Kiko Mart¨ªnez y Josh Warrington prenden la mecha en Leeds
Kiko Mart¨ªnez y Josh Warrington cumplieron en la b¨¢scula antes de su pelea de este s¨¢bado. Gran ambiente, con el p¨²blico entregado, y mucha tensi¨®n.
Kiko Mart¨ªnez es un veterano curtido en mil batallas. Con 36 a?os y 55 peleas como profesional (este s¨¢bado disputar¨¢ la n¨²mero 56) conoce muy bien su cuerpo. "Mis cuentas no fallan", apuntaba este jueves a AS. "Ceno poco, entreno en ayunas y me peso por, al menos, un kilo por debajo del l¨ªmite. Eso me permite desayunar un poco y tendr¨¦ unas tres horas hasta el pesaje, descansar¨¦ y dar¨¦ el peso sin problema", predijo. Ese fue su plan, en el que este medio estuvo presente, y el ilicitano ten¨ªa raz¨®n: 56,88 kilos en b¨¢scula.
Por su parte, su rival este s¨¢bado, Josh Warrington tambi¨¦n cumpli¨® (57.01 kg). El pesaje es el llamado asalto cero. Cuando se vuelvan a verse las caras ya silbar¨¢n las balas. La tensi¨®n en el careo previo era claro e intercambiaron muchas palabras, pero ambos fueron cordiales. Este viernes no era el momento. Kiko defiende su Mundial, le quedan dos combates, quiere despedirse como campe¨®n y pretende llevarse la victoria que los jueces le birlaron cinco a?os atr¨¢s. Mientras, Warrington llega de una derrota y un nulo, son malas sensaciones y espera revertirlas alzando un nuevo un Mundial ante su gente. Es joven (31 a?os), pero un tropiezo le introducir¨ªa en una din¨¢mica que podr¨ªa su futuro en grandes interrogantes.
Mencione aparte merece el ambiente vivido mientras las p¨²giles desfilaban por la b¨¢scula. La afici¨®n de Leeds acudi¨® a la llamada de su ¨ªdolo y alrededor de 500 personas abarrotaron el sal¨®n del hotel en el que se realiz¨® la ceremonia. Fue una antesala de lo que se vivir¨¢ este s¨¢bado. Kiko tendr¨¢ todo en contra, pero si alguien sabe de triunfar siendo visitante, ese es Kiko.