Viera tampoco le bast¨® a Las Palmas

La necesidad con la que Las Palmas afrontaba este duelo, al que lleg¨® tras dos derrotas previas que vinieron despu¨¦s de una racha de 12 partidos sin perder, le hizo apretar muy arriba desde el inicio. Sin embargo, ni que hubiera metido sus nervios en el congelador, el Eibar esperaba atr¨¢s sin descomponerse un ¨¢pice por m¨¢s que los locales intentaran sus habituales triangulaciones dentro del juego de posici¨®n que tanto les gusta.

Si por parte de Las Palmas hab¨ªa intenciones vanas, el Eibar daba picotazos de serio peligro como aquel de Stoichkov, que puso nerviosos a Coco y Valles antes de que el bal¨®n saliera a c¨®rner. Precisamente, de un saque de esquina, pero en la porter¨ªa contraria, lleg¨® el primer gol del partido cuando Moleiro busc¨® el segundo palo de Luca Zidane, cuya triste salida fue aprovechada por ?lex Su¨¢rez, siempre atento para meter su bota derecha de manera acrob¨¢tica y hacer el 1-0.

Ni que hubiera necesidad de hacer justicia por los m¨¦ritos de uno y otro equipo, apenas un pesta?eo le dur¨® la alegr¨ªa a la parroquia local. As¨ª, menos de dos minutos despu¨¦s, un grosero error de Curbelo le dej¨® la pelota franca a Quique Gonz¨¢lez, cuyo pase al coraz¨®n del ¨¢rea de Valles le lleg¨® a Corpas, quien se dio la vuelta para hacer el 1-1 casi a puerta vac¨ªa.

El resultado no, pero el ritmo del partido le daba por completo la raz¨®n a los hombres de Garitano, que poco a poco le iban comiendo terreno a una UD Las Palmas de la que apenas se ten¨ªan noticias en ataque de Sandro o Jim¨¦nez, encerrados en la tela de ara?a armera futbolistas elegantes como Clemente, Loiodice o Moleiro, cuyo enganch¨®n con Nolaskoain gener¨® un peque?o rifirrafe cuando ambos equipos se iban al vestuario. Con los nervios a flor de piel se afront¨® un descanso al que la formaci¨®n grancanaria parec¨ªa llegar empatada gracias a Valles, que tras un nuevo error de Curbelo le quit¨® el 1-2 tanto a Corpas como a Tejero.

Cinco minutos despu¨¦s del receso, Coco estuvo a punto de marcar uno de los goles de la temporadas tras un chut desde 35 metros que Zidane mand¨® al limbo. Llevaba la iniciativa Las Palmas pero el Eibar aguantaba imperturbable. As¨ª fue hasta que Garc¨ªa Pimienta agit¨® a su banquillo d¨¢ndole entrada a Peji?o, Viera y Marc Cardona, que tuvo que marcharse lesionado.

Los locales dieron un notable paso al frente y, entonces s¨ª, sometieron al Eibar, al que apenas le quedaba resistir, que no es poco, hasta el final del partido. Un c¨®rner sacado por Viera acab¨® con Moleiro estampando el bal¨®n en el larguero contrario, y una nueva combinaci¨®n entre los dos versos sueltos de Las Palmas y de Segunda, pura poes¨ªa en movimiento hilada por el influjo del bal¨®n, acab¨® con Correa sacando la pelota debajo de los palos que mansamente hab¨ªa mandado Viera hacia el fondo de la porter¨ªa de Zidane.

Las Palmas, volcada, percuti¨® hasta la extenuaci¨®n pero ya era demasiado tarde. No hay mal que por bien no venga, pues regresa, como segunda clasificada que es, a unos puestos de ascenso directo que roza el contest¨®n Eibar. Lo dicho: el empate m¨¢s dulce.