Silva y Brais son los ¡®sheriffs¡¯ de Europa

Si tienes a David Silva y a Brais M¨¦ndez en tu equipo nada puede salir mal. Podr¨¢ tardar en salir bien, podr¨¢ demorarse m¨¢s de lo deseado, pero es dif¨ªcil que al final no acabe entrando la pelota en la porter¨ªa del equipo rival. Y la Real Sociedad tiene la suerte de tenerlos en su equipo esta temporada. Juntos. Y cuando se juntan suenan los acordes celestiales del buen f¨²tbol. Y permiten a txuri-urdin seguir so?ando con el primer puesto de su grupo en la Europa League. Entre ambos cimentaron el trabajado triunfo en Chisin¨¢u, la capital de Moldavia, contra el Sheriff Tiraspol. Un golazo del canario sirvi¨® para abrir la lata ya en la segunda parte. Y otra falta espectacularmente botada por el gallego permiti¨® a Aritz Elustondo hacer el 0-2 y finiquitar el partido en el Zimbru Stadium. En casa del Sheriff demostraron que ellos son los Sheriff de Europa. Los pistoleros del continente que consolidan el liderato de la Real en un grupo en el que est¨¢ el Manchester United. No es poca cosa.

Y eso que est¨¢ historia con tintes sovi¨¦ticos, en un escenario in¨¦dito para la Real, no hab¨ªa empezado del todo bien. Porque en la primera parte, la Real Sociedad intent¨® adue?arse del partido a trav¨¦s de la posesi¨®n de bal¨®n, pero el empuje del Sheriff por el imponente f¨ªsico de sus jugadores acab¨® por imponerse para que el partido se jugara m¨¢s a lo que quer¨ªan los moldavos que los txuri-urdin. Cedric Badolo campaba a sus anchas por el centro de campo y merodeaba con peligro las inmediaciones de la porter¨ªa de Remiro, encontrando posiciones de disparo desde la frontal. Por fortuna, lo que no encontraba era porter¨ªa. Y cuando la encontr¨® estaba Remiro preparado para evitar sustos mayores. La Real parec¨ªa atascada jugando por dentro.

Silva, Brais y Merino se enredaban en la tela de ara?a del Sheriff, que acumulaba demasiada gente en su campo. Poco a poco se hizo due?a del juego, monopolizaba la pelota, pero me faltaba velocidad en la circulaci¨®n y finura en el ¨²ltimo pase. A¨²n as¨ª, Sorloth, Brais y Silva, con un gran disparo de falta, tuvieron opciones para haber adelantado a la Real antes del descanso. El equipo realista crec¨ªa con el paso de los minutos.

Y lleg¨® el descanso. Y sirvi¨® para reordenar las ideas. Para calibrar las fuerzas. Para decirse que hab¨ªa que dar un paso adelante. Ser m¨¢s agresivo en la presi¨®n, m¨¢s incisivo en las acciones de ataque y m¨¢s certero en la asociaci¨®n. Imanol puso las pilas a sus jugadores. Y estos respondieron. ?Vaya que s¨ª! De una acci¨®n de Sorloth, seguramente el que mejor interpretaba lo que necesitaba me partido, naci¨® el 0-1 que desatascaba la faena. El noruego recibi¨® dentro del ¨¢rea, sirvi¨® a David Silva en la frontal, y el canario se sac¨® de la chistera un lanzamiento maravilloso que quitaba las telara?as de la porter¨ªa de Koval. La Real respiraba. El Sheriff empezaba a sufrir. Luego lleg¨® la jugada clave de Sola, provocando la expulsi¨®n de Kyabou y la falta que originaba el 0-2. Brais M¨¦ndez, desde el mismo sitio y de la misma manera que hizo en Girona, lanz¨® una falta con una rosca endiablada, pero esta vez llegaba Elustondo para peinar sutilmente el bal¨®n y hacer imposible la estirara de Koval.

El objetivo de ganar en Moldavia y afianzar el liderato, encarrilando de manera decisiva su clasificaci¨®n, estaba casi cumplido. Faltaba poner el broche al partido. Casi lo hace Merino con otro pase m¨¢gico de Brais, pero su remate picado se fue por encima de la porter¨ªa. Tan aseada fue la faena que hasta Imanol pudo gestionar cargas y dar minutos de descanso a jugadores importantes. La Real camina con paso firme en Europa. Y todo gracias sus dos ¡®sheriffs¡¯: Silva y Brais.