Los Jefes y su temible defensa
Justin Houston y Tamba Hali, una pareja explosiva
Houston qued¨® cerca en 2014 de romper la marca de m¨¢s capturas de QB y con Hali del otro lado de la defensiva, la posibilidad de lograrlo es amplia.
Justin Houston se qued¨® en 2014 a una captura de fijar una nueva marca y hacer suya la haza?a en 2015 no parece descabellado. Y no es por jugar con la tranquilidad, y felicidad, claro, que ofrece el cobijo del nuevo y jugoso contrato por seis a?os y 101 millones de d¨®lares que firm¨® con los Jefes de Kansas City tras sumar 22 capturas de quarterback en 2014.
A diferencia de Michael Strahan, due?o de la marca en la historia de la NFL con 22.5 capturas y que fij¨® en 2001, y de otros l¨ªderes en esta categor¨ªa, Houston cuenta con una caracter¨ªstica importante: tiene un compa?ero de travesuras.
Tamba Hali es el personaje que le abre las puertas a Houston para cazar la marca de Strahan. En 2014, Houston jug¨® principalmente en la posici¨®n de ala defensivo derecho, mientras que Hali, quien ven¨ªa de dos campa?as con m¨¢s de 10 capturas, jug¨® como linebacker del lado izquierdo de la formaci¨®n defensiva de los Jefes.
Dos peligros en cada extremo de la formaci¨®n que volvieron locas a las l¨ªneas ofensivas rivales que ten¨ªan como referencia a Hali y para cuando notaron que Houston era una amenaza de igual o mayores dimensiones, el linebacker n¨²mero 50 ya estaba en gran ritmo.
Contar con un secuaz es un lujo con el que no cont¨® Strahan, quien, pese a ello, logr¨® quedar como l¨ªder de capturas de los Gigantes en 2002, pero con 11.0, nueve menos de las que sum¨® el a?o anterior, cuando fij¨® la marca.
El lujo tampoco estuvo a la mano para Mark Gastineau, a quien Strahan le rompi¨® la marca. En 1985, Gastineau, liniero defensivo de los Jets, fij¨® la marca en 22 capturas y al a?o siguiente sum¨® s¨®lo 13.5, aunque tambi¨¦n qued¨® como l¨ªder de su defensiva en ese rubro, al igual que Jared Allen en 2012 con Minnesota, cuando atrap¨® 12 veces a los pasadores rivales tras hacerlo 22 ocasiones el a?o previo.
Quien s¨ª experiment¨® una situaci¨®n similar a la que se anticipa para Houston fue Reggie White, con Filadelfia en 1987 y 1988.En 1987, y pese a que s¨®lo jug¨® 12 partidos en una campa?a en la que los jugadores de la NFL se fueron a huelga y fueron reemplazados durante tres semanas por esquiroles, White lleg¨® a 21 capturas de quarterback.
De jugar 16 partidos, qui¨¦n sabe a qu¨¦ altura hubiera dejado White la marca, pero al a?o siguiente, en 1988, nos dio una idea de eso al atrapar 18 veces a los pasadores rivales pese a tener dobles marcas encima.
Ese a?o, las 18 capturas dejaron a White como l¨ªder en esa categor¨ªa en las ?guilas de Filadelfia, dejando a Clyde Simmons, que no era ning¨²n improvisado, en segundo puesto con 8.0.
En 2015, Houston es quien ahora llamar¨¢ m¨¢s la atenci¨®n de los ataques rivales, que le enviar¨¢n dobles equipos y en ocasiones intentar¨¢n darle la vuelta, sin embargo, no pueden, ni deben, desatender a Hali.
Esta disyuntiva s¨®lo puede beneficiar a ambos y en particular a Houston, quien de comparsa pas¨® a ser una pieza indispensable en la defensiva de los Jefes y en uno de los mejores linebackers de la NFL.