Otra victoria que da el pase entre mucho sufrimiento

EI Villarreal-Panathinaikos demostr¨® que en el f¨²tbol no hay milagros. Hasta poco m¨¢s de la hora de partido, los titulares del ¡®Milagro Marcelino¡¯ se suced¨ªan en los ordenadores de los cronistas. Pero todo eso se fue a la basura porque desde el instante en que Cantalapiedra marcaba, aunque lo anul¨® el VAR, a los defensas del Villarreal empezaron a temblarle las piernas y Ioannidis, el mismo que amarg¨® a Marcelino este verano cuando estaba en el Marsella, estuvo a punto de tirar de kryptonita para al menos empatarle el partido al Submarino.

Al final la sangre no lleg¨® al r¨ªo, el Villarreal est¨¢ clasificado y ahora falta por saber si como segundo, donde jugar¨ªa una ronda de dieciseisavos ante los que caen de la Champions, o primero, pasando directamente a octavos de final. Para ello deber¨¢ ganar el aplazado ante el Maccabi, el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, y al menos empatar en casa del Rennes el 14 de diciembre. Alegr¨ªa por la puntuaci¨®n y por la primera hora de juego. Pero ba?o de realidad en la media hora final. ¡°Marcelino nos ha dicho que tenemos un grave problema defensivo¡±, dec¨ªa Comesa?a en la previa. Lo tienen. Y por ah¨ª es por donde debe empezar el trabajo del m¨ªster, que lo tiene claro.

El equipo amarillo se hizo con el bal¨®n y mov¨ªa de lado a lado al Panathinaikos. Todo flu¨ªa. Pero Rub¨¦n P¨¦rez, con un derechazo desde fuera del ¨¢rea, amenaz¨® con destrozar el buen arranque del Villarreal. Pero Reina, que volv¨ªa al once tras un err¨¢tico partido en Zamora, hizo una gran intervenci¨®n. A partir de ah¨ª, el Submarino encendi¨® el modo rodillo. Akhomach junt¨® en la banda derecha a tres rivales y se la puso a Baena a la espalda de un cuarto que le sal¨ªa al paso. El almeriense, con un toque sutil, super¨® por encima de la cabeza a Brignoli. Cinco minutos despu¨¦s, Morales, cuyas botas convierten en oro todo lo que tocan en la ¨²ltima semana, cedi¨® a Comesa?a. Este se deshizo de su par con un giro de cadera y la puso en la escuadra. Golazo contra la falta de adaptaci¨®n.

Nada m¨¢s comenzar la segunda parte, las botas de Morales volvieron al tajo. Pase de Baena y gol de El Comandante que se estrenaba en Europa League y parec¨ªa sentenciar el partido. El VAR se convirti¨® en protagonista entonces. Primero anul¨® un gol de Cantalapiedra por unos cent¨ªmetros y poco despu¨¦s caz¨® una patada de Baena y se?al¨® penalti. Ioannidis chut¨® al poste y el rechazo lo caz¨® Palacios. El delantero griego fall¨® el penalti pero cambi¨® de ra¨ªz el partido. Con el bal¨®n en sus botas, los defensas del Villarreal eran conos. En el 80¡ä puso el miedo en el cuerpo a toda La Cer¨¢mica con el 3-2 y estuvo a punto de hacer el tercero en un esl¨¢lom ya en el descuento. Pero el Villarreal aguant¨®, Brereton y Moreno fallaron el cuarto para sentenciar, aunque se mete en la siguiente ronda y adem¨¢s le qued¨® claro en qu¨¦ debe mejorar mucho si quiere seguir avanzando en la competici¨®n.

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