As¨ª los veo: los Jets inician con Darnold su reconstrucci¨®n real

El a?o pasado estaba convencido de que los Jets entraban en la temporada con la intenci¨®n de hacer ¡®tanking¡¯, que en cristiano significa dejarse ganar para tener una elecci¨®n alta en el draft. Me equivoqu¨¦. No hicieron ¡®tanking¡¯. Incluso se colocaron con un r¨¦cord 3-2 en la semana 5, pero a partir de ah¨ª la evidencia fue impepinable y entraron en una cuesta abajo imparable para terminar el a?o con un 5-11 que quiz¨¢ a sus seguidores les dej¨® un buen sabor de boca, pero que no maquill¨® que el equipo fuera una casta?a.

Sin embargo, Todd Bowles acab¨® la temporada reforzado porque todo lo que le rodeaba parec¨ªa una encerrona. Despu¨¦s de un buen¨ªsimo estreno como head coach en 2015, con un r¨¦cord 10-6 que dej¨® al equipo con la miel en los labios despu¨¦s de una inesperada derrota en la ¨²ltima jornada, 2016 fue nefasto. Por eso, hace doce meses el head coach aparec¨ªa en el pelot¨®n de grandes favoritos para perder el sill¨®n a final de temporada. Sobre todo porque su plantilla no era miserable, pero estaba muy cerca. Casi no hab¨ªa por d¨®nde cogerla.

Me parece incre¨ªble como sali¨® Bowles del atolladero. Y lo hizo como los entrenadores buenos. En las primeras semanas, cuando los equipos todav¨ªa est¨¢n muy verdes y ajust¨¢ndose, ¨¦l lleg¨® con la maquinaria engrasada y un grupo de veteranos desahuciados dispuestos a reivindicarse. Y ah¨ª rindi¨® a un nivel inimaginable y demostr¨® ambici¨®n por ganar. Cuando los dem¨¢s se entonaron los Jets pasaron a ser lo que se esperaba, un equipo perdedor, pero a¨²n tuvieron tiempo de ganar un par de partidos, ambos a franquicias que se clasificaron para postemporada. Lo justo para que Bowles no solo no solo sobreviviera a la emboscada, tambi¨¦n saliera reforzado.

El r¨¦cord 5-11 les sirvi¨® adem¨¢s para conseguir en el draft a Sam Darnold, que seg¨²n parece era el mismo que habr¨ªan elegido de tener el pick 1. Tuvieron que subir a por ¨¦l, pero no mucho y tampoco pagando una barbaridad. Y ahora, tras haber encontrado un quarterback alrededor del que reunir un equipo ganador, empiezan una reconstrucci¨®n casi desde cero. Pese a todos los parabienes, 2017 fue un a?o casi perdido por mucho que se consuelen porque en ¨¦l encontraron a Jamal Adams y Marcus Maye, que visto lo visto en su a?o de rookies pueden formar una buen¨ªsima pareja de safeties por muchos a?os.

Como toda reconstrucci¨®n que empieza casi de cero, este equipo tiene much¨ªsimo por hacer. Por un lado formar a Sam Darnold, que tras la marcha Teddy Bridgewater a los Saints por una tercera ronda ser¨¢ el titular desde la semana 1. Le sueltan a los toros sin anestesia, pero en pretemporada ha hecho cosas muy buenas, es un tipo muy inteligente y quiz¨¢ haga una entrada por la puerta grande. Creo que ya este a?o va a merecer la pena ver partidos de los Jets solo por Darnold. Por el otro, en la agencia libre fueron muy activos y ficharon muy bien, pero tambi¨¦n perdieron nombres muy importantes como Muhammad Wilkerson y Demario Davis. Y si ponemos unos y otros en la balanza quiz¨¢ haya una mejora, pero quiz¨¢ no suficiente para que estos Jets puedan aspirar a demasiadas cosas.

Dicho lo anterior, y como les sucede a los Browns, y probablemente a los Bills, lo que menos les importa a los Jets este a?o es el r¨¦cord de victorias. Si terminan la temporada con un quarterback franquicia consolidado se dar¨¢n con un canto en los dientes. Mientras, como una hormiguita que no hace ruido, Todd Bowles intenta levantar el edificio de su defensa, que es lo que le gusta de verdad. Y oye, si por el camino consiguen volver a ganar cinco o seis partidos, todos contentos.

ATAQUE: hay Darnold, carrera, pero no l¨ªnea ofensiva

El a?o no ha empezado bien para el ataque a¨¦reo de los Jets. Robby Anderson, su mejor receptor, est¨¢ pendiente de una sanci¨®n tras ser arrestado en enero y enfrentarse a la polic¨ªa. Jermaine Kearse, su te¨®rico n¨²mero 2, se lesion¨® en pretemporada y podr¨ªa perderse algunos partidos. ArDarius Stewart tambi¨¦n tiene que cumplir dos partidos de sanci¨®n y Terrelle Pryor y Quincy Enunwa se suman a la lista de tocados y empiezan la temporada convalecientes. Incluso Christopher Herndon, su tight end elegido en 4? ronda del draft, tendr¨¢ que cumplir una sanci¨®n por otro incidente policial y viene de una lesi¨®n de ligamentos. Con ese panorama, el problema de este grupo de receptores no es solo que no entusiasma en absoluto, es que puede empezar el a?o en cuadro.

El backfield tiene mejor pinta con Bilal Powell y Isaiah Crowell, dos tipos mucho mejores de lo que pueda parecer de entrada, y cuyas carreras han estado marcadas porque les han rodeado plantillas no demasiado competitivas. Este a?o pueden volver a ser lastrados por el mismo problema, y porque de entrada parece que van a formar un comit¨¦ sin titular claro, pero cualquiera de los dos parecen muy capaces de superar las mil yardas a poco que el viento sople un poco a favor. Quiz¨¢ Darnold pueda ser ese empujoncito que necesitan. Tambi¨¦n ficharon a Thomas Rawls, otro jugador que asombr¨® en su a?o de rookie, pero que desde entonces ha hecho bastante poco entre lesiones y decepciones.

La l¨ªnea ofensiva el a?o pasado fue terrible y todo apunta a que seguir¨¢ igual de porosa. As¨ª que Darnold ya puede espabilar y tirar de piernas para sobrevivir. En la agencia libre ficharon a Travis Swanson y Spender Long, dos centers, y parece que el segundo ser¨¢ el titular para mejorar algo el interior, aunque no mucho. Kelvin Beachum (LT), James Carpenter (LG), Brian Winters (RG) y Brandon Shell (RT) completan un grupo con algunos nombres de prestigio como Beachum o Carpenter, pero que en conjunto no augura nada bueno vistos los antecedentes.

DEFENSA: demasiados interrogantes

La marcha de Muhammad Wilkerson podr¨ªa parecer un gran problema para esta defensa, pero en los ¨²ltimos dos a?os no estuvo ni de lejos al nivel anterior. La baja ha quedado cubierta en 3? ronda del draft con Nathan Shepherd. Tiene una pinta estupenda, pero viene de jugar en segunda divisi¨®n universitaria, y no est¨¢ nada claro que pueda ser dominante ahora que va a tener morlacos bien armados delante. Por si acaso, tambi¨¦n han fichado a Henry Anderson. Sea quien sea el que juegue de los dos, la l¨ªnea de tres se completa con Leonard Williams, que es un jugadorazo, y Steve McLendon, que tampoco est¨¢ nada mal como nose tackle.

Las cosas est¨¢n m¨¢s turbias en la l¨ªnea de linebackers. En el interior se ha marchado Demario Davis pese a su magn¨ªfica temporada pasada. La baja parece bien cubierta con el fichaje de Avery Williamson. Junto a ¨¦l estar¨¢ Darron Lee, que aunque es titular indiscutible a¨²n no ha jugado al nivel que se esperaba cuando fue elegido en primera ronda del draft de 2016. Por fuera, Josh Martin y Jordan Jenkins parecen muy poca cosa. Entre los dos solo consiguieron 4,5 sacks en 2017 en una defensa que fue la quinta peor presionando al quarterback con solo 28 sacks. La posici¨®n no se ha reforzado ni siquiera con nuevos reservas, as¨ª que algo habr¨¢ visto en ellos Todd Bowles para tener tanta fe que se me escapa.

Como adelant¨¦ en la presentaci¨®n, la mayor alegr¨ªa de los Jets en 2017 fue encontrar una pareja de safeties de calidad con Jamal Adams y Marcus Maye. El staff ha querido aprovechar la ola buena para fichar a Trumaine Johnson, un n¨²mero 1 buen¨ªsimo, que deber¨ªa formar con Morris Claiborne una buena pareja de cornerbacks. El nickel no est¨¢ tan claro. Buster Skrine y Darryl Roberts pelear¨¢n por el puesto y si Rashard Robinson ten¨ªa alguna opci¨®n, posiblemente la perder¨¢ con sus cuatro partidos de sanci¨®n. Pese a las dudas en el nickel, esta secundaria probablemente sea lo mejor de esta defensa.

CONCLUSI?N:

El a?o pasado Todd Bowles nos ense?¨® que es capaz de sacar mucho m¨¢s de lo esperado de una plantilla mediocre. Eso me hace darle un voto de confianza, sobre todo por la evoluci¨®n de una defensa que tiene muchos jugadores j¨®venes que en sus manos quiz¨¢ terminen de dar el salto en 2018. Sin embargo, se me hace muy complicado digerir ese ataque. Tiene todos los ingredientes que anuncian una cat¨¢strofe con un quarterback rookie detr¨¢s de una l¨ªnea mala sin paliativos y con un grupo de receptores no demasiado s¨®lido. El backfield tiene talento y quiz¨¢ ah¨ª pueda apoyarse Darnold para sorprender, pero tampoco me extra?ar¨ªa que terminara lesionado m¨¢s pronto que tarde. El calendario no parece excesivamente complicado, pese a que el bye est¨¢ algo tarde en la semana 11 y tres de los primeros partidos son lejos de New Jersey. Se enfrentar¨¢n a bastantes equipos tambi¨¦n en reconstrucci¨®n y solo se complica de verdad en la recta final, cuando se acumulan los ¡®cocos¡¯. Creo que repetir¨¢n el r¨¦cord 5-11, o quiz¨¢ lleguen a seis victorias para ser terceros de la AFC Este, pero este a?o s¨ª parece que el proyecto puede arrancar para empezar a ser realmente competitivo en 2019.