La pesadilla de Arizona contin¨²a en Minnesota
Un vistazo a los problemas en los que est¨¢ inmerso el ataque de los Cardinals. Tanto en la protecci¨®n al QB como las malas rutas de los receptores.
¡°?Cu¨¢ndo vamos a despertarnos? ?Cu¨¢ndo vamos a hacer lo que sabemos que podemos hacer?¡± Las palabras del linebacker Kevin Minter tras la derrota de los Cardinals el pasado domingo muestran la frustraci¨®n de un grupo de jugadores que comenz¨® la campa?a con aspiraciones de Super Bowl y que llega a Acci¨®n de Gracias con la imperiosa necesidad de ganar todos sus partidos restantes para tener una opci¨®n de entrar en playoffs como wild card.
Arizona es a d¨ªa hoy la defensa n¨²mero 1 de la NFL en yardas permitidas, la n¨²mero 1. En ataque el runningback David Johnson lidera la competici¨®n en touchdowns, es segundo en yardas de scrimmage y tercero en yardas de carrera. ?C¨®mo puede ser entonces ese r¨¦cord negativo de 4-5-1? La bajada de rendimiento del juego de pase e innumerables gafes en equipos especiales son los grandes responsables.
El choque ante Minnesota es un ejemplo perfecto de estos dos males. Un retorno de kickoff retornado 104 yardas cost¨® un touchdown, M¨¢s tarde, John Brown cometi¨® un grave error juzgando la trayectoria de un punt y le cost¨® a su equipo veinte yardas de posici¨®n de campo cuando necesitaba un ¨²ltimo drive para remontar. En anteriores semanas los fallos en equipos especiales los protagoniz¨® el kicker Chandler Catanzaro errando posibles patadas ganadoras frente a New England y Seattle. Un retorno, en este caso de punt, fue clave en la derrota con los Rams. Si a esto a?adimos la extra?a gesti¨®n de la posici¨®n de punter no nos equivocamos nada si decimos que esta unidad ha sido un completo desastre hasta ahora.
Sin embargo, la gran sorpresa, o m¨¢s bien decepci¨®n, viene de un ataque de pase que est¨¢ a a?os luz de lo visto en 2015. Las principales cr¨ªticas se est¨¢n centrando en el quarterback, Carson Palmer. Su media de yardas por intento de pase ha bajado de 8.7 a 7.2 y la ca¨ªda en rating es de 21 puntos. Viendo la pel¨ªcula de los entrenadores no observo un rendimiento pobre en Palmer. Sigue completando pases con anticipaci¨®n y manteni¨¦ndose con ritmo en el pocket.
Donde he observado una merma en su juego es en el pase largo. Por un lado su precisi¨®n en esos lanzamientos no es la misma de la campa?a pasada, por otro las defensas rivales se est¨¢n protegiendo m¨¢s este a?o en profundo. De 33 jugadas de pase contra los Vikings iniciadas fuera de la zona roja de su oponente, Minnesota form¨® con dos safeties profundos en 21 de ellas (63,6%) por 12 con solo un hombre atr¨¢s. Con el paso de las jornadas Palmer ha ido cada vez m¨¢s olvidando estas acciones. Lo que era una t¨®nica en el ataque de los Cardinals, seis o siete lanzamientos profundos en cada partido, ahora se ha convertido en una rareza. Contra Minnesota s¨®lo intent¨® tres pases 20+ yardas en campo abierto, sin completar alguno y con una intercepci¨®n. Fijaos en el v¨ªdeo c¨®mo Palmer descarta una opci¨®n profunda para quedarse con el ¡°checkdown¡± que adem¨¢s resulta incompleto.
No obstante, centrarse ¨²nicamente en los fallos del quarterback y cargar toda la responsabilidad en ¨¦l ser¨ªa muy injusto. No est¨¢ recibiendo mucha ayuda ni de los receptores ni de la l¨ªnea ofensiva. El rendimiento del cuerpo de wide receivers ha sido muy irregular a excepci¨®n de Larry Fitzgerald. Quien est¨¢ decepcionando m¨¢s es Michael Floyd, tanto por sus ¡°drops¡± como por sus rutas mal trazadas. En la segunda intercepci¨®n del domingo observad como Floyd a mitad de camino abandona su ruta y para cuando quiere reaccionar no est¨¢ en posici¨®n ni de evitar la intercepci¨®n de Xavier Rhodes que s¨ª disput¨® la jugada de principio a fin.
Donde m¨¢s se le est¨¢n viendo las verg¨¹enzas al ataque de Bruce Arians este a?o es en la l¨ªnea de ataque. Las lesiones han jugado un factor importante pues ya se han perdido dos titulares de principios de a?o, el tackle izquierdo Jared Veldheer y el guard derecho Evan Mathis. Palmer ya ha encajado m¨¢s sacks que en toda la temporada pasada y contra los Vikings fueron 15 los golpes recibidos, la segunda cantidad m¨¢s alta en todo el a?o en la NFL. Lo peor para Arizona es que Minnesota consigui¨® imponer su dominio presionando ¨²nicamente con el frente de cuatro. De 43 acciones de pase los Vikings solo entraron en blitz en 4 ocasiones. En esos pocos blitzes los resultados fueron demoledores: golpe a Palmer y pase incompleto, golpe a Palmer y pase incompleto, sack y sack. Los problemas de comunicaci¨®n fueron constantes en la l¨ªnea. Aqu¨ª le cuestan la posibilidad a Palmer de encontrar a un receptor desmarcado.
La misma jugada, desde la perspectiva de la end zone, deja a las claras las dificultades del grupo para contener los ¡°stunts¡± de la l¨ªnea defensiva de Minnesota. El tackle derecho D.J. Humphries (1? ronda en 2015) est¨¢ siendo batido repetidas veces este a?o y su nuevo compa?ero, Earl Watford, no ayuda tampoco demasiado.
Esta acci¨®n es del segundo cuarto y supone uno de los pocos blitzes de Minnesota. De nuevo Humphries es responsable de que un pase resulte incompleto y un drive muera a la postre.
No termina aqu¨ª la cosa. La cacer¨ªa a Palmer fue constante y responsabilidad de toda la l¨ªnea ofensiva. En esta ocasi¨®n es el guard izquierdo Mike Iupati quien no asume su asignaci¨®n con Brian Robison, situado en posici¨®n de ¡°joker¡± en el frente de cuatro de Minnesota. De nuevo Palmer paga el fallo de comunicaci¨®n de sus compa?eros de l¨ªnea recibiendo un golpe tremendo.
Podr¨ªa seguir poni¨¦ndoos m¨¢s acciones de este corte, de hecho fue el tackle izquierdo Jon Wetzel quien m¨¢s sufri¨® ante el empuje y explosividad de Everson Griffen, pero la idea est¨¢ clara. Los problemas de la ofensiva de Arizona van mucho m¨¢s all¨¢ del quarterback. Palmer no est¨¢ jugando su mejor football. Tampoco Arians est¨¢ teniendo su mejor campa?a desde la banda. Los receptores no est¨¢n cumpliendo las expectativas y la l¨ªnea de ataque es un caos. En definitiva, muchos problemas en los Cardinals. Tantos que se antoja muy dif¨ªcil que Minter y sus compa?eros despierten a tiempo de esta pesadilla.