?

-De momento no.

-Se habla mucho de que hay pocas mujeres en la gesti¨®n deportiva. ?Se animar¨ªa a dar el paso?

-Tampoco lo veo a corto plazo, pero a futuro nunca se sabe.

-?Y ve mucho deporte ahora?

-S¨ª, pero sobre todo lo practico. Muchos cuando se retiran lo dejan radicalmente, pero yo no quer¨ªa cambiar tanto mi identidad ni mi vida. Llevo h¨¢bitos muy similares. Me gusta sentirme deportista.