AJEDREZ | TORNEO DE CANDIDATOS
Siete minutos de incertidumbre y t¨ªtulo a medio punto para Nepomniachtchi
Nepomniachtchi y Nakamura empatan en tan solo siete minutos. La derrota de Ding coloca el t¨ªtulo del vigente subcampe¨®n del mundo a medio punto.
La Federaci¨®n Internacional de Ajedrez (FIDE) permite a los medios de comunicaci¨®n presenciar en directo los cinco minutos iniciales de cada ronda. La tensi¨®n que se palpa en el ambiente, a pesar de que son solo las primeras jugadas, es inenarrable. La actitud corporal y los gestos de los ajedrecistas pueden llegar a ser un reflejo de lo que pasa por sus prodigiosas mentes.
Algo parecido sucedi¨® hoy con Nakamura. Justo antes de elegir la muy estudiada Variante Berlinesa en la Apertura Espa?ola, el Gran Maestro se levant¨® para comprobar qu¨¦ estaban jugando Radjabov y Ding, su mayor rival por el segundo puesto. Debi¨® gustarle lo que vio, pues no titube¨® al meterse de lleno en una l¨ªnea de tablas te¨®ricas.
¡°Va a durar m¨¢s vuestra partida que la de Nepomniachtchi y Nakamura¡±, le coment¨® una aficionada a dos j¨®venes que jugaban a apenas unos metros de distancia de la sala de juego. Y es que, tras poco m¨¢s de siete minutos, los ajedrecistas repitieron tres veces la misma posici¨®n y certificaron el empate.
A Nepo, por supuesto, se le vio encantado con el resultado. Ya solo le falta medio punto en dos rondas para conseguir un ¨¦xito que no se repite desde 1956, pues desde que Smyslov gan¨® dos Candidatos seguidos nadie lo ha hecho. Por su parte, Nakamura cuestion¨® sus opciones de ser campe¨®n aun ganando su lance frente al l¨ªder.
¡°Incluso aunque hubiese ganado la partida no creo que tuviese muchas chances de pillar a Ian, por lo que arriesgar con negras no era una decisi¨®n pr¨¢ctica. Mi objetivo es el segundo puesto¡±, reconoci¨® el afamado streamer en su entrevista posterior a la partida.
La decisi¨®n de Hikaru, cuestionada por la mayor¨ªa de los aficionados presentes en el Palacio de Santo?a, termin¨® por salirle bien. Y pr¨¢cticamente nadie contaba con ello, pues Ding llevaba tres victorias seguidas y se enfrentaba al jugador con menos valoraci¨®n ELO del evento, Radjabov. Sin embargo, el azerbaiyano est¨¢ empe?ado en recordar que, si bien ha sido invitado por la FIDE, su calidad est¨¢ fuera de toda duda.
Teimour sorprendi¨® en el comienzo con un interesante plan que descoloc¨® a Liren. La posici¨®n se trasform¨® hacia un pe¨®n dama aislado compensado por la pareja de alfiles. El chino renunci¨® a enrocarse cuando todav¨ªa era posible y sufri¨® toda la ira de las piezas de Radjabov. Con el monarca en el centro del tablero y despu¨¦s de un preciso sacrificio de torre el punto no tard¨® en concretarse.
¡°Me arrepent¨ª de mi elecci¨®n en la apertura cuando vi que mov¨ªa Ca6 (caballo a6) muy r¨¢pido. Quise jugar a ganar, pero lo hice muy mal. Ayer gan¨¦ una partida que estaba perdida, as¨ª que podr¨ªamos decir que el ajedrez ha sido justo¡±, expres¨® Ding. ¡°Me siento en una gran forma. Estoy contento de haberle ganado a los dos jugadores contra los que m¨¢s me motivaba jugar¡±, destac¨® Radjabov.
El duelo de benjamines entre Duda y Firouzja tuvo pr¨¢cticamente de todo. Desde un juego tranquilo se pas¨®, casi sin saber c¨®mo, a una endiablada lucha en la que el polaco ten¨ªa las de ganar. Fue un nuevo cap¨ªtulo del estilo kamikaze del colista de la competici¨®n. Hoy le salv¨® que Duda tampoco est¨¢ en un momento de inspiraci¨®n muy superior. Con todo a favor para alcanzar su segundo triunfo omiti¨® una jugada que le hac¨ªa perder un alfil y no tuvo m¨¢s remedio que sellar la igualada.
Tambi¨¦n termin¨® en tablas el enfrentamiento entre Rapport y Caruana. El magiar volvi¨® a lucir la bonita chaqueta rosa con la que gan¨® su ¨²nica partida en el torneo. El norteamericano, venido a menos a nivel clasificatorio tras tres derrotas consecutivas, se pod¨ªa conformar con frenar la sangr¨ªa.
Al contrario de lo que pod¨ªa parecer en un inicio, el juego fue de lo m¨¢s entretenido, empero la correcci¨®n de los contendientes les dirigi¨® directamente hacia una secuencia forzada hacia un final de torres que precipit¨® el empate.