La leyenda ol¨ªmpica de LeBron
Como desde que abander¨® la construcci¨®n del Redeem Team, el Rey no le fall¨® al Team USA y volvi¨® a liderarlo a su quinto oro consecutivo a los 39 a?os. ¡°No me veo en Los ?ngeles, pero tampoco me ve¨ªa en Par¨ªs¡¡±, dej¨® caer. Esta vez, sin embargo, el camino llega a su fin.
¡°Voy a por mi tercer oro ol¨ªmpico¡, y resulta que todav¨ªa estoy pensando en mi primer bronce¡¡±. La frase de LeBron en un spot televisivo horas antes de la final de los Juegos contra Francia es el mejor ejemplo de la fiereza competitiva de una de las figuras m¨¢s grandes de la historia del deporte que, a sus 39 a?os, ha vuelto a ponerse a la espalda la responsabilidad de no fallarle a su pa¨ªs, lo que m¨¢s le gusta, y no ha fallado. El Rey aterriz¨® en Francia con el oro y en el MVP en la cabeza y se lleva las dos cosas. Su actitud durante todo el torneo, que ha cerrado con 14,2 puntos, 8,5 asistencias y 6,8 rebotes, ha sido irreprochable. Como en ese documental en el que recuerda la final ol¨ªmpica contra Espa?a en los Juegos de Pek¨ªn (¡°no nos iban a ganar¡±), el jugador nacido en el Summa Akron City Hospital, el mismo que vio dar a luz cuatro a?os despu¨¦s a Stephen Curry tambi¨¦n, no consideraba otra opci¨®n que no fuese volver con el oro colgado al cuello.
¡°No me veo en Los ?ngeles (2028), pero tampoco me ve¨ªa en Par¨ªs¡¡±, dijo LeBron cuando acab¨® la batalla contra Francia. Tendr¨ªa 43 a?os. Esta vez s¨ª, se acerca el final de un viaje memorable con el Team USA. Una especie de misi¨®n de la que siempre se ha sentido parte. Seguramente, porque empez¨® a detectar peligrosos s¨ªntomas. Sus dos primeras apariciones con Estados Unidos resultaron frustrantes. Al desastre de Atenas en 2004 le sigui¨® la tremenda semifinal de 2006 en Saitama, cuando Schortsanitis y compa?¨ªa, desatados, sacaron a pasear las verg¨¹enzas del Team USA. ?l fue uno de los responsables de la catarsis. En 2007, se puso al frente del programa establecido por Jerry Colangelo y Mike Krzyzewski. La USA Basketball quiso empezar de cero en el Torneo de las Am¨¦ricas. Un nuevo modelo, una manera distinta de hacer las cosas que terminase con la decadencia que el Dream Team hab¨ªa experimentado desde que fue creado en 1992. All¨ª se pusieron las bases de una nueva cultura que, 17 a?os despu¨¦s, con sus cosas y sus cambios, sigue vigente. Se fueron Colangelo y coach K, pas¨® Gregg Popovich. Grant Hill se hizo cargo de la direcci¨®n t¨¦cnica del equipo; y Steve Kerr dejar¨¢ el cargo.
Pese a su ausencia en R¨ªo y Tokio, LeBron siempre ha formado parte del cord¨®n umbilical del programa. El Redeem Team de 2008 y 2012, con Kobe como legendario compa?ero de batallas, fue todo lo que se esperaba de ¨¦l, vencedor de dos finales extraordinarias contra la Espa?a de Pau Gasol, que este s¨¢bado estaba sentado a la izquierda de Scottie Pippen, alucinando con lo que todav¨ªa es capaz de hacer con 39 a?os y el pelo blanco ti?endo su barba.
Esta vez s¨ª, y pese a la motivaci¨®n obvia que puede suponer para cualquier unos Juegos en casa, parece el fin del viaje. Cuatro veces campe¨®n de la NBA, MVP de esas cuatro finales (2012, 2013, 2016, 2020), 20 veces all star, El Elegido ha terminado con ¨¦xito su misi¨®n con el Team USA. Lo conoci¨® decr¨¦pito en Atenas, lo deja con el brillo del quinto oro consecutivo y habi¨¦ndose ganado el respeto incluso de quienes miran de reojo y con cierto complejo el universo NBA. Campe¨®n de la NBA con el equipo de su ciudad (¡°Cleveland, this is for you¡±, grit¨® en 2016), con los nuevos ricos Heat que lider¨® al lado de Wade, que estos d¨ªas lo ha visto de cerca en su puesto de comentarista con la NBC; y los hist¨®ricos y glamourosos Lakers, s¨®lo le quedaba un ¨²ltimo sue?o por cumplir y se har¨¢ realidad este a?o: jugar con su hijo Bronnie en Los ?ngeles. El 30 de diciembre cumplir¨¢ 40 a?os. Tal vez le falt¨® el halo de invencibilidad de Michael Jordan, que nunca perdi¨® unas finales, pero estaba claro que era El Elegido y mucho m¨¢s. LeBron, un americano ya eterno en Par¨ªs.