¡°Sin hablar, ten¨ªamos la S¨¦ptima en la cabeza¡±
V¨ªctor S¨¢nchez del Amo, excanterano y exjugador del Madrid, rememora la temporada europea en la que el equipo blanco alz¨® la Copa de Europa 32 a?os despu¨¦s.
V¨ªctor S¨¢nchez del Amo (Madrid, 47 a?os) fue uno de los canteranos protagonistas en aquella campa?a gloriosa de la Champions 1997-98. El centrocampista jug¨® en siete partidos y marc¨® un gol al Olympiakos, al que a?os despu¨¦s entrenar¨ªa en la Superliga griega¡ Lleg¨® al Real Madrid siendo un ni?o y se march¨® siendo campe¨®n de Europa. Con la camiseta blanca particip¨® en 80 partidos, anotando nueve goles, algunos llamativos como el logrado ante el Atl¨¦tico de Madrid en el famoso derbi de Ra¨²l recorriendo el fondo sur del estadio Vicente Calder¨®n.
-Se cumplen 25 a?os de la S¨¦ptima. ?Qu¨¦ supuso para un canterano como usted ganar la Champions tras 32 a?os de espera?
- Me tengo que retrotraer porque como lo ves ahora es muy diferente a como lo ves en ese momento. Ten¨ªa 22 a?os. Hab¨ªa transcurrido la vida para m¨ª muy r¨¢pido desde que cumpl¨ª 20 hasta los 22, en esos dos a?os. Me pasaron much¨ªsimas cosas muy grandes en muy poco tiempo. Pero es verdad que el recuerdo de la Champions era como decir: ¡°?Madre m¨ªa! ?En estos dos a?os, todo lo que he conseguido!¡±. Y ahora esto tambi¨¦n es lo m¨¢ximo. Y despu¨¦s porque se hab¨ªa generado ese ambiente de la necesidad del Real Madrid de ganar la Copa de Europa, que era ese equipo idolatrado y reconocido a nivel mundial, pero que llevaba 32 a?os sin ser campe¨®n de Europa.
-?C¨®mo se gestiona ese impacto de llegar al primer equipo del Madrid, jugar en Karlsruhe, luego debutar oficialmente con Arsenio...?
-Todo va muy corriendo, muy deprisa, muy acelerado, muy r¨¢pido y se acelera. Es verdad que t¨² est¨¢s en la cantera (yo entr¨¦ con 11 a?os) y esa etapa de formaci¨®n y de crecimiento, de superar dificultades y de progreso la ves como muy lenta. Yo, en mi cabeza, nunca me imaginaba que fuese a tener la oportunidad de llegar al primer equipo del Real Madrid. Ni me lo planteaba. Me centraba en el presente, en tratar de mejorar. Siempre he tenido una mentalidad que le repito a mi hijo. La mejor cualidad que puede tener un futbolista es las ganas y la capacidad de aprender. Pero claro, esa mentalidad que has desarrollado desde infantiles te hace ser ambicioso y siempre querer m¨¢s y no conformarte.
-?Qui¨¦nes fueron sus padrinos?
-A Arsenio siempre le estar¨¦ agradecido y me encanta que haya sido ¨¦l quien me haya dado la oportunidad de debutar en Liga. Tengo muchos padres en el f¨²tbol y me encanta poder estar agradecido a todos ellos. Primero a Jorge Valdano, porque fue con el que pude debutar en partido de amistoso. Vicente del Bosque, porque para m¨ª ha sido un padre para todos los canteranos porque desde su labor director de la cantera nos ayud¨® much¨ªsimo a desarrollarnos a crecer. Entonces, cronol¨®gicamente m¨¢s menos ha sido as¨ª: Del Bosque, Valdano, Arsenio y Fabio Capello. Creo que esos cuatro entrenadores han sido important¨ªsimos en mi carrera en los inicios. Y luego, sin duda, Javier Irureta en su etapa en el Deportivo de La Coru?a.
-?D¨®nde sit¨²a el punto de partida en ese equipo que gana la Champions: con Valdano o ya con Capello?
-Creo que suman las dos. Igual con mentalidad jugador te dir¨ªa que desde la llegada de Capello, adem¨¢s, muy influenciado porque el me dio la gran oportunidad para ser titular en el Real Madrid. Apost¨® por m¨ª en un momento muy importante adem¨¢s para la historia del Madrid, porque se empezaba un ciclo nuevo despu¨¦s de una etapa muy negativa y que cuenten contigo en ese momento era mucha responsabilidad. Pero tambi¨¦n la de Valdano por el trabajo que hizo con la cantera. Hab¨ªa un grupo de jugadores que luego han sido important¨ªsimos en la historia reciente del club, como Ra¨²l, m¨¢ximo exponente, Guti, ?lvaro, Garc¨ªa Calvo, Fernando Sanz¡ De ah¨ª se empez¨® a gestar una generaci¨®n de jugadores canteranos que destacaban.
-Ese grupo ten¨ªa una cualidad en com¨²n: la ambici¨®n, y adem¨¢s se une la presencia de grandes estrellas, caso de Mijatovic, Suker, Seedorf¡ con ustedes. Esa mezcla entre canteranos y grandes estrellas fructific¨®¡
-Sin duda. El trabajo de la cantera del Real Madrid produce jugadores de esas caracter¨ªsticas. Por lo que he dicho antes: t¨² de entrada, llegas. Y el d¨ªa que llegas, te llevas una lecci¨®n de humildad y eso te viene muy bien. Porque si vas superando eso, vas mejorando, vas adquiriendo todos esos valores competitivos de mentalidad ganadora, de mentalidad de sobreponerte ante las dificultades, de buscar siempre pelear hasta el final y no dejar que la derrota se acomode en tu cabeza cuando todav¨ªa hay tiempo para seguir luchando. Y eso te lleva a tener ese esp¨ªritu. Y los canteranos claro que ten¨ªamos eso y hambre y la ambici¨®n de poder seguir creciendo. Cuando las circunstancias en el primer equipo no son buenas se abre adem¨¢s una oportunidad para los canteranos. Y ese escenario se dio en ese momento. Y luego la figura de Lorenzo Sanz. Se fich¨® muy bien. Hicieron muy buenas elecciones de jugadores, no s¨®lo por el nivel deportivo, sino por el nivel de mentalidad.
-La S¨¦ptima, y parafraseando a Van Nistelrooy, fue como quitar el tap¨®n al bote de ketchup y ya se han ganado siete Champions m¨¢s¡
- S¨ª, s¨ª. No hab¨ªa escuchado esa frase del ketchup, pero me parece muy buena. Es verdad. El potencial est¨¢ ah¨ª. Pero bueno, en el f¨²tbol, una de las cualidades m¨¢s importantes para competir es la inteligencia y la inteligencia tiene varias acepciones, una de ellas es la inteligencia emocional. Y creo que esa barrera emocional le ten¨ªa comida la moral al Madrid en Europa. F¨ªjese: la Quinta del Buitre. Uno de los equipos m¨¢s ic¨®nicos del f¨²tbol mundial, no solo en Espa?a. Esa generaci¨®n, el estilo que marc¨® el f¨²tbol, que desarroll¨®, que era un aut¨¦ntico espect¨¢culo y se qued¨® sin ser campe¨®n de Europa.
-Empiezan midi¨¦ndose al Rosenborg, al Oporto y al Olympiacos, equipo al que usted le marca un gol¡
-S¨ª, el equipo quer¨ªa salir a competir cada partido. Pero a medida que fuimos pasando, se iba haciendo m¨¢s el run run de 32 a?os sin ganar la Champions. Y sin hablar esto, esto lo ten¨ªamos todos en la cabeza. Y al final, eso se convierte en una oportunidad para hacer algo hist¨®rico. ?Mi gol? Lo recuerdo con much¨ªsimo cari?o. Cada vez que coincido con mi compa?ero Santiago Ca?izares, se lo recuerdo. Le digo, ?sabes que t¨² me has dado una asistencia en un partido de Champions? Sac¨® en una jugada de contraataque con la mano. La recog¨ª en mi campo. Y como hab¨ªa espacios, empec¨¦ conduciendo, se iban abriendo los jugadores y pensar¨ªan: ¡°Este no tiene tanto peligro como los otros y me plant¨¦ en la frontera del ¨¢rea. Dispar¨¦ con un tiro cruzado y consegu¨ª marcar. La verdad es que recuerdo mucho esa jugada y aquel gol fue muy bonito y para m¨ª muy especial, porque era mi primer gol en Champions League en el Bernab¨¦u. Y luego la curiosidad de que fue contra un equipo griego. All¨ª termin¨¦ mi carrera como futbolista y acab¨¦ siendo segundo entrenador y primer entrenador del Olympiacos.
-Que me dice de Heynckes¡
-Ese vestuario se descontrol¨® y se le escap¨® un poquito de las manos. Y sabes que siempre hay jugadores con m¨¢s o menos docilidad. Y se gener¨® un ambiente dif¨ªcil, no de que pasaran cosas graves, pero no estaba la cosa conectada con el entrenador como estaba antes, pero aun as¨ª ganamos la Champions. Yo le doy mucho m¨¦rito a esa consecuci¨®n. Para m¨ª prepar¨® muy bien la Champions, sobre todo la final. Ese trabajo, esa preparaci¨®n en la semana previa, esas charlas de motivaci¨®n¡
-Llegamos al 20 de mayo de 1998. ?msterdam. Y enfrente la Juventus¡
-Primero hablar¨ªa de la concentraci¨®n que tuvimos all¨ª en ?msterdam cuando nos desplazamos para los entrenamientos previos, porque normalmente viajas un d¨ªa antes, haces un entrenamiento en el estadio donde se va a jugar el partido, duermes y al d¨ªa siguiente es la final. Nosotros hicimos una preparaci¨®n especial y fuimos varios d¨ªas antes. Creo que una semana. El caso es que hicimos varios entrenamientos en el lugar de concentraci¨®n. No recuerdo una semana de entrenamiento de m¨¢s nivel en mi vida. La calidad que se vio de ejecuci¨®n de ejercicios, de implicaci¨®n, de motivaci¨®n, de concentraci¨®n¡ Todo eso fue impresionante. ?Qu¨¦ nivelazo de equipo ¨¦ramos! Era imposible que se nos escapase.
-Saltan al campo¡
-Un reto tan grande en lugar de verlo como una amenaza hay que verlo como una oportunidad. Dices, esta es nuestra y no se nos va a escapar. O sea, jugadores, compa?eros como Sanch¨ªs, Hierro, Redondo.... Aut¨¦nticas bestias. El d¨ªa del partido lo vimos en el t¨²nel de vestuarios. A la hora de cuando se encara la salida hacia el campo y nos juntamos los dos equipos despu¨¦s del calentamiento coincides en un metro de distancia y te miras cara a cara. En ese momento fue la confirmaci¨®n. En la cara de los jugadores de la Juve se ve¨ªa preocupaci¨®n y en las nuestras se ve¨ªa seguridad. Hay tambi¨¦n una an¨¦cdota, pero est¨¢ se la tiene que preguntar a Mijatovic. Yo me he enterado este a?o...
-Que estaba lesionado¡
-S¨ª, yo no sab¨ªa que ¨¦l se hab¨ªa lesionado un par de d¨ªas antes y cuando me lo cont¨®, me part¨ªa de risa. La reacci¨®n de decir al fisio: ¡°Me he roto. Pero ma?ana juego y como se lo digas a alguien te mato¡±. Pero bueno, teniendo a Pedro Chueca est¨¢bamos totalmente tranquilos porque es otra de las claves. Mira esa an¨¦cdota ha quedado para la historia y creo que tambi¨¦n sirve para darle valor, personalizando en Pedro Chueca, a todas las personas que hay detr¨¢s de los jugadores y de los cuerpos t¨¦cnicos que hacen un trabajo invisible. Es tan important¨ªsimo hasta tal punto que la gente no se lo puede imaginar. Y como es invisible, pocas veces se pone en valor. Y creo que este caso, el caso de Pedro Chueca, como dedic¨® toda esa noche a tratar a Pedja y consigui¨® que pudiera jugar el partido sin resentirse, marcar el gol, pues ponen valor ese trabajo invisible de toda la gente que hay detr¨¢s. Que suma mucho.
-Y tras la Champions, la celebraci¨®n¡
-Le cuento una an¨¦cdota. Una de las primeras celebraciones que empezamos a hacer fue de locura. Hablamos lo t¨ªpico: ¡°Si ganamos la Champions, nos rapamos la cabeza¡±. Varios compa?eros lo dijimos. Yo estaba de compa?ero de habitaci¨®n con Jaime S¨¢nchez. Llegamos al hotel y all¨ª nos rapamos. Y eso nos demor¨® la bajada y yo no s¨¦ por qu¨¦ la Copa de Europa la ten¨ªamos Jaime y yo y nos la hab¨ªamos llevado a nuestra habitaci¨®n. Poco a poco fueron bajando compa?eros, y bajamos nosotros. Llegamos los ¨²ltimos y con la Copa. Vamos al sal¨®n y estaban nuestros familiares esper¨¢ndonos para entrar juntos. Nos dicen que est¨¢ lleno, que no hay sitio, que no hay mesa. Y nos miramos Jaime y yo y decimos: ¡°Bueno, pues la Copa de Europa no va a cenar aqu¨ª. Si no hay sitio, tendremos que buscarlo¡±. En un momento se prepar¨® all¨ª espacio y nos prepararon mesas para para Jaime, para m¨ª y nuestras familias.
-?Qu¨¦ me dice de la Decimocuarta?
-La mentalidad ganadora del Madrid la desarrolla a trav¨¦s de esos momentos de superioridad. Y esa superaci¨®n 32 a?os despu¨¦s y volver a verte campe¨®n de Europa cuando adem¨¢s no eras el favorito¡ te lo crees. Y eso se empieza a transmitir otra vez. ?C¨®mo puede superar esas dificultades? Esa ¨²ltima Champions, la Decimocuarta, es el mejor ejemplo. Si las intentas explicar desde un prisma racional, no lo encuentras porque la explicaci¨®n est¨¢ en el plano irracional, en el plano emocional, en la capacidad para manejarte en esos momentos de dificultad, donde es el af¨¢n de superaci¨®n, las ganas de salir adelante, las que te llevan a tener ¨¦xito donde los dem¨¢s se rinden, y el Real Madrid no se rinde¡
-Usted se march¨® ese verano de 1998¡
-A m¨ª me hubiera encantado seguir en el Real Madrid muchos a?os. Tuve que tomar una decisi¨®n muy dif¨ªcil con 22 a?os y despu¨¦s de todo lo que hab¨ªa vivido en esas dos temporadas tan r¨¢pido y ganando la Liga, la Champions, siguiendo a la Selecci¨®n Sub-21 y quedando campeones de Europa. O sea, Y de repente viene un entrenador, Hiddink, que me dice que est¨¢ contento conmigo, pero que no me puede inscribir en la lista de Champions. Cuando un entrenador te dice eso, me est¨¢ diciendo que no cuenta conmigo, y analic¨¦ la situaci¨®n. Siempre he sido de buscar soluciones, no de buscar culpables. Y lo que entend¨ªa es que se pon¨ªa en riesgo mi continuidad de crecimiento. Fue muy doloroso decidir que ten¨ªa que salir del Madrid porque entend¨ªa que no iba a tener oportunidades para jugar. Me fui al Racing y all¨ª consegu¨ª un hito: comerme las uvas de una Navidad como pichichi de la liga espa?ola. Luego fui al Deportivo de La Coru?a, con un proyecto muy ambicioso y f¨ªjese todo lo que vino despu¨¦s, incluso llegar a la Selecci¨®n espa?ola¡